fe(male) ◇YM◇

31

—Jimin—Canturreó alguien a sus espaldas, tratando de llamar su atención.

Sin embargo, cuando el chico hubo reconocido aquella voz, simplemente continuó caminando sin voltear a mirar sobre su hombro.

—¡Eh! Jimin—Escuchó, ahora de manera mas autoritaria.

El chico mordió su labio inferior, siguiendo con su camino, a sabiendas de que nada bueno iba a salir de aquello; y entonces, cuando la salida del edificio del instituto estaba prácticamente frente a él, alguien agarró el asa de su mochila y tiró de ella.

—Te estoy llamando, princesita. ¿Acaso no me oyes?—Preguntó Namjoon aún detrás de su cuerpo, hablando en tono bajo junto a su oído.

Jimin sintió como su cuerpo se contraía, haciéndole sentir pequeño; y a pesar de no poder verse, sabía que sus ojos transmitían lo aterrado que estaba.

—Voy a recordarte algo—Dijo, volteando el cuerpo del menor y apuntando en el pecho de este con uno de sus dedos—Tu estás en deuda conmigo, así que probablemente sea conveniente para ti no enfadarme. ¿He sido lo suficientemente claro?

Jimin asintió efusivamente, y una sonrisa torcida apareció en los labios de Namjoon.

—Bueno saberlo...

—¿Puedo irme ahora?—Preguntó el menor tan fríamente como pudo, a pesar de estar temiendo que marcharse de allí solo enfureciese al contrario; y se sorprendió a si mismo al percatarse de que su voz no había temblado.

—Oh, vamos...—Sonrió—Yo estaba pensando en divertirnos un poco los dos juntos—Dijo con voz grave, disminuyendo levemente la poca distancia que separaba sus cuerpos.

Pero en el tono aparentemente dulce que había usado, Jimin pudo sentir algo oscuro, algo que gritaba peligro.

—N-no creo que sea una buena idea—Dijo antes de tratar de voltearse, dirigíendose así hacia la salida.

—Eh, eh, eh—Le detuvo, agarrando bruscamente su muñeca—Para ahí, ¿quién coño te ha dado permiso para irte?

—Deja de tocar las pelotas, ¿quieres?—Intervino una tercera voz tras ellos.

El mas alto volteó, y cuando vio al delgado chico tras él, no pudo evitar sonreír levemente satisfecho.

—Yoongi—Saludó con una sonrisa maliciosa; pero el chico simplemente siguió caminando, pasando junto a sus cuerpos—¿Quieres unirte a la fiesta?

—Vamos, Jimin—Le llamó, ignorando las palabras del muchacho, y levemente adelantado al lugar en el que Namjoon retenía al menor, pero claramente esperando por él.

El menor miró el cuerpo del mas alto durante unos segundos, antes de girar sobre si mismo a fin de seguir el cuerpo del pelinegro.

Namjoon rió.

—Yoongi, Yoongi...Realmente pensé que serías de esos que querrían tener un trío. Quiero decir, mira a Jimin, estoy totalmente seguro de que no se negaría; a propósito ¿le has enseñado ya a chuparte bien la polla?

Yoongi se detuvo, y rápidamente se situó a escasos centímetros de Namjoon; acercándose peligrósamente a su rostro.

—Lo diré una vez mas, deja de tocarme las putas pelotas.

El mas alto resopló divertido.

—¿O qué?—Preguntó desafiante.

—No quieres verme enfadado—Se limitó a decir como advertencia, antes de voltearse, agarrar la mano de Jimin, y tirar de él en dirección a la salida, dispuesto a marcharse de una vez por todas del instituto.