El Silencio Dijo Sí

No le abracé lo suficiente

-¿Y ya os llevais mejor?
-Mamá,¿tú también?
-Julia...
-Lo entiendo perfectamente,tiene tres años.
-Se aprovecha de lo buena que eres.

Admito riendo lo que todos pensamos.
Gala era demasiado espabilada y aprovechando que su hermana le perdonaba todo ,las trastadas siempre le tocaban a ella.
Y Julia,Julia era demasiado buena,me habia llamado solo porque me había visto agobiada y aunque lo seguía siempre buscaría un hueco para atender sus llamadas y despejarme con su sonrisa.

Escucho a Luis por detrás decirle a Julia que es tarde y que ya Gala está preparada.

-Nos tenemos que ir.
-¿Vais a salir?
-Papá ha quedado con una amiga del trabajo.

No debería importarme en absoluto pero lo cierto es que se me remueve algo por dentro.

-Os puede dejar aquí si quiere...
-Nos va a llevar así que no creo que sea más que una amiga...tranquila.

Suspiro y sonrío de medio lado,sus indirectas nunca iban a acabar.

-No he dicho que me preocupe.
-Ya sé que hay muchas cosas que no decís.

Y por enésima vez no le puedo quitar la razón.

-Anda,ve,papá te va a regañar.
-¿Le doy un besito o algo de tu parte?

Se ríe y no sé como tomarmelo.
Constantemente nos saludabamos con besos y no suponía ningún problema.

-Y guarda uno para Gala y otro para ti.
-Adiós,te quiero.
-Y yo cariño.

Decido abrir los mensajes de mi teléfono encontrando uno de Luis.
Una foto en la que las niñas se abrazan y que como pie de foto viene a indicar que se han reconciliado.
Y sí,a pesar del daño seguiamos mirandonos a los ojos,sonriendonos y aceptandonos llamadas y mensajes.

Sonrío inconscientemente ante el gesto de que para él sea importante sellar el acto de nuestras hijas con una foto para que yo no me pierda nada.
A pesar de no ser creyente le había hablado a Dios con lágrimas en los ojos muchas noches con el único fin de entendernos.

Y me encontraba ahí,tirada en la cama mirando la galería de mi móvil y encontrando fotos suyas que me hacen volver a llorar.
Algunas de ellas se las habia hecho sin que se diera cuenta.Su pelo estaba desordenado,sus ojos cerrados y su sonrisa era de mis favoritas,la de medio lado.

Recuerdo que una de esas fotos se la hice nuestra última noche juntos.
No sabía que esa sería la última y ahora estoy segura de que no le abracé lo suficiente.