"La gente puede caer alrededor, pero mientras estés firme en lo que crees, ningún ejército te vencerá"
-Samai Jara
Capítulo 36 - Hasta las siete, nene.
-Parte 1-
Estaba nerviosa, me había cerrado un poco, incluso con Belle. Decidía si habría sido lo mejor solo irme.
Lo correcto en definitiva era simplemente escapar para Riobamba. Sin distracciones, sin miramientos atrás.
Había algo claro: de una forma u otra no regresaría sin respuestas.
¿Por qué me fui en primer lugar?
¿Por qué seguía aquí si lo tenía tan claro?
Esa era la cuestión, Alecksander.
Esa era la maldita cuestión. No me iría hasta que él me de una respuesta, aunque por supuesto, era clarísimo. Él no vendría.
Quién en su sano juicio, ¿sí?
Pero quería que el viniera.
No quería a mi hermano, ni una amiga, lo quería a él. Porque me había consolado cuando lo necesité.
Tal vez era ridículo, pero el me dio calor y jamás se alejó, aunque tuvo motivos. ¿Por qué ayudaría a una chica con complejos? ¿Por qué ayudaría a una chica encerrada en una bodega del conserje?
Es extraño, pero la noche que amanecí ebria en su cama, me hubiese gustado que fuera en otras condiciones. No creía en las casualidades de la vida, pero no saber de ningún bar en la capital y terminar en el mismo en el que él cantaba, era algo definitivamente demasiado.
Suspiré y volví a enfocarme en la pantalla del ordenador.
Estaba redactando un correo para Joyce Fuertes. Aquella bloguera, que parecía bien metida en los extraños accidentes. De alguna manera tenía que contactarla.
Antón había hecho tan bien su trabajo que había adjuntado el correo de esta chica en toda su caja de información. Y no pensé en usarlo hasta ahora.
Lo más probable es que Joyce lo ignorase, pero no perdía nada con intentarlo. En este correo le decía que era una de las familias afectadas, incluso le decía que el presunto sobreviviente podía ser mi padre. Aunque bueno, tal vez eso era estúpido. La verdad quería llamar su atención.
Volví a leer el correo y finalmente lo envié, como treinta veces, por si lo pensaba ignorar.
Suspiré y me volví al computador, decidiendo que hacer hasta que Aleck se decidiera. Alguna serie, supongo. ¿Super héroes? ¿De época?
Mi celular vibró, asustándome de repente.
Lo tomé y mi corazón se aceleró al ver de quién se trataba, no nos habíamos visto los días siguientes en el colegio. Y hoy miércoles empecé a aceptar que tal vez si había mandado todo al infierno. Pero este mensaje decía lo contrario:
Sireno: "Hola, sirena. Te he echado de menos"
Todavía no creí que fuera real, por lo que me deslicé del asiento y me lancé a la cama. Si el mensaje seguía intacto, mi cabeza no me había jugado una mala pasada.
No. El mensaje era el mismo. Pero mi ritmo cardiaco no.
Como si mi cerebro por fin le diera permiso a mi corazón, este empezó a latir con una fuerza conspiradora. Y me tapé la boca para ahogar un grito, luego al darme cuenta que aún no respondía, volví a entrar en el chat.
Yo: "Hola. Yo también..."
Se demoró en responder, de echo pasaron minutos mientras yo me retorcía en la cama. Ni siquiera veía el mensaje, entonces decidí ir al baño, cuando regresé ya había respuesta.
Sireno: "¿Quieres salir?"
Yo: "Claro. ¿A dónde?"
¿Mis ansias por verlo eran tan obvias? Quise eliminar el mensaje, pero ya lo había leído. Mordiéndome el labio con nerviosismo, me limité a esperar. La espera no duró nada.
Sireno: "¿Estás libre en dos horas? Y será sorpresa, ya sabes lo divertido que se pone 😉"
Hay, que si la misericordia del Altísimo seguía este camino ya no sería virgen para las doce.
¡Calma, Aura, calma!
Yo: "Te espero acá. Y también espero que la diversión sea suficiente"
Sireno: "¿Suficiente para qué?"
Yo: "Esperaba que eso lo respondieras tú. Hasta las siete, novio"
Listo. Lo había mandado.
Y ahora me haría de toda la artillería para que pueda convencer a Aleck. Le quería, como una loca. Y no estaba dispuesta a perderlo.
Hasta las siete, nene.
Aquí la pregunta era, ¿Hasta qué punto estaba dispuesta a enloquecer por Aleck?
Cortito como un pedazo de chocolate. Bueno, eso no tiene mucho sentido pero lo han entendido.
¿Segunda parte, hoy?
Convénzanme, jajaja.
¿Qué noticias les traigo hoy?
Ninguna. Lo siento, con lo de Anonymus he flipado un buen rato. Así que, ¿Qué nos espera en el siguiente capítulo de este año?
En otro segmento...
¡¡Feliz día del niño!! ¡Para los inmaduros e inmaduras! Para los que nos negamos a caer del árbol :)
Les regalo mi amor y mi alma. Jajjajja nah mentira, vaya a estar el diablo entre ustedes.
Ahora sí, con un buen fianl. Les espero, ¿A dónde llevará Aleck a Aura?
¿Al motel?
¡A leer la biblia se ha dicho, no piensen mal!
:)
Ahora sí, cambio y fuera.
Pd: les dejo a mis chicos favoritos: 5SOS
¿Será una pista?
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Mi Agridulce Salvación © - #1 Los Sabores del Corazón
Teen FictionÉl era el chico más guapo e insistente que nunca jamás vio. Y Aura sabía que eso no era una excusa, pero... ¡Pero, cada vez que se alejaba necesitaba volverlo a ver! Se volvió adicta. Lo empezó a necesitar de una manera loca y enfermiza. Transformo...