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Cómo era de esperarse, Jungwon hundió sus labios en los míos, correspondí y pasé mis manos con delicadeza por su cabello húmedo disfrutando de lo bien que besaba.

Jungwon, obvio yo no.

Deslice mi mano por todo su pecho sin separarme de sus labios hasta alejar el rostro queriendo respirar.

dormir sería una excelente manera para finalizar este día.

— ¿Tu crees? — pregunte.

Apesar de que la situación se dió para algo más que besos, agradecía el hecho de que Jungwon no optara por esa opción, es más. Me sentí aún más cómoda al saber que él no tenía ninguna intención de hacerme sentir incómoda o que me recordara aquella noche en el campamento.

Me dirigí a su habitación donde seque mi cuerpo con la toalla que me dió y me saqué el vestido acostandome únicamente en ropa interior.

Estar en ropa interior es como estar en bikini, no me avergonzaba de eso.

.

— ¡Jungwon! — grito Niki desde la sala.

Levanté mi cabeza oyendo la voz de Niki mientras movía el cuerpo de Jungwon esperando que se levantara.

— ¿Sigues dormido? — preguntó subiendo las escaleras.

Inmediatamente me levanté tirándole una almohada a Jungwon en el rostro buscando mi vestido, mi calzado y escondiendome bajo su cama.

— Ya deja de dormir. Tenemos entrenamiento para el partido de esta noche.

— Si... Eso. Me quedé dormido. — contestó Jungwon tratando de no arruinar las cosas.

— espera... ¿Viste esa película? — preguntó Niki en doble sentido.

— ¿Que película? — preguntó Jungwon tratando de negar.

¿Que tipo de película veía Jungwon?

— Agh vamos, la película que compramos, tú te compraste esa y yo otra pero al final te quedaste con ambas.

— ¡Ah! Las de acción — contestó levantándose con apuro.

— ¿Acción? Era otro tipo de acción — río.

No puedo creer que Jungwon sea de los hombres que compran películas para excitarse, menos me quiero imaginar a Niki.
Suficiente que una vez lo haya encontrado en pleno acto sexual.

— ya lo sé, callate. — contestó Jungwon empezando a vestirse.

— ¿Ya viste las mil y una noches del amor? — preguntó Niki caminando hacia un mueble.

De ahí saco una caja que era como una ilusión de libros dónde adentro dejó caer varias cajas con CD.

Eran películas pornográficas... Esto no puede ser más humillante.

— ahhh... ¡Ya deja de tocar mis cosas! — contestó corriendo hacia el suelo.

Observé como Jungwon se desesperaba por guardar aquellas películas mientras Niki alzaba la voz leyendo cada título de éstas.

El doctor y la paciente.

Una noche inolvidable.

Mejores amigos.

La luna en la cama.

¿Que clase de títulos son esos?
Que patéticos.

Podía notar lo humillado que se sentía Jungwon por sus movimientos, guardó la caja en su lugar y tomó su bolso dejando con rapidez la habitación, próximamente la casa.

Me arrastré fuera de la casa viendo la caja con aquellos libros para negar de inmediato con risas.

No sabía que habían películas sobre eso, menos que los CD en esas cosas seguían estando.
Hay tanta tecnología que no pensé que eso seguiría ahí.

Salí de casa de Jungwon y caminé hacia la mía para trepar por la ventana hacia mi habitación donde me coloque el uniforme, me peine, maquille y me preparé para ir a la escuela.

Mamá me llevó asique al llegar nos dirigimos la mayoría a ver el entrenamiento del equipo de rugby.

Sería la primera vez que vería los uniformes en Jungwon...digo, he oído que el uniforme éste año le queda jodidamente bien y claro que no hay duda.

Jungwon en rugby es muy sexy.

𝑁𝑜𝑡 𝑓𝑜𝑟 𝑠𝑎𝑙𝑒 | YJ & TN | Donde viven las historias. Descúbrelo ahora