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—¿Cuál es la masa de oxígeno en gramos que se puede disolver en un litro de agua a cero grados centígrados, manteniendo la presión de una atmósfera?—Preguntó Jimin en volumen bajo.

El mayor hizo un pequeño puchero, pensativo, rascando su cabeza con la punta del lápiz que sujetaba.

—¿Ninguna?—Preguntó confuso.

Jimin sonrió a la par que negaba, bajando la mirada a la hoja llena de preguntas que había preparado para ayudar a Yoongi a estudiar para su examen.

—A cero grados es de 0.07, a veinte grados es 0.04, a cuarenta-

—A cuarenta, 0.03, y a sesenta... ¿0.02?

El menor asintió satisfecho.

—¿Qué significa que una disolución está muy concentrada?—Preguntó nuevamente Jimin.

—Esta me la sé—Aseguró el mayor—Es cuando la proporción de... ¿soluto? es muy elevada; quiero decir, como cuando... En plan... Es cuando la concentración es próxima al valor de su solubilidad, ¿no?—Acabó preguntando, cada vez menos convencido de haber acertado con su respuesta.

El castaño asintió de nuevo, y Yoongi le imitó asintiendo para sí, como si se felicitase a sí mismo por haber sido capaz de recordar la respuesta.

—No quiero hacer esto—Se quejó—¿Por qué yo tengo que hacer esto y tu no?—Preguntó en un infantil gruñido, apoyando la frente sobre la superficie de la mesa mientras formaba un puchero con sus labios.

—Porque yo aprobé el examen. Y tu no.

—Eres cruel... Se suponía que ibas a enseñarme para que yo también pudiera pasarlo—Se quejó levantando la mirada—Eres un profesor pésimo...

—En ese caso creo que me iré—Dijo en un susurro, tratando de no molestar al resto de personas que estudiaban en aquella biblioteca, a la par que hacía el amago de levantarse, fingiendo haber tomado en serio las palabras de Yoongi.

Y este, extendió rápidamente el brazo sobre la mesa a fin de agarrar la manga de la camiseta de Jimin, e impedir así que este se fuese realmente.

—No te vayas...—Murmuró sin despegar su mirada de los ojos del menor.

—No iba a hacerlo—Dijo de igual modo.

Y Yoongi retiró la mano mientras sonreía levemente bajando la mirada.

El castaño imitó su acción, apartando sus orbes de los del contrario para bajarlos a la hoja que estaba sosteniendo, a la vez que mordía nervioso su labio inferior.

No podía creer que estuviese planteándose algo como aquello, mucho menos en una biblioteca.

Movió su pierna de manera errática, presa de la ansiedad; y cuando levantó la mirada para encontrarse con la del contrario, su respiración se quedó atascada en sus pulmones.

"Tienes que hacerlo." Se dijo. "Deja de ser un cobarde."

Y por ello, tras inhalar una bocanada de oxígeno tratando fallidamente de relajarse, procedió a murmurar aquello que había estado pensando decir al chico durante los últimos días.

—¿Quieres ser mi novio?—Preguntó en un hilo de voz, pronunciando las palabras un tirón, como quien quita rápidamente una tirita.

Los ojos de Yoongi se abrieron con sorpresa, y parpadeó repetidamente observando cómo las mejillas de su acompañante enrojecían a gran velocidad.

—S-solo sería una manera de formalizar esto; lo que somos—Trató de justificarse, gesticulando de manera exagerada.

—No es justo—Se quejó sin quitar una brillante sonrisa de sus labios—Yo quería preguntarte eso.

fe(male) ◇YM◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora