LIBRO 1 DE LA SAGA DEVIL'S DANCE
Harta más que acostumbrada, a vivir bajo la sombra de sus hermanos decide mudarse a Mónaco con el pretexto de renovar sus rumbos, inscribirse en una nueva Universidad y culminar su maestría en psicología.
Mujer de t...
Me estaciono fuera y por frente a la agencia, guardo mi monedero en el bolso e ignoro todos los mensajes que he recibido.
Desde Liam y Nick, hasta Iván y tres correos electrónicos con posible confirmación de eventos publicitarios.
Solamente respondo a uno antes de salir del Ferrari. Al de Judas, quien volvió a preguntarme si habíamos descansado, informando también del policía que custodia el ingreso de Pía al edificio del campus y recalcando que insistirá en que la investigación se efectúe por fuera del sistema legal de Mónaco.
Por fuera del sistema...
El Diablo no lo sabe o tal vez sí; tal vez lo percibe. Quizá su hocico de lobo viejo y experimentado se olfatea lo que pronto voy a solicitar pues entre nos y conociéndonos las oscuras y perversas mañas, él no olvidó que en mi cuenta de deseos tengo uno pendiente.
«Pídeme lo que quieras y yo te lo daré»
Ya sé lo que quiero y no voy a vacilar en obtenerlo, más aún cuando este embustero hombre es de los que cumple con su palabra.
Le contesto con un simple okey y bajo del vehículo, encaminándome al interior de la agencia.
Ivan me recepciona poniendo una inmensa cara de te ves horripilante; realmente horripilante. No habla, sólo besa mis dos mejillas y me toma de la mano subiendo conmigo las escaleras.
—La suprema te espera desde hace siglos —pasa los dedos por mis hombros y frota sus palmas fundiendo el gesto en un fuerte y sentido abrazo—. Lamento muchísimo tu pérdida. La noticia se viralizó en Internet después de que se esparció el rumor de tu detención.
—Estuve presa, esposada y encerrada en una celda espantosa —digo con hastío—. Y gracias por tus palabras.
—¿Saben quién fue?
Niego.
Nadie lo sabe.
Las autoridades no tienen siquiera una pista concreta y los padres de Lula tampoco pretenden hurgar demasiado en ello. Se apresuraron a la cremación eliminando así cualquier otra probabilidad de hallar al asesino.
—Lo atraparán, ya lo verás —me suelta, procediendo a golpear la puerta de la jefa—. Y cuando lo atrapen y termine preso nos tomaremos un mezcal en honor a la memoria de esa chica estupenda que me caía tan bien.
Evado mi mirada de la suya.
¿Preso?
Iván lleva toda su vida inmerso en la corrupción, los negocios sexuales, los favores y la comercialización de modelos, ¿y es tan indulgente para venir a escupir tal palabra?
