Cycle

🌸15🌸

Felix no comprendía completamente bien que estaba pasando con su cuerpo, solo pasaron unas cuantas semanas más y su vientre se veía mucho más abultado de lo que debería, no sabía exactamente cuánto tiempo tenía de embarazo, pero había aumentado de tamaño muy rápido.

Chan le decía que era normal ahora que estaba comiendo más, pero él sabía que era otra cosa.

Así que por eso fue con Jisung, él tenía experiencia con tener dos cachorros dentro, si alguien podía resolver sus dudas era él.

Tocó la puerta y fue Minho el que abrió.

—Ay gracias al cielo, ven Lix.

Y sin poder saludar o algo Minho lo jaló dentro de la casa.

—¿Ocurre algo?

—Han no está, fue con su mamá a no sé qué cosa y me dejó solo con los dos—señaló a la sala, los niños se veían bastante tranquilos pues estaban acostados en una manta mirando el juguete colgante con el que Minho los tenía entretenido.

—¿Cuál es el problema entonces? Se ven tranquilos y tu siempre has sido bueno con los niños.

—Lo sé y están bien, pero siento que si les quito el ojo de encima algo va a pasar y llevo 3 días seguidos sin dormir.

Y lo podía notar por la sombra bajo sus ojos.

—Toma una siesta, yo cuidare de ellos.

—Sera poco tiempo lo prometo...

Minho se recostó en el sillón, no quería dejar a Felix solo con toda la responsabilidad, si necesitaba ayuda el menor podría despertarlo, el albino se sentó en la alfombra con los bebés, los cuales al verlo le sonrieron, estirando sus manitas para alcanzarlo.

Era muy común que los bebés quedaran apegados a las primeras personas que veían u olían al momento de salir de su omega progenitor, y en este caso, los gemelos habían detectado muy bien las dulces feromonas de Felix.

Estuvo jugando con ellos un buen rato, les cambió el pañal dos veces y les dio de comer una papilla de fruta que Hannie había dejado preparada para ellos. Para cuando Minho despertó, Felix dormía en la alfombra con los bebés acostados en su pecho, chupando su pulgar.

El mayor sonrió, cargó con cuidado a sus hijos, dejándolos en las cunas que tenían en la sala, después cargó a Felix con cuidado y lo acomodó en el sillón, hubiera querido llevarlo a la cama para que estuviera más cómodo, pero Jisung había hecho un nido de ella y seria peligroso acercar a Felix ahí aun si era su amigo.

Un par de horas después llegó Jisung, saludó a Minho con un beso suave, después de eso iba a hablar, pero Minho cubrió sus labios con uno de sus dedos haciendo señal de silencio para luego señalar al sofá, se acercó y sonrió con ternura al ver a Felix dormir abrazando su vientre y recordándole a las primeras noches cuando el también apenas sabía de la existencia de un cachorro en su interior.

—Creo que venía hablar contigo.

—Me da pena despertarlo...

—Si lo dejas seguir durmiendo probablemente en la noche no dormirá.

El menor asintió y se sentó a un lado de Felix, acarició con cuidado sus orejas lo que hizo que rápidamente abriera los ojos.

—Hannie...

—Hola Lix ¿dormiste bien?

—Si... algo asi—se sentó rápido y miró al mayor—necesito hablar contigo.

—¿Ocurre algo malo? —preguntó preocupado, Felix casi siempre estaba feliz y lleno de energía, ahora se le notaba demasiado serio y preocupado.

—Es el bebé...—se alzó la ropa y dejó ver si vientre— ¿es normal que este tan hinchado? Digo... no sé exactamente cuánto tiempo tengo que no debería de verse así si solo es uno ¿no?

—Bueno ciertamente está más grande—tocó con suavidad el vientre de su amigo—se parece como cuando yo estaba esperando... y como vez, tengo dos bebés.

Y el pánico invadió el cuerpo del albino.

Dos...

—Deberías de ir a ver al chamán, tal vez el te ayude a saber si es así o no, puede que solo estés haciendo una barriga muy grande y solo sea uno.

Pero la duda ya estaba ahí, y eso estaba empezando a comerle la mente.

—¿No seria lindo? —acarició su vientre con cariño—dos minis tú.

—O tal vez dos mini Channie lo cual sería más lindo—sonrió sin poder evitarlo, aunque estaba un poco preocupado todavía.

—Ambas opciones son lindas, aun así, deberías de ir con el chamán, solo para quitarte las dudas

—Si... creo que eso hare...

—¿Te quedas a comer con nosotros?

—No gracias Hannie, voy a casa, Chan no debe tardar en llegar, así aprovecho y vamos los dos juntos con el chamán...

—Está bien Lix, cuídate y no le des tantas vueltas ¿okey?

—Okey...—se dieron un abrazo, se levantó y se despidió de Minho que ya estaba en la cocina calentando la comida, después de eso se fue.

Han tenia razón, el asunto no era tan malo.

No debía de preocuparse tanto.

Llegó a su casa casi al mismo tiempo que Chan, se encontraron en la entrada por lo que primero se dieron un profundo beso para después entrar a su hogar.

—¿Cómo estas Lix? —preguntó el pelinegro apenas lo sentó en el sillón para el prender el fuego, el frio ya estaba llegando a pesar de estar en el sur.

—Bien, creo... hoy hable con Jisung...

—¿Cómo esta?

—Mejor, ya no le duele nada, y se ve más saludable.

—Me alegro ¿de que hablaron? —caminó a la cocina para calentarle algo de comer a Felix.

—Del bebé... tenia algunas dudas así que como el ya tuvo hijos y es omega como yo tal vez podría aclararme algunas cosas.

—¿Cuáles dudas Lix? ¿No te sientes bien? ¿Notas algo raro? —en menos de un minuto Chan ya estaba sentado a su lado, mirándolo con preocupación porque si algo le pasaba a Felix no se lo perdonaría.

El albino sonrió y acarició el rostro de su pareja para después dejar un suave besito en sus labios.

—Estoy bien Chan, es solo que el vientre me creció mucho en estas últimas semanas, ya sé que no estamos al tanto de cuánto tiempo exactamente tengo de embarazo, pero creció mucho y me asuste, Hannie dijo que lo más probable es que fueran dos bebés y no uno...

Chan se quedó en silencio por un momento, impactado por la noticia ¿dos bebés?

El pelinegro alzó con cuidado la ropa de su pareja solo para poder acariciar con suavidad su vientre, notando que, en efecto, desde la última vez que lo vio hasta ahora-porque mantenía a Felix con 4 capas de ropa para evitar que sintiera frio- estaba más grande.

—¿De verdad crees que sean dos? —lo miró el mayor con ojos brillantes y esperanzados.

Ahí, Felix sintió el alivio y la calidez del abrazo de su pareja, honestamente tenía miedo de que a Chan no el gustara la idea, tampoco querían hacerse falsas esperanzas, también existía la posibilidad de que solo fuera uno y ellos estuvieran exagerando.

—Puede que también solo sea uno—se apresuró a decir para no emocionar al mayor por nada.

—Tendremos que ir con el chamán para saber, pero si Jisung te dijo que el también lucía así entonces puede que si podamos tener 2 cachorros.

—Está bien...—se acurrucó contra su cuello.

—Ven, vamos a comer, si de verdad son dos necesitas comer mucho.

Felix solo se rio, pero lo acompañó, que Chan lo cuidara tanto solo le hacía darse cuenta de que en verdad tenía al hombre perfecto.