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—Hermano, no puedo creer que siga detrás de ti después de todo este tiempo -Pronuncio Demian, como si las insinuaciones de la loba coqueta no fueran una novedad para él. Daniel simplemente alzo sus hombros, restándole importancia- ¡Incluso frente a tu mate! -Continuo bailando al ritmo de la música- ¡Emma, quiero que sepas que tienes mi apoyo! Puedo ayudarte a enterrar su cadaver -Agrego guiñándome uno de sus ojos, Daniel gruño por su acción. 

—Gracias Demian -Conteste entre risas, lo suficientemente alto para que pudiese escucharme- Aunque tendríamos que cavar dos pozos -Afirme causando que frunza su ceño confundido al no comprender mis palabras- Como tu amiguito siga haciendo absolutamente nada... También lo mato -Agregue con una pequeña sonrisa. El de oscura esencia comenzó a reír- Tengo sed, ahora vuelvo -Pronuncie tranquila. Ambos asintieron en respuestas y continuaron hablando, antes de avanzar alce uno de mis brazos para que Pelusa supiese que iba a moverme. 

Todos los licántropos bailaban de manera animada, las música sonaba realmente fuerte y las luces de colores hacían la vista un poco mas interesante y su constante parpadeo, generaban unos microsegundos de oscuridad que causaba que los movimientos de todos fuesen entrecortados. 

Al parecer todos estaríamos tres días en los territorios de Demian, en los cuales dos serian exclusivamente fiestas mientras que el del medio seria el día de reunión y también podríamos descansar. Nos quedaríamos en esta casa en todo ese tiempo, el espacio era mas que suficiente, después de todo nos encontrábamos en la mansión del alfa de la manada del Norte y parte de Oeste, uno de los cuatro grandes. No estoy muy segura de quien posee mas poder entre estos cuatro pero lo que si se es que, muy probablemente, sea entre mi mate y su amigo.  

—Lo siento -Pronuncie luego de chocar contra alguien, estas luces están mareándome un poco. Al levantar mi cabeza abrí mis ojos con sorpresa- ¡Hola chicos! -Solté de forma alegre, después de todo eran los chicos con los que baile la primera fiesta a la que fui, misma en la que descubrí que Daniel era mi mate. Son gemelos y si mal no recuerdo eran hijos del alfa del Este- ¿Adam, Vito, cómo han estado? -Pregunte. 

—Bien, estábamos preguntándonos donde estabas -Contesto Vito para luego dar un sorbo de su bebida. 

 —Pudimos olerte al llegar, pero no logramos encontrarte -Continuo Adam- ¿Estabas con tu alfa? -Pregunto con gracia al notar mi expresión- Lo siento, con Daniel -Se corrigió al instante en un tono burlesco. Asentí en respuesta- ¿Quieres probar? -Me tendió su vaso pero me negué. 

Continuamos hablando tranquilamente, era divertido estar con ellos, además de que son los únicos con los que podría llegar a formar algún tipo de amistad. No estaría mal tener amigos que vengan a estas reuniones, después de todo cuando Daniel se marcha junto a los demás a realizar sus cosas de Alfa supremo, simplemente me quedo sola con mi amada. 
A estos gemelos les parecía asombroso como podía diferenciarlos, puesto que eran exactamente iguales, ambos median un metro ochenta, el color del cabellos de ambos era negro y sus ojos eran azules, cada célula de su cuerpo era exactamente igual al del otro. Todo excepto sus esencias el de Vito era plateada mientras que el de Adam era Dorada. Técnicamente estoy haciendo trampa al adivinar quien es quien.      

—Los veo luego, tengo que hacer algo -Les sonreí a ambos y comencé a caminar rápidamente hacia mi amada. Una vez pase por su lado chasquee mis dedos para que me siguiese, al llegar a la ventana me detuve. El constante parpadeo de las luces hace que todo a mi alrededor sea algo confuso, pero podría jurar que vi algo moverse entre los arboles. Por un segundo me pareció ver a... ¿Erick?. 

—¿Keira, también lo viste? -Pregunte con la esperanza de que contestara con un si. 

—Apenas y puedo distinguir tus manos... Odio esas luces -Gruño. Al parecer solo fue una falsa alarma... Otra vez- No te desanimes, pronto tendrás noticias -Afirmo en un intento por levantarme el animo. Después de todo a lo largo de estas semanas me sucedieron cosas similares- Oye, el idiota esta preocupado -Menciono tranquila

Ojos rojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora