#23

1.6K 151 3
                                    

—Keira... -La llame nerviosa- Keira por favor, ¿Por que me miran así? -Pregunte causando que se ria- ¡Es enserio! Es molesto.

¿Que? -Contesto con poco interés- Oh... Fácil, hueles a humano. Te odian -Bostezo- ¿Puedo seguir durmiendo?

—¡No! -Dije rápidamente- ¡¿Que se supone que es el olor a humano?! 

—Pregúntale al imbécil que esta a tu lado. No molestes -Y finalmente se fue. 

Me siento algo incomoda desde el pequeño problema que tuvimos en la entrada. No quisieron dejar pasar a mi amada a esta enorme casa, tampoco a mi. Afortunadamente el tatuado llego justo a tiempo evitando que comiencen los problemas, ya que yo no estaba dispuesta a escuchar esas estupideces. Desde entonces intento quedarme cerca de él, el adelantarme como hice antes es un error que no volveré a cometer... A menos que sea necesario.
Pero mi presencia llama la atención de los demás personas y ya es molesto.  

—Daniel -Le llame causando que disminuya la velocidad.

—¿Voy muy rápido? -Preguntó observándome.

—No... Bueno si, también -Solté una leve risa- Pero quería preguntarte algo -Me observó- ¿Tan malo es el olor a humano?

—¿A que viene esa pregunta? -Me observo curioso- ¿Alguien dijo algo mientras no estaba? 

—No, no es eso -Respondí rápidamente mientras caminábamos por la gran habitación- No soy ciega, sé que a mas de uno le molesta que este en este lugar -Mire a ambos lados cruzándome con la mirada de varios de los invitados, rápidamente apartaron la vista al ver que el tatuado miraba en su dirección- Así que quería saber como es el olor a humano.

—No, no es malo. Es como... Puede ser similar a... No, es mas bien como... -Suspiro frustrado- No es algo que pueda explicarse, solo sentirse -Contestó después de todos sus intentos fallidos- ¿Alguna vez encontraste algo que era difícil de explicar? -Sonreí y observe su color, su magnifico y extraño color. 

—¿Que si vi algo raro e indescriptible? -Asintió- No tienes ni idea -Solté una leve risa a lo que él me miro extrañado, pero no preguntó. 

Finalmente fuimos con unas personas que al parecer Daniel conocía, comenzaron a hablar hasta que finalmente alguien llevo a todos los que supuse eran alfas, a otra habitación. Algunos con sus acompañantes, pero la gran parte de los ''no alfas'' preferimos quedarnos en donde estábamos. Al parecer no era la única que no quería escuchar de lo que sea que fuesen a hablar. No es que no me interesara pero simplemente luego de dos días leyendo y ''entrenando'' sin parar, prefiero poder disfrutar un poco de la paz. Aunque el tatuado no estaba muy convencido de dejarme sola en este lugar... Yo tampoco estoy segura de querer quedarme en este sitio, pero el que no arriesga no gana. 

Luego de un rato nos guiaron a otra sala donde para mi buena suerte había un par de bocadillos. Afortunadamente no había nada extraño, no había infinidad de tenedores ni nada de eso. Simplemente comida cortada en cuadraditos con palitos clavados encima, para poder comerlo. Me acerque a una de las mesas, tome uno de los platos que supuse estaban ahí para poder llevar varias cosas al mismo tiempo y agarre lo que me gustaba a mi y a mi amada. 
Fuimos a una mesa y me senté en una de las sillas, era la única de entre estas ¿20 personas? ...¿30?  que tenia un plato y estaba sentada. Realmente no me importo. 

»»»»»:«««««

—Por el amor de dios -Dije frustrada- No tengo ganas de oír esto, por favor, solo déjenos en paz  -Dije cansada. Hace varios minutos que un hombre que parece trabajar en esta casa esta intentando echarme, pero no estoy dispuesta a levantarme de mi sitio.  

—Lo lamento, pero no tiene ninguna marca que me asegure que este con alguien y que no se haya colado a este lugar -Volvió a decir. Es ridículo porque estoy casi segura que nos cruzamos cuando Daniel aun estaba aquí. Mire a las demás personas, no parecía tener algo que dijese que ellos si estaban invitados- Sin mencionar que tiene a ese perro pulgoso con usted -Se acerco para, seguramente, agarrame pero Pelu se levanto y comenzó a gruñirle causando que este se detenga en su lugar- ¿Lo ve? Es muy peligroso para todos nosotros que ustedes sigan en este sitio, ¿Que me asegura que no va a morderme? -Preguntó dramatizando la situación. 

 ~Allí fuera es un lugar peligroso, pero sabemos que podrás vencerlo~ Recordé las palabras que mis padres escribieron en la carta. Por su puesto que voy a vencerlo. 

—¿Morderle? -Clave el escarbadientes en un cuadradito de queso y me pare quedando frente al sujeto- Ella no haría tal cosa ni aunque se estuviera muriendo de hambre. Agradecería que dejara de decir esas estupideces y nos deje en paz... Si no es mucha molestia claro -Solté esto ultimo con un muy fingido tono de amabilidad. 

—Es por eso que los humanos son la clase mas baja de todas -Dijo una de las mujeres que observaba la escena- Son simplemente escoria -Soltó una risa demasiado desagradable para mis oídos- ¿Podrías hacernos el favor de retirarte? el lugar esta infectado con tu olor... Y el de esa cosa, sin mencionar las pulgas que seguramente estará dejando por toda la alfombra -Apuntó a mi amada. ¿Con que derecho dice ese tipo de cosas?

—¿Pulgas? -Reí sin gracia mientras rodeaba al hombre que tenia enfrente, hasta finalmente llegar a la mujer que se metió en donde no la llamaban y, claramente, recibiría lo que se merece- La única que tiene pulgas en este lugar es usted -Me miro enojada y antes de que pudiera decir algo continué- Ademas, hablando de favores... Creo que el único favor que necesitas es el de tu pareja -Me miro confundida- Al parecer no te pone un dedo encima hace mucho tiempo -Sonreí. Había captado la atención de varias personas, todos intentaron mantenerse serios pero finalmente terminaron por dejar escapar la risa que contenían. Esto enfureció aun mas a la mujer que tenia enfrente.

—¿¡Quien te crees que eres para hablarme así!? -Grito furiosa causando que mi amada gruña- ¡Discúlpate en este instante estúpida humana! -Levanto su brazo y lo dirigió velozmente hacia mi rostro. Con solo una mano detuve su acción agarrando su muñeca con fuerza. Me miro sorprendida, al parecer no se lo esperaba.  

—No me ladres, perra -Dije fuerte y claro mientras retorcía su brazo haciéndola girar para finalmente empujarla lejos de nosotras. Mire alrededor ahora todos me observaban, algunos parecían enojados, otros asombrados y muy pocos divertidos.- ¿Alguien mas tiene algún problema con nuestra presencia? -Espere un par de segundos- Eso creí -Dije al no recibir respuesta. Camine hasta donde estaba sentada antes, coloque mas comida en el ''plato'' de Pelu y continué con lo mio.

Al parecer ese pequeño show había divertido a mas personas de las que creí. Varios se sentaron conmigo y comenzamos a hablar de distintas cosas. Yo simplemente contestaba a todas sus preguntas, fue divertido y curioso, no tenia ni idea que entre los hombres lobos se rumoreaban esta clase de cosas.
Según ellos teníamos que: Dormir como mínimo 8 horas todos los días o de lo contrario moriríamos,  de bebes debíamos chupar una zanahoria o de lo contrario seriamos ciegos, lo mismo con las mujeres embarazadas debían comer zanahorias o su hijo nacería sin ojos o ciego... ¿Donde esta el sentido de todo eso? Sinceramente fue muy gracioso. 

Finalmente volvieron todos los alfas, Daniel una vez que logro encontrarme se sorprendió al verme hablando con tantas personas, compartiendo mesa con estos mientras reíamos y charlábamos. Una reacción completamente normal de su parte, después de todo, lo ultimo que vio antes de irse era como los demás invitados me observaban de manera extraña. Esto habrá sido una gran sorpresa para él.    

Ojos rojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora