«Nota de la autora:
Buenos días, tarde o noches ¿Cómo están? No quiero alargar esto demasiado, pero quería agradecerles por seguir leyendo esta historia. Gracias a ustedes, en visualizaciones llegamos a 50k, es mucho mas de lo que hubiera imaginado nunca.
En modo de agradecimiento, pero por falta de tiempo, publicare el próximo capítulo en unos minutos. Lamento no haber podido escribir tres, el trabajo me lo impidió... Sin mas que decir me despido.
—Ritmis»
Abrí mis parpados con pereza, la primera imagen que mis ojos captaron fue el rostro dormido de mi amada, su amarillo brillaba como lo hacia normalmente y mi brazo posaba en su estomago, nos manteníamos unidas. Con cuidado moví mi cabeza hacia abajo viendo como la mano de Daniel descansaba en mi cintura, nuestros cuerpos estaban tan cerca el uno del otro que me era posible sentir como su pecho subía y bajaba pausadamente. Estábamos exactamente en la misma posición en la que nos habíamos dormido.
El gran día había llegado, hoy comenzaran a llegar los Alfas de las manadas para la presentación oficial. Tengo que admitir que después de mi conversación con Demian me encuentro algo intranquila, si bien no dijo nada que no supiese el que haya mencionado que ahora soy la debilidad de Daniel me hizo considerar nuevos escenarios que hasta el momento no había imaginado. Puede que a partir de hoy me encuentre en la mira de muchos enemigos, de los cuales estoy segura me subestimaran.
—Quisiera ver que lo intenten -Hablo Keira con gracia- No dudare en desgarrarles la garganta.
Cuando mi mate se despertó decidimos permanecer en la cama y una vez el hambre fue mas fuerte que nuestras pereza nos levantamos. Daniel me permitió ingresar primero al baño, por lo que al haber terminado antes que él decidí que seria mejor esperarlo abajo en la mesa del desayuno. Al abrir la puerta no pude evitar sonreír, un despeinado Noah se movía con pereza por el pasillo aparentemente el hambre también lo había atacado, con rapidez me acerque a el y me sostuve de su brazo.
—Buenos días mate del beta de la manada del Sur -Pronuncie con una sonrisa. Mi amada se había posicionado junto a mi amigo, dejando a este en medio de ambas.
—Buenos días mate y luna del -Bostezo con pereza- Olvídalo, ni siquiera lo intentare es muy largo.
—¿Eso mismo es lo que le dirás a Lukas? -Los ojos del turquesa, los cuales estaban entrecerrados hasta ahora, se abrieron por completo y sin siquiera demorarse soltó un golpe en mi cabeza.
—Idiota -Susurro con un pequeño rubor en sus mejillas- Deberías agradecer que nadie mas nos escucho, de lo contrario te hubiera... ahorcado -Agrego con una sonrisa. Ambos intercambiamos miradas y comenzamos a reír. Sin detenernos logramos escuchar como las puertas de las habitaciones se cerraban a la par y a su vez como pisadas se acercaban a nosotros- ¿Pero que? -Soltamos al unísono, tanto Noah como yo habíamos sido elevados del suelo con una rapidez suficiente como para marear a cualquiera.
—¿Nos extrañaron? -Pregunto Daniel acomodando mi cuerpo entre sus brazos. Me aferre a su cuello con fuerza al sentir como una de sus manos me soltaba para chocar puños con Lukas.
—¿Qué están haciendo?... Es muy temprano -Agregue entre bostezos apoyando mi mejilla en el hombro de mi mate, siéndome posible ver como Pelusa nos observaba con entusiasmo, su cola se movía de un lado al otro y su esencia brillaba con intensidad.
—Ni siquiera lo piensen -Pronuncio Noah, en un tono algo nervioso. Antes de que pudiese voltear a ver a lo que se refería Daniel coloco una mano en mi espalda y comenzó a correr. Me aferre a su cuerpo y observe como el anaranjado estaba haciendo exactamente lo mismo, dando inicio a una carrera.

ESTÁS LEYENDO
Ojos rojos
WerewolfEra inevitable, las llamas fueron participes de un intento desesperado por cambiar el destino que le amparaba. Finalmente pudo estar en paz... Pero olvido un pequeño detalle, una vez su destino fue pronunciado, ya no existía forma de cambiarlo. Deb...