El Silencio Dijo Sí

40 grados bajo la lluvia

Me despierto sin Aitana.
A pesar de nuestro distanciamiento en la última semana seguíamos durmiendo juntos.
Decido bajar a desayunar pero antes de llegar a la cocina me distrae un papel doblado en el salón que lleva mi nombre.

"Te estarás preguntando dónde estoy.
He querido dejarte espacio para que leas esto,volveré dentro de unas horas,cuando tenga la certeza de que te has despertado,te has tomado tu café matutino y has leído esta carta que más que una carta es una disculpa.
Es un perdón por esta semana que no te mereces.
No te mereces ver una foto mía en una red social dándome un beso con alguien que no eres tú.
No te mereces que no tenga una explicación para darte.
Aunque a estas alturas ya deberías saber que te quiero solo a ti te llego a entender,porque he pasado muchísimo tiempo con el,porque Amaia también te ha dicho que lo ha notado.
Porque la única idiota que no se ha dado cuenta de que quería jugar conmigo he sido yo.
¿Sabes? Te admiro enormemente.
Aún sabiéndolo todo y estando celoso a más no poder me incitaste a ir a esa fiesta,me alentaste a seguir viéndolo arriesgándote a perderme.
Son tonterías.No me vas a perder nunca.
Aunque tú quisieras que yo me perdiera,aún así,seguiría contigo.
Luis,sé que no he sido de lo mejorcito y que te he dado muchísimos dolores de cabeza como diría mi madre pero no me imagino despertar ni un día más sin tus "buenos días" o acostarme a tu lado sabiendo que no me podré refugiar en tu pecho si tengo una pesadilla durante la noche.
No me imagino un domingo más sin ese sofá acupado por los dos pero acupando el sitio de uno.
No me imagino un día más sin tus besos diarios en mi cabeza.
No me imagino sin ti.
Solía pensar que lo ideal sería tener la cabeza en el pecho y el corazón en el cráneo ,así pensaríamos con amor y amaríamos con inteligencia.Hasta que te conocí a ti y entendí que el amor no puede ser inteligente,es lo más idiota y cierto del mundo.
Tienes muchas cosas especiales y una de ellas es mi forma de mirarte.
Tienes la sonrisa más adictiva que haya visto en mi vida.
Te prometo que en este tiempo que hemos estado juntos no he pensado en nadie que no seas tú.
No se me olvidan las promesas,me hiciste prometerte que si me gustaba alguien te lo diría y no he roto el pacto.
Aunque...¿te he dicho que me gustas?
Te diría que empezáramos de cero pero eso sería un delito.
Sería un delito perderme todas esas sonrisas que he visto.
Sería un delito perderme todas esas cosquillas y todos esos "idiota".
Sería un delito perderme los 100.000 besos en mi cabeza.
Sería un delito volver a atrás,porque cada uno de los 86.400 segundos que tiene el día me haces un poquito más feliz.
Quizá en tu ventana haya parado de llover pero en la mía todavía caen chuzos de punta.
Llámame loca pero creo que no estamos tan lejos,no estamos tan distantes.Los dos seguimos viendo la misma luna.
Perdón por fallarte tanto.
Te prometo que eres el único.
El que elijo.
El que me eligió a mí,sin fijarse en todo lo malo que no ves.
El que todavía,a día de hoy me hace sentir mariposas.Que mariposas...siento un zoológico entero estando contigo.
El que me dio la mano y no me la suelta ni estando enfadado,porque no he conocido a nadie que cumpla como tú.
El que despeina mi flequillo sabiendo que podría perder la mano.
El que sabe que pase lo que pase me va a tener.
Te escojo de todas las maneras.
Siendo Pedrito.
Siendo Luis.
Siendo mi Luis.
Siendo Cepeda.
Siendo mi amor.
Hagamos algo,
Si estás dispuesto a intentar arreglar esto espérame vestido.
Si no estás vestido interpretaré yo sola la situación.

Y al final tanto escribir para acabar queriéndote lo que no está escrito.

Atentamente: Tu pequeña idiota enamorada con flequillo.

Mi pequeña idiota enamorada con flequillo,si lo era.
No lo iba a dudar ni un segundo.
La esperaba vestido,con la camisa de las ocaciones especiales si hacía falta.
La había perdonado desde la sexta frase pero no se lo podía decir porque no estaba allí.
O si,porque una llave nerviosa le daba vueltas a la cerradura.
Me coloco detrás de la puerta y espero a que abra.

Ella solo suspira.
-¿Y ese suspiro señorita Ocaña?
-Nunca me ha alegrado tanto verlo vestido señor Cepeda.
-Iba a bajar a por pan.
-Ah.¿No has leído la nota?
-Que si idiota.¿Por qué crees que me pongo una camisa?¿Por qué quiero conquistar a la panadera?
-Más te vale que no.
-No.Y,¿para qué hay que vestirse?
-Nos vamos a comer.
-¿A dónde ?
-Elijo yo.
-Vale.
-Pues primero te elijo a ti,a besos y luego italiano, a pasta.
-Trato hecho.
-¿Pues por qué plato empezamos?
-Yo que tú antes que nada cogia un paraguas.
-Pero si estamos a 40 grados.
-Pues por mi ventana creo que va a llover.