Esta historia es la continuación de Soy Luna, pero enfocada en Ámbar y Simón, el comienzo de una relación extraña en un primer momento y su desarrollo.
Al parecer Ámbar se volvió "buena" y Simón aun esta recuperándose de la ruptura con Luna. Se dan...
Acariciaba su espalda desde el cuello hasta la parte baja de su espalda, de arriba a bajo simulando tocar una melodía en su guitarra, tocarla era lo mismo que escribir la màs dulce melodía para Simon, lo que también provocaba que Ámbar se estremeciera por completo. Sus besos se volvían màs intensos segundo a segundo, sus lenguas bailaban una danza, se separaron para respirar y se miraron, algo era diferente, ella lo sentía aunque no podía descifrar que era... El la tomo de la mejilla, deslizo su mano hacia su cuello atrayendola cada vez mas cerca de sus labios para volver a besarla. Siguieron así por un largo rato disfrutando de cada caricia, aunque ya no aguantaban mas las:
- Simon por favor quiero estar contigo (Hacia puchero)
- Como decirte que no vestida así y diciéndome eso...
Concreto su acción sin dudarlo, provocando que ambos respiren agitados, ella en volvió sus pies a la cintura del mexicano y el la alzo apoyando su espalda contra la pared. Las envestidas eran cada vez mas fuertes, entre el ajetreo pronunciaron al mismo tiempo con dificultad esas dos palabras que tanto les costaba decir anteriormente.
- Te amo.
Cuando todo llego a su fin, él la abrazo muy fuerte, como si no quisiera soltarla nunca, enterro su cabeza en su cuello, ella acaricio su cabeza aun extrañada por esa corazonada de que algo no andaba bien.
- Algo es diferente.
- Que?
- Si algo esta mal.
- El joven mexicano sabia que ella poseía una gran perspicacia, sin embargo aun le sorprendía como podía intuir que algo no andaba bien y sonrió) como te diste cuenta?
- No lo se, la forma en que hicimos el amor fue diferente.
- Fue muy malo (rasco su nuca nervioso por la respuesta)
- No, claro que no, todas las veces son especiales, me dajas sin aliento, entrego todo lo que siento por ti con tanta fuerza que me dejas exhausta a la vez siento que vos me entregas de la misma manera tu amor, es un ida y vuelta. hacer el amor juntos es un privilegio Simon. Es que presentí como si hubiese tristeza en tus caricias, miedo o algo... no puedo explicarlo de manera clara.
- Eres sorprendente (le sonrió) si me pasa algo, tengo un terror enorme a perderte.
- Eso no va a pasar (tomo sus manos) porque decís eso.
- Mira esta foto (le muestra la foto de Jazmín)
- (Ámbar miro la foto y toco su pecho, algo era familiar en esas personas aunque no las conocía) quienes son?
- Ámbar vamos al comedor nos esperan Mateo y Luna, debo decirte algo.
- Y ellos que tienen que ver?
- Acompáñame.
...
En el comedor los cuatro se sentaron en la gran mesa donde se sirven los almuerzos solitarios y silenciosos, nuevamente estaban reunidos por una situación que sin ser conscientes todavía les compete a todos.
- Sabes que no me gusta que me hagan esperar.
Simon se dispuso a contar lo sucedido en el día, tomaba la mano de Ámbar, cuando termino de relatar esta lo soltó de forma brusca.
- Le vas a creer a una estafadora que se quiere aprovechar de que mis padre están de viaje y que yo no me acuerdo de ellos, para sacarle dinero a mi madrina, sos patetico, no te das cuenta que es peligrosa.
- Reina no le hables así al guitarrista, solo esta contándote lo que le dijeron, necesitamos saber si lo que dijo esta mujer es cierto.
- La joven de la foto es claramente la estafadora, eso no lo podemos negar, era una mujer muy bella y parecía refinada.
- Podría ser su hija y quiere aparentar que era ella de joven, por eso no me dio miedo en un principio, pero después mostró las garras.
- Por eso mismo bonita, debemos averiguar si esto es verdad.
- No puedo aceptar que eso sea verdad, ademas mi madrina puede ser fría, dura, hasta manipuladora si se quiere, pero no es una asesina.
- Recordas algo de esa tal Sol?, aparentemente es tu prima reina.
- No, solo se que mi madrina estaba hablando de ella hace poco lo escuche mientras hablaba por teléfono, también le decía a rey que esa mujer no podía acercarse a mi, seguro porque me estaba cuidando chicos.
- Tranquila Ambar le dijo Luna, llegaremos al fondo de este problema. (ella solo la miro)
- Me dejan hablar a solas con Simon.
- Claro que si reina.
- Mateo (antes de que se valla lo abraza), gracias por estar para mi, nunca me dejaras verdad?
- Claro que no. Sos mi pieza de rompecabezas.
- Gracias a vos también Luna ( se dieron la mano, aunque la pequeña mexicana le dio un sorpresivo abrazo, al principio se tenso pero luego se lo devolvió).
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