CAPÍTULO 94: PROTECCIÓN

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Desperté, noté que mis mejores amigos ya no estaban, en cambio, me encontraba sola. La habitación se veía muy oscura, sólo la luz de la luna entraba por la ventana a través de las persianas. Vi a alguien en el umbral de la puerta.

– ¿Daryl? – se dejó ver, era Matthew. – ¿dónde están Eli y Daryl? – le pregunté con miedo de saber la respuesta.

– en el fondo del lago, son comida de peces ahora... tal vez también de caminantes. – las lágrimas comenzaron a caer. – ahora eres completamente mía, nadie podrá separarte de mí.

– me das asco. – se acercó más y empecé a temblar, acarició mi mejilla. En su mirada se podía notar lo deseoso que se encontraba. – si no soy de Daryl, entonces soy nadie, a la única persona que amo y amaré es a Daryl. – no soy propiedad de nadie, pero quiero que se vaya, pero su mirada cambió a una enfurecida.

– ¿entonces si no eres Daryl, no eres de nadie?

– exacto...

– qué bueno que lo aclaras. – me quitó la almohada. – si no eres mía, no serás de nadie. – colocó la almohada en mi cara y comenzó a presionarla más y más, me empezó a faltar el aire.

– Rory, Rory... ¡Rory! – desperté, ahora sí desperté de verdad. Gracias a Dios, no fue real, sólo una maldita pesadilla. – ¿era una pesadilla? – asentí. – ¿sobre...? – asentí de nuevo. – estoy seguro que están bien, no son fáciles de matar. – lo miré mal. – ¿qué? Es verdad, se les da muy bien las confrontaciones. – sonreí. Negan no es mi persona favorita, pero puedo notar que sí ha cambiado para bien, hasta Ally lo reconoce, eso me da la confianza de darle una oportunidad. – están bien, cariño.

– te creeré. – sonrió. – ¿dejaste a Annie sola con cinco niños? – negó.

– apenas y podemos con Joshua, ¿en serio crees que la dejaría sola con un bebé y niños pequeños? – ladeé la cabeza de un lado a otro. – eso me ofende. – dijo poniéndose una mano en el pecho, sólo reí. – los niños hicieron pijamada en el apartamento de Ally, también Glenn, Maggie y el pequeño Hershel fueron a la pijamada.

– me tranquiliza escuchar eso, pero no saber de Eli y de mi esposo...

– descuida... ese bastardo aún está en Commonwealth, no es fácil salir de aquí sin ser visto. Los niños están a salvo, tú estás a salvo y lo están buscando, lo hallarán tarde o temprano. – expresó, logrando tranquilizarme.

– gracias... me siento mejor. – me tomó de la mano. – ¿te quedaste toda la noche?

– la mitad, relevé al chino.

– se llama Glenn... y es coreano.

– tú le llamas chino.

– soy la única que le deja llamarse así, si acaso también a Maggie, pero es algo nuestro desde que nos conocemos. – le expliqué.

– bien, Glenn. – sonreí feliz. – están bien y tú también, Nat dijo que no salió nada anormal en la tomografía, sólo te falta un tornillo, pero eso es mi culpa.

– al menos lo aceptas. – lo tomé de la mano. – gracias...

[...]

Para la tarde, Nat me dio de alta y Negan me acompañó a mi apartamento.

– los niños pueden volver, estaré bien.

– necesitas paz, tranquila, no te pongas ansiosa.

– ¿en serio le dices a una persona ansiosa que no sea ansiosa? – asintió. – aún debes aprender demasiado sobre salud mental. – aseguré. – iré al apartamento de Ally por mis hijos y mis hermanos, estoy bien.

– me voy a quedar para ayudarte.

– mejor ayuda a tu esposa con tu bebé, ellos te necesitan.

– tú también eres mi bebé. – sonreí sonrojada. – ambos lo son, así que la única manera en la que podrás echarme es patearme el trasero. – sonreí pensativa mientras me cruzaba de brazos. – eso no fue una invitación a hacerlo.

– lo sé, pero en serio voy a estar bien, Negan, sé que estás intentando ser un buen padre y lo estás logrando, pero estás exagerando, estaré bien, Nat dijo que estoy bien, lo peor que me puede pasar es una migraña.

– y el derrame cerebral o los aneurismas se manifiestan con una migraña.

– me sorprende que conozcas esos términos. – me miró molesto. – estaré bien. – volví a insistir. – si te quedas me dará una jaqueca, si no estoy con mis niños me dará una jaqueca.

– ¡no te puedo dejar sola! – soltó. – ¿qué tal si él vuelve? ¿Qué tal si te hace algo a ti y a los niños? No puedo dejarte sola, Daryl te dejó bajo mi cuidado y el de tus amigos. – lo abracé.

– está bien, quédate... – me abrazó también, todavía confundido. – gracias.

– no es nada, si quieres ve a descansar.

– ya descansé bastante... ¿qué te parece tener una tarde padre e hija? – mostró una sonrisa muy tierna y sus ojos se empezaron a notar llorosos.

– claro, me encantaría.

– muy bien, ¿con qué te gustaría empezar? – miró hacia la cocina.

[...]

Nuestra primera actividad como padre e hija fue cocinar, decidimos que estaría rico comer espagueti, así que eso hicimos, uno de cilantro y crema.

– quedó bastante rico, me encanta.

– heredaste mi don en la cocina. – reí.

– sí, supongo que sí.

– vamos por los niños, deben probar esto. – me levanté a la par de él y salimos del apartamento, el de Ally no queda tan lejos, así que llegamos rápido. Tocamos la puerta, pero nadie abrió.

– ¡Ally! – volví a tocar. – soy Rory, vengo por los niños. – seguí insistiendo. – esto ya no me está gustando. – intenté girar la perilla, está cerrado. – ¡Ally! ¡Dawn! ¡Norman! ¡Judith! – Negan me apartó y pateó la puerta, abriéndola, entramos y vimos a Ally, sus niños y mis hermanos en el suelo, inconscientes. – oh Dios... – me acerqué a ellos y les tomé el pulso, me relajé un poco al sentirlo. Sí están vivos.

– huele a gas.

– oh no... abre la ventana. – lo hizo y luego me ayudó a llevarlos a la habitación de Ally, abrí la ventana para que se ventile. Salí y busqué en la habitación de sus niños, no están mis hijos. De nuevo me empezó a doler el pecho. – Negan... – me miró. – no están Carl y Gen, estoy segura que fue Matthew.

– quédate con ellos, iré a buscarlos.

– no, tú quédate.

– Aurora...

– Matthew me quiere a mí, por eso se llevó a mis hijos, lo tengo que confrontar. – me dio su arma.

– ten mucho cuidado.

– lo tendré. – besó mi frente y salí de ahí.

Nadie se mete con mi familia, mucho menos con mis hijos.

No me importa si genero un problema más grande; lo voy a matar. 

Perfect [Daryl Dixon & Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora