Perfect [Daryl Dixon & Tú]

CAPÍTULO 15: DE VUELTA A LA VIDA

Narra Rory

Empecé escuchar voces pero estas eran diferentes, no eran de mi cabeza, eran del exterior.

Podía reconocer la voz de mi mamá cantandome como siempre solía hacer para arroparme.

– por favor, solecito, despierta, te necesitamos. – intenté mover al menos un dedo pero no podía. – Carl y Harley te necesitan, todos te necesitamos pero ellos son los que mas te necesitan ahora, necesitan a su hermana mayor.

¿Por qué? ¿Qué habrá pasado con ellos?

– y tu papá... Rory, por favor, él no puede... aunque no lo creas, él no puede vivir sin ti, no puede vivir sin alguno de sus hijos, yo tampoco... te perdí una vez al meterte en ese hospital, no quiero volver a perderte.

Mueve un dedo... un sólo dedo al menos o abre los ojos, era lo que me decía a mí misma alentandome, no quiero morir aún.

Después de un rato, mamá se fue a descansar y se quedó Harley.

– Daryl... puedes entrar, no hay moros en la costa. – la escuché decir.

¿Por qué traería a Daryl?

– gracias, enana. – escuché sus pasos yéndose de la habitación y sentí cómo Daryl tomaba mi mano. – hola Rory... – susurró, jamás me había llamado por mi nombre, siempre me llamaba por algún apodo no tan lindo, bueno... yo igual. – por favor, despierta, lo lamento tanto... no fue mi intención, no creí que decirte así fuera a afectarte tanto... no debí hacerlo... sí eres algo insufrible pero no lo suficiente para tratar de hacer que te mates... además aprecio a tu hermanita, me recuerda a mi hermano... así que no te mueras... por favor. – besó mi mano.

Esperen, ¿besó mi mano?... Diablos...

– ¿qué haces aquí? – escuché a Shane muy molesto.

– la estoy cuidando.

– te dije que te mataría si te volvías a acercar a ella.

No, Shane... no lo hagas... no fue su culpa... no por completo...

– Sha..ne... – pude pronunciar.

– ¿Rory? – se acercó a mí y tocó mi mejilla.

– no... no lo... mates, por favor. – solté aún sin poder abrir los ojos.

– él hizo que...

– no...

– ¿quieres agua? – asentí y me dio un poco.

– él no fue, fue... quien me atacó para... quitarme las armas. – se quedó callado. – él o ella fue quién casi me mata, Daryl tiene razón. – escuché cómo se iba.

– iré a avisarle a Rick. – trató de irse pero no lo solté de la mano.

– Shane lo hará, lo conozco. – abrí mis ojos, por suerte estaba oscuro, lo único que me calaba era la luz de la lámpara.

– bien... así que... ¿tengo razón?

– cállate. – dije mirándolo, aún veía un poco borroso pero podía verlo. – fue tu culpa... pero también de mi mente y de el que me atacó. – sólo asintió. – y también tenías razón en otra cosa... – me miró. – aún puedo aprender a que se me rebale lo que me digan... y otras cosas... papá también tiene razón... por algo sigo viva, hay una razón para todo...

– qué filosófica. – reí pero el dolor comenzó a hacer acto de presencia. – hey, tranquila... es mejor que le hable a Hershel. – me soltó y se fue.