El Silencio Dijo Sí

A una vida

Me encontraba en la puerta,con una niña agarrada a cada una de mis manos arriesgandome a que me abriera una Aitana acompañada.

La puerta se abre dando paso a una Aitana ya arreglada,lo que me sorprende siendo tan temprano.

-¿Vas a salir?Me puedo llevar a las niñas otra vez.
-No,tranquilo,entran en mi plan.

Mi cabeza da mil vueltas mientras las niñas saludan a su madre y Julia le reconoce lo guapa que está.

-Me voy,si me necesitáis llamad.
-¿Estás bien?

La pregunta mágica.
No lo sabía.No sabía si estaba bien,si quería dormir por tres días o simplemente necesitaba decir que no,que no estaba bien.

-Sí,tranquila.

Hago el amago de irme pero su inconfundible voz severa me interrumpe.

-Pasa.
-Ibas a salir,¿no?
-Puede esperar.

No debería ser así pero ese simple gesto me da las alas que hacía tiempo no tenía para despegar un poco el vuelo.

-¿Te has puesto muy guapa no?
-La ocasión lo merece.

Quizá mi siguente paso era masoquista.

-¿Y cuál es esa ocasión tan importante? Si se puede saber.
-Helado con Aiti y Amaia,todo un acontecimiento.

Me río por su sonrisa al pronunciar esa frase.
Y me río por pensar que se arreglaba más de la cuenta por algo más que por ella.Porque nadie merecía tanto ese pintalabios rojo como ella misma.

-¿Te puedo contar algo?
-Lo que quieras.
-He dejado a Miriam.

Sonríe con superioridad confundiendome a sobremanera.

-Ayer pasé todo el dia y toda la noche con Amaia,sabes que tiene incontinencia verbal.

Me río por no matar a Amaia pero pronto me doy cuenta de que mis cálculos fallan.

-¿No habías ido a cenar?
-A casa de Amaia.

Me rasco la nuca nervioso mientras busco las palabras exactas para que no se me note la esperanza que me acaba de volver al cuerpo en cuestión de segundos.

-¿Y esta noche haces algo?
-Si tú quieres cenar conmigo sí.
-¿Me está invitando a cenar,señorita Ocaña?
-Le estoy invitando a pasar una noche conmigo y prolongarlo a una vida.