Verdades Ocultas (Capítulos Cortos)

53-Provocación

Dedicado a lamenorsitaa
carlusky_16
LauraRodri25

Detrás de Morales vienen sus guardaespaldas y Jorge, este último se posiciona a mi lado y me agarra de la cintura con firmeza ante los ojos de todos.
No hace falta ni mirarlos para saber la cara de confusión que deben tener en este momento, pero ya las cartas están echadas y no hay vuelta atrás, tarde o temprano se acabarán enterando de mis planes, lo único que me jode realmente es mi hermana, tendría que haberle dicho lo que pretendía hacer, sin embargo no me he atrevido porque sé que no lo entendería.

–Pequeña, dile a mi preciado hijo que te suelte, no querrás molestarme ¿Verdad? —dice sonriendo.

–No te atrevas a amenazarla querido padre. —le replica con tranquilidad— recuerda que es prácticamente de la familia.

–Cuidado muchacho, no te conviene seguir por ese camino. —le advierte señalándole con el dedo— Tienes una semana para pensarlo bien o atente a las consecuencias.

Al terminar de decir eso me fulmina con la mirada y se va seguido por sus matones.
No me puedo creer que se haya enfrentado de esta forma tan directa ¡Definitivamente esto es una puta locura!.
Aunque lo que realmente me preocupa es Sara, la ojeada tan lasciva que le ha echado, no me ha gustado ni un pelo.
Le exijo a Jorge que se vaya y que luego le llamaré, no quiero otra pelea entre Daniel y él, demasiados problemas tenemos ya como agregarle otro más.

–Ahora no. —les advierto antes que digan algo— Me largo, mañana nos vemos. —añado encaminandome a mi coche.

–¿Cómo es eso de que te casas con ese tío? —me pregunta ella siguiéndome— ¿Qué está pasando? —prosigue sujetándome del brazo.

–Te he dicho que ahora no. —bramo soltandome de un tirón— ¡Confía en mí maldita sea! Sé lo que estoy haciendo.

–No paras de repetir eso. —murmura con la voz entrecortada— ¡Pero la que no confía en mí eres tú! No me cuentas nada, me tengo que enterar de todo por los demás.

La estrecho entre mis brazos con fuerza y le doy un beso en la cabeza en silencio, al parecer entiende lo que quiero decirle con ese gesto, porque simplemente afirma con la cabeza.
Aunque parezca un tontería, así era la única manera que podía expresarme cuando éramos pequeñas y no podía hablar, al principio no dejaba de interrogarme, hasta que aprendió a entender lo que significaba.
Me despido diciéndole a mi hermana que tenga cuidado con Morales y que me llame cualquier cosa, acto seguido me subo al coche escuchando a Daniel llamándome, le respondo que ya hablaremos y arranco para salir de allí a toda velocidad.
Por el camino no dejo de darle vueltas a todo lo que ha pasado y una angustia se apodera de mi pecho, empiezo a dudar que haya sido buena idea provocarle así, me da pánico tan solo de pensar que le pueda hacer algo Sara. Sin darme cuenta ya veo la fachada del edificio y aparco,
Me apresuro para llegar a la entrada mirando hacia todos lados para ver si me han seguido, al comprobar que no hay nadie suspiro aliviada.

Nada más entrar en casa me voy directa a darme una ducha para relajarme, no sé cuanto tiempo pasa, pero cuando me quiero dar cuenta tengo los dedos arrugados. Al terminar agarró un vestido playero que me llega más arriba de las rodillas y me acuesto en la cama quedándome dormida al poco rato.

El sonido del timbre me despierta sobresaltada, me levanto entre confundía y cabreada porque a quien le dé por estar tocando a estas horas  se le olvidó sacar el puto dedo del interruptor, voy a pasos rápidos a abrir la puerta para evitar que despierte a medio vecindario con el escándalo. Me quedo horrorizada al ver a Aiden con la cara golpeada y ensangrentada.

–Por poco me matan —musita sonriendo agarrándose las costillas.

Le dejo pasar y mientras él se sienta con dificultad, voy a por el botiquín, al volver veo que se ha quitado la camiseta dejando al descubierto todos los cardenales que le han dejado por la paliza.

–¿Acaso se han enterado de quién eres? —le pregunto observándole detenidamente—  Cuéntame todo lo que ha pasado con detalles. —prosigo resaltando las últimas palabras.