Odio y deseo al mismo nivel.
Los reporteros se nos vinieron encima al vernos venir juntos, quise asesinar a Khan al haber aparcado justo donde estaba infestado en periodistas, los flashes me cegaron y las cámaras se nos abalanzaron encima. Nuestra seguridad los apartó, los míos los alejaron cordialmente pero los de Khan eran bruscos, entrenados por el mismísimo Lucifer.
Eran demonios destructivos que no conocían la sutileza de nada. Los empujaron bruscamente lejos de nosotros, me encaminé hacia la entrada de la casa presidencial, voltearon a vernos al llegar juntos.
Respiré hondo.
Khan se quedó atrás y lo miré sobre mi hombro, encendió un cigarrillo y sacudí la cabeza. Este hombre se pasaba todo por el culo.
—Kassia, hola —me saludó Lorey, una diputada, ella dirigió sus verdosos ojos en dirección al hombre detrás de mí —. Khan Wagner, oí de tu regreso a New York, es bueno verte.
—Lorey, diría lo mismo pero la verdad es que nunca me alegra ver a las personas —respondió tan tosco, ella sonrió de lado. Al parecer se conocían muy bien por como ella lo miraba, estaban más o menos en la misma edad, ella era mayor por dos años.
—Y...¿vinieron juntos o se encontraron en la entrada? —preguntó, curiosa, arqueé una ceja ante ello.
—¿Te importa? —habló antes que yo Khan.
Ronan lo miró de reojo con algo de recelo, se alejó y Khan arrojó el cigarrillo al suelo, pisándolo con el pie.
—No, solo preguntaba, nunca llegaste acompañado de una mujer a ningún lado, solo me sorprendió —comentó ella sin ofenderse a como él le habló. Sonrió hacia mi —. No te culpo igual, es la viceministra y no cualquier mujer.
Sonreí de lado.
—¿Se conocen? —mi curiosidad pudo más.
—No —respondió Khan, Lorey lo miró de reojo ante esa respuesta. Algo me decía que había gato encerrado aquí —. No te importa realmente.
Rodé los ojos.
—Siempre tan tosco, Khan —dijo ella y negó. El susodicho no se inmutó y se mantuvo de pie, mirándola fijamente, mientras ella sonreía y le dedicaba miradas de soslayo.
Entrecerré los ojos.
¿Será que este témpano de hielo tuvo algo con ella más allá de cama?
Joder con mi curiosidad.
—Tienes algo de sangre en el cuello —Lorey quiso acercarse a tocar pero él detuvo su mano a mitad de camino, la apartó y se tocó el cuello con mis rasguños —. Lo siento, solo quería ver.
—Deja de fingir tu patética actitud de mierda, Lorey, nos conocemos, más, sé cómo eres —gruñó Khan, no comprendía su actitud con ella pero era obvio que no se llevaban bien.
—Me parece que estás muy tosco, ¿por qué no te vas a ahogar en cloro? —le riñó mi mejor amiga apenas llegando, él la miró de reojo con desinterés y algo de asco.
—¿Hablas conmigo?
—¿Con quién más sino? —bufó ella.
—No hablo con inferiores a mi, así que no me gastaré en hacerlo.
ESTÁS LEYENDO
Dulce Condena [+21]
Science FictionÉl era una bestia. Ella era un castigo. Khan Wagner no era bueno. No era el tipo de hombre al que deberías acercarte para algún tipo de relación. Era sádico, frío y perverso. No le importaba el bienestar de nadie más que el de sí mismo. Líder de lo...