En el capitulo anterior ...
Eduardo
– ¿Familiares de Rebeca Rodríguez? - llamo el doctor
- Soy su prometido
– Hacemos todo lo posible, pero ella perdió mucha sangre de camino al hospital. Por otra parte, al entrar, la bala atravesó su colon transversal y perforo su estómago alojándose allí, lo que provocó una grave infección, en la que hemos estado trabajando. Ya se extrajo la bala que se le entregara a un miembro de la policía. Es todo lo que les puedo decir por ahora.
<< Mierda >> ¿Cuánto tiempo llevaba Rebeca allí dentro?, ¿Una hora? ¿Dos horas? Ella seguía peleando por su vida mientras yo estaba aquí como un idiota impotente al no poder hacer nada
<< Maldita sea >> La bala había perforado sus órganos provocando una infección, había perdido mucha sangre y podrían necesitar de donantes, ni siquiera podía recordar mi propio tipo de sangre.
-------------------------------------------
– ¿Dónde está? ¿Dónde está mi hija?
– Don Osvaldo – lo llamo acercándome
– Tu gusano infeliz, que fue lo que le hiciste a mi hija – me toma por la camiseta zamarreándome, y lo dejo hacer sin defenderme.
– Osvaldo por Dios, calma – interfiere su esposa
– Aparta mujer, que este infeliz es el culpable de que mi hija este muriendo allí dentro, mientras él no tiene ni un solo rasguño – conecto su puño con mi mandíbula, entonces antes de que lograra conectarme otro golpe Luciano lo alejo con facilidad de mí, tomándolo por la espalda, para ser un hombre de casi sesenta años debía admitir que tenían un buen derechazo. En otras circunstancias ni siquiera habría logrado rozarme, pero se lo permití porque de alguna forma comprendía su sentir. El padre de Rebeca mantenía su mirada en mí, observándome como listo para atacar una vez más.
– Por favor señores, comportémonos estamos en un hospital – se acercó mi padre para poner calma.
– ¿Qué se ha sabido? – pregunto Cecilia.
– Ella sigue luchando por su vida – le explico mi madre.
– La bala dio en sus intestinos y desato una infección en la que los doctores estuvieron trabajando, perdió mucha sangre antes de llegar al hospital lo que ha complicado un poco su situación, pero los doctores siguen trabajando – les explique – Miriam entro al quirófano como observadora.
– ¡Una bala! ¿Cómo pudieron dispararle a nuestra hija? – a Osvaldo se le quebró la voz mientras negaba – Creí que habían sufrido un accidente automovilístico.
– No, Eduardo y Rebeca fueron rehenes de una sociopatía que por años estuvo robando dentro de la empresa – explico mi padre.
<< Desearía haber sido yo, en vez de ella >> pensé, siendo consiente en que daría todo por estar en su lugar.
Más tarde Bianca Herrera, la cirujana en jefe del hospital, con toda calma y lujo de detalle nos explicó cada uno de los procedimientos hechos a Rebeca mientras estaba en el quirófano, desde detener la hemorragia, limpiar y suturar todo lo que la bala perforo hasta terminar e incluso como tuvieron que ponerla en un coma inducido. Rebeca aún no estaba fuera de peligro del todo, esta noche seria decisiva para ella, pues los doctores aún necesitaban saber los resultados de las intervenciones en ella. Por lo que seria monitoreada constantemente.
ESTÁS LEYENDO
Cásate Conmigo
RomanceTodo lo que quiere Eduardo es algo de paz, a pesar de la prensa, los socios de su empresa y su familia. Todo lo que quiere Rebeca es la custodia de su hijo, a pesar de la justicia que la califica como no apta. Los problemas de Eduardo se solucionar...