35-Acercamiento

84 23 3
                                    

Me quedo callada, sin responder a su estúpida pregunta. ¿En qué cojones se habrá metido este tío ahora? Él tan sólo me mira con el ceño fruncido, esperando.

–No voy a prometerte una mierda —le respondo sin rodeos— ¿Que has echo?

–Lo que te he contado al principio es cierto —añade haciendo caso omiso a mi comentario— Cuando los vi ir a tu habitación, llamé a Jorge y le dije que estabas en peligro.

–¿Que? —le digo sorprendida— Pero...

–Déjame, explicarte todo —me interrumpe con la cabeza agachada— luego ya me dirás lo que piensas —afirmo con la cabeza y sigue.

–Le conté donde estabas, dijo que en unos minutos vendrían sus hombres, no le llegue a decir que se trataba de su padre. Cuando llegaron se lió un tiroteo y los otros salieron huyendo, en ese momento aproveche para ir a buscarte —levanta la mirada y veo a traves de ella rabia y tristeza— te encontré prácticamente desnuda, aún conservabas tu ropa interior, pero destrozada.

Me levanto con dificultad, él intenta agarrarme el brazo para ayudarme, pero me aparto con brusquedad. Entro al baño y me miro en el espejo, sin creer que sea la misma persona. Cierro los ojos sintiendo como mi cara se va empapando por el llanto, apoyo la espalda en la pared y me deslizo hasta quedar sentada en el suelo. Aiden con un brazo en la espalda y otra debajo de las rodillas me carga hasta la ducha, abriendo el grifo con los dos entrando vestidos.

–Saca todo lo que llevas años guardandote —murmura con dulzura— no dejes que te siga destruyendo.

Como si hubiese presionado un botón, empiezo a llorar y a gritar, cuando todos mis recuerdos empiezan a pasar por mi mente como una película. Después de desahogarme como nunca lo había hecho, me quedo en silencio en sus brazos. Al cabo de un rato, levanto la cabeza y nuestras miradas conectan.

–Deberías salir o te vas a enfermar —añade dejando mis piernas en el suelo— voy a por una toalla.

Sin perder el contacto visual le acaricio la cara suavemente, acercándome hasta chocar sus labios contra los míos.

–Ahora no creo que sea el momento para esto —susurra, encima de mis labios— no es que no quiera... que de querer quiero, es decir... —añade nervioso.

No le dejo terminar la frase, cuando le callo con un beso. Paso mis brazos por su nuca y acerco mi cuerpo a él, notando su camiseta mojada pegándose a la mía. Con dulzura me abraza por la cintura, hasta sin quedar ningún espacio entre nosotros. Su lengua me pide paso y le doy acceso, dando unos pasos hacia atrás, hasta notar el frío de los azulejos. Nos separamos por falta de aire y apoya su frente contra la mía.

–¿Estás segura de que esto es lo que quieres? —pregunta jadeando— No quiero que te arrepientas.

–¿Te han dicho alguna vez, que preguntas demasido —le respondo burlona— Sé perfectamente lo que estoy haciendo.

Escuchamos la melodia del teléfono de Aiden, cierro el grifo y el va a por unas toallas mojando todo el suelo, me da una y nos empezamos a secar. De repente suena de nuevo su móvil y se va a contestar. Mientras me seco el pelo camino hacia él y me doy cuenta con quien está hablando "Alison" le dice dos frases y al colgar se gira.

–No tienes porque darme explicaciones —añado, antes que diga algo— tan sólo ha sido un beso.

–Para mí no sólo significa eso. —responde apartandome un mechón de la cara— Me importas... Y mucho.

–No me gustan las cursilerias  —replico, poniéndome a la defensiva— mejor dejemos esto aquí.

–Ese es tu problema, huyes de lo que sientes —contesta acercándose a mí— deja que las cosas fluyan, no seas cobarde.

–¿Cobarde? —le respondo subiendo el tono— lo dice, quien tiene planes para mudarse con su novia, teniendo sentímientos hacia mí y no es capaz de dejarla. —pongo los ojos en blanco— mejor callate.

–¿Quién te ha dicho que no la voy a dejar? —me susurra en el oído— señorita, no hables de lo que no sabes.

Un escalofrío recorre mi espina dorsal y unas mariposas revolotean en mi estómago. Si antes estaba agobiada, ahora estoy peor. ¿Qué voy hacer para dejar de sentir esto?

Verdades Ocultas (Capítulos Cortos) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora