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Capitulo 87 - "¿Qué mas pasará?"

Parecía como si el jurado se tardara más en decir veredicto. Layla y su madre no dejaban de verse, tenían los nervios de punta. Todos se pusieron de pie. Layla agudizó su oído.

–El jurado la declara inocente –Dijo una señorita. Layla brincó de felicidad. A Antonia se le cristalizaron los ojos.

Mientras todo el mundo festejaba ahí en la sala, el juez pedía orden y Francisco tocaba su pecho. El anciano era la única persona que no festejaba. Layla lo miró y al instante se calmó.

– ¿Abuelo? ¿Estás bien? –Preguntó. Todo el mundo paró de festejar y miraron a Francisco –. ¿Qué pasa?

–Mi corazón –Apenas articuló esas palabras, cuando comenzó a caer lentamente al piso, quedando de rodillas.

Layla permaneció mirando cómo se llevaban a Francisco. Las lágrimas no cesaban y su respiración se agitaba cada vez más. Jahir se acercó, la tomó del brazo y Layla lo quitó al instante.

– ¡Déjame! –Exclamó. Jahir asintió, para después ver como huía la chica.

Solo comenzó a correr sin rumbo. « ¡No es posible!» Se decía una y otra vez cuando se le venía a la mente las imágenes cuando aquellas personas encerraban el cuerpo de Francisco en una bolsa negra. Paró de correr, estaba en unas calles que no conocía, así que comenzó a caminar lentamente, y mirando hacia todos lados.

Comenzaba a hacer más frío. Su celular sonaba una y otra vez, en el identificador decía “Paula”, Layla no contestaba.

Miró hacia atrás. Intentó sonreír al ver quien la perseguía.

–Lo siento mucho –Dijo Jahir. Layla retrocedió y lo abrazó fuertemente.

–Mi felicidad siempre se ve malditamente arruinada –Dijo la chica sin deshacer el abrazo.

Jahir no dijo nada. Layla no paraba de llorar. Todo esto era demasiado para ella. Apenas habían liberado a su madre, cuando sucedió eso.

–No puedes estar siempre huyendo –Dijo Jahir.

–Y si me quedo ¿Quién mas morirá? ¿Qué más pasará?

–No es tu culpa –Dijo Jahir.

–No, si lo es –Layla deshizo el abrazo y se quitó su gorro invernal para después arrojarlo. Rasguñó su cara desesperadamente. Jahir la volvió a abrazar.

–Un paro cardiaco –Contestó Paula. Antonia cerró sus ojos mientras salían millones de lágrimas.

Dagna solo estaba parada y callada al igual que Jack.

–Layla, tenemos que regresar.

–No –Dijo Layla mientras lo abrazaba aún más fuerte.

–Tienes que estar con Paula y Antonia, debes de acompañarlas.

–Será aún más difícil para mí.

–Yo sé, pero…

–Vamos.

Caminaron de regreso, sabían que estaba muy lejos, ya que había comenzado a obscurecer, pero no les importaba, según decía Layla “Mientras mas nos tardemos, mejor”.

– ¿No crees que estás siendo egoísta? –Preguntó Jahir.

–No sabría cómo comportarme en frente de ellas. Quiero parecer fuerte.

–Que hayas huido no te hace parecer fuerte.

–Ya lo sé.