Capítulo 62

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-¿Quién fue el desgraciado que hizo tu horario? –suspiró Sasuke sobándose la frente claramente cansado.

Con esa ya iban a ser tres clases que compartía con el rubio en el día, y aún faltaban otras dos horas más. Naruto se quedó parado en la puerta del aula intentando procesar todo esto ¿Acaso era una forma de joderlo por parte de la vieja borracha y el pervertido verde? Esa clase lo tendría con la primera, y estaba seguro que cuando se enterara de todas las cosas lo molestaría con todo el poder que podía tener la sub directora.

-¿Naruto? –escuchó decir atrás suyo.

-¿También te toca esta clase, Gaara?

El nombrando asintió con la cabeza mientras intentaba avanzar junto con el rubio, miró que Sasuke estaba sentado en una de las mesas delanteras y no le bastó mucho unir cabos sueltos, a pesar de ser tan unidos en corto tiempo parecían odiarse.

-Avanza que Tsunade sensei es muy estricta –aclaró, mientras lo empujaba a la mesa que se encontraba detrás de Sasuke.

-¿Otra vez atrás de la cacatúa? –inquirió bostezando, no había podido dormir lo suficiente y los profesores parecían no entender ese sentimiento de sueño cuando van a la escuela.

-Te puedo oír –le dijo el azabache molesto. Giró la silla para poder estar delante de ellos, sin más Naruto acomodó su mochila como almohada y puso su cabeza encima.

-Lo sé, por algo lo dije –susurró, claramente elocuente para ambos.

Gaara rió mientras esperaba que las clases se llenen. A lo lejos pudieron ver a Sakura junto con Choji y Shikamaru que pasaban saludándolos, los dos primeros se sentaron detrás de Gaara con Naruto mientras que el último le preguntaba al Uchiha si podía tomar sitio a su lado ya que el resto de mesas estaban llenas.

Sasuke asintió con la cabeza aburrido, y sin que nadie se diera cuenta giraba de reojo la vista para poder ver al rubio. Seguía con el mismo pensamiento del día anterior, verlo dormido era algo sumamente lindo, este parecía un zorrito todo indefenso en medio de una clase de lobos hambrientos.

A pesar de que ese solo era un disfraz para ocultar al demonio que vivía dentro.

Naruto entonces movió su cabeza hacia delante intentando buscar una mejor posición, dándole una mejor vista de su perfil al azabache ¿Cómo era posible que alguien que se veía tan indefenso podía cometer tales acciones? Él no era gay ni nada, pero si Naruto fuera una chica normal y no un asesino, de seguro le pediría salir algún día.

Entonces sorpresivamente una de las gemas azules lo miró, como diciéndole "¿Otra vez me estás observándome?" sin decir palabra alguna, aún tenía sueño, pero el sentirse acosado no lo dejaba descansar tranquilo. Sasuke avergonzado giró la cabeza de golpe para prestar atención a la clase que recién comenzaba, aun pensando en diversas formas de engañar a Naruto, quién mientras tanto, volvía a su sueño de belleza que de seguro duraría todo el tiempo que demoraba Tsunade en descubrir que no le prestaba atención.

-Hoy veremos un tema muy importante sobre los genes –comentó Tsunade prendiendo el proyector con un control manual-, hablaremos sobre diversos casos que se han dado en el mundo con intentos de crear una nueva raza.

Aquello parecía más una clase de historia mezclada con ciencia ficción que tutoría, pero nadie tenía el valor suficiente como para decirle eso a la sub directora. Era una presentación muy rara, titulada "Experimentos en época de guerra", un montón de proyectos que habían intentado los japoneses, rusos, franceses y alemanes para crear a una raza superior.

-A finales de la segunda guerra mundial –empezó a relatar, poniendo una imagen en blanco y negro de diversos huesos en tierra aria-, diversos países habían intentado crear a una raza superhumana, para que librara las guerras en lugar de soldados normales.

Buscado por amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora