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Inconscientemente, mi vista quedó fijada en los ojos de Jungwon bajando con lentitud a sus labios mientras ignoraba cualquier comentario estúpido que hiciera.

Es que se veía bastante bien...
Digo, sus atuendos le hacían lucir bastante bien y bueno, su rostro...

Me acerque a sus labios queriendo besarlo hasta dar la casualidad de vomitar en sus pantalones en el momento exacto que entra Polly al cuarto.

Apoyé mi mano viendo cómo aquella mezcla de deslizaba en los pantalones de Jungwon quien había empezado a aguantar la respiración soltando ciertas arcadas.

— ¡Tn! — contestó Polly acercándose.

— perdón — Murmure secando mis labios con la mano.

Jungwon se levantó y corrió con mucha dificultad hacia el baño.

— será mejor que vayamos a casa. — respondió Niki entrando a la habitación.

Niki me tomó del brazo con cierta fuerza y me sacó de la casa de Jungwon a las apuradas, me subió a su auto prácticamente empujándome y luego entró comenzando a conducir molesto.

¿Porque esa cara? — pregunte tratando de apretar su mejilla.

Niki se alejó al no querer tener contacto con mis manos con hedor de la comida.

— No me hiciste caso y esa es la consecuencia. — respondió.

— es solo un falso cumpleaños. — respondí riendo.

— Le hiciste comprar cosas a Jungwon solo para que la estúpida fuera. ¡Ya acepta eso!

Cerré mis ojos con fuerza por su grito y los abrí lentamente.

Polly es mi amiga... — Susurré.

— Jungwon no gusta de Polly asique hazle entender a tu amiga que ya pasó.

Desvíe la mirada sintiendome apenada e inútil por no poder ayudar a Polly, ella realmente lo da todo por Jungwon...

.

El reloj sonó marcando las 10 de la mañana y mi cabeza no dejaba de doler por la maldita resaca.
Sentía mi cuerpo pesado y muy agotado pero no podía faltar a otra clase de educación física...

Me coloque mi uniforme con cierto apuro mientras maldecia el momento en que Niki no me despertó.
Lo hacía por idiota, bastante orgulloso.

Salí a tomarme el bus sin haber desayuno y me lo tomé para llegar al salón con 10 minutos de tardanza.

— mujer, ¿Porque tardas tanto? — preguntó Victor cruzandose de brazos.

— Tengo resaca. — me quejé.

— Ayer le vomitó a Jungwon. — respondió Polly.

— ¿En dónde? — preguntó Kenya sorprendida.

— En los pantalones asique fue al baño y me ofrecí a ayudarlo pero prácticamente me echó de su casa. — ríe avergonzada.

Mientras todos se reían de la humillación por parte de ambos, mi rostro demostraba algo inexpresivo, no tenía ganas de reírme por algo que me avergonzaba.

— Claro, es lo mismo que Jungwon te haya rechazado durante 6 años. — contesté riendo sin gracia.

— ¿Que te pasa? — preguntó Polly a la defensiva.

— A ti que te pasa, desde que llegué solo haz dicho sobre cómo vomité en Jungwon. — respondí molesta.

— Pensé que no te iba a molestar.

— ¡Claro! Porque vomitar en alguien no es molesto. — contesté con sarcasmo.

— chicas paren. — comentó Kenya.

— Me parece que vomitar te hizo despertarte de mal humor, ¿No? — contestó con ironía.

No estaba con ganas de aguantar las estupideces de Polly.

— Si ajá, vete con Jungwon a ver si te dirige la mirada al menos una vez en tu vida. — contesté.

— Sigue tomando como una alcohólica.

Reí ante eso y Susurré con mucha gracia.

— infeliz.

Me senté en las gradas ignorando que Victor y Kenya se hayan ido para hablar con Polly por lo que pasé mis manos por mi frente aún más agotada.

Pensemos, tengo resaca, estoy agotada y solo he comido ayer en el almuerzo ya que he bebido únicamente alcohol en toda la noche.

Me puse a estirar con mucha fiaca hasta llamar mi atención Jungwon entrenando.

Se veía jodidamente bien jugando al básquet... Su cabello, su cuerpo y... Oh... No sabía que tenía lindas manos.

Me acerque a el aprovechando que Niki no salía del baño y toque su hombro.

— tú.

— Si, yo... — reí nerviosa — Lamento mucho lo de anoche.

— ¿La vomitada? — preguntó entre risas.

— La vomitada... Así es.

— Es algo asqueroso pensarlo pero como estaba ebrio en ese momento, intento no pensar en eso. — respondió con sinceridad.

— Oh, ¿Osea que no estás molesto? — pregunté.

— No, yo también he vomitado con el alcohol. — contestó tomando una pelota.

Le di una pequeña sonrisa sin saber que responderle hasta solo dejar de sonreír ya que había comenzado a marearme y a sentirme débil.

Me senté en las gradas con cuidado y bajé la mirada tratando de respirar bien por las dudas.
Miré el bolso de mi costado pensando que era el de Niki y saqué su botella tomando más de la mitad de su bebida energética, también ví barras de cereales asique se las saqué.

— ¿De dónde saca dinero para comprarse un nuevo bolso? — Susurré comenzando a revisar lo que tenían sus bolsillos.

Metí la mano bien al fondo ignorando que Jungwon se acercará para terminar sacando una tira de condones.

No toques eso. — respondió Jungwon arrebatando de las manos.

— ¿Quien lleva condones en el bolso de entrenamiento? Además, soy su hermana. Necesito saber de dónde saca es— interrumpida.

— Es porque es mi bolso. — aclaró metiendo los condones.

— no puedo creerlo...

Tapé mi boca y tomé su remera acercandolo a mi rostro.

— ¿Tienes sexo en la escuela? — pregunté.

— No pero...— se queda en silencio.

— ¿Pero?

— Nunca se sabe.

— ¡Jungwon!

— No te hagas la inocente.

— ¡Que asco!

— Chica sensible.

— ¡Debe haber Miles de enfermedades contagiosas en esta escuela! — respondí.

— No si te cuidas.

𝑁𝑜𝑡 𝑓𝑜𝑟 𝑠𝑎𝑙𝑒 | YJ & TN | Donde viven las historias. Descúbrelo ahora