Mi primer día de trabajo... otra vez. Yay.
– no te ves tan animada... – escuché su voz. – así que te cambiaste de trabajo, adivino... ¿sólo por mí? – se acercó a mí, trataba de no temblar. – vamos cariño, no soy tan malo.
– sí lo eres. – se mantuvo calmado, lo que me pareció extraño.
– al menos no soy un mentiroso, Rory Dixon. – cerré los ojos, mierda, ¿cómo lo supo? ¿Quién le dijo? – sí, ya sé que no te llamas Diana, ni que tu esposo falleció, ni que ya no te quedaba familia aparte de tus hijos. – me tomó de la muñeca y comenzó a apretarla.
– ¿en serio creíste que diría la verdad? Con sólo verte sabía que no debía confiar en ti. – respondí aún con el nudo en la garganta. – suéltame.
– ¿por qué lo haría?
– no quieres saber lo que Daryl podría hacerte. – traté de soltarme, pero sólo me apretó más fuerte.
– Daryl no es nadie para impedir estar con mi chica.
– no soy tu chica. – miró hacia alrededor, y al asegurarse que no había nadie me cacheteó.
– ¡hey, hey, hey! – escuché a lo lejos. – ¿qué ocurre aquí? – preguntó Eli acercándose.
– nada, compadre, esta mujer quiso... propasarse conmigo. – miré a Eli, él se veía furioso.
– ella no haría eso. – respondió defendiéndome.
– vamos, ¿a quién le creerás, a una desconocida o a mí? – preguntó tratando de verse inocente.
– a ella. – la cara de Matthew cambió. – ahora suéltala o hablaré con Daryl para que te suspenda. – me soltó, se notaba que estaba encabronado. – vamos... – corrí a él para abrazarlo y nos alejamos de ahí. – hijo de perra, te dejó marcado... te saldrá un moretón.
– no importa. – dije secándome las lágrimas. – muchas gracias.
– puedes hallarme en el hospital, trabajo ahí, siempre haré un hueco para verte si me necesitas. – sonreí agradecida. – y bienvenida, no pude ir a verte antes.
– gracias... – me volvió a abrazar. – te extrañé demasiado.
– yo igual, nos dejaste muy preocupados.
– lo sé, no debí hacerlo.
– ya no importa... – sonrió tratando de animar las cosas. – Nat me contó que tienes dos hijos.
– sí, Gen y Carl. – su sonrisa cambió a una melancólica. – sí, se lo puse por él.
– son hermosos nombres. – sonreí. – ¿qué hacías ahí?
– esperando a Glenn y a otros para salir de expedición, primer día de trabajo... yay... – respondí sarcástica y rió.
– no has cambiado nada.
– ni tú, me alegro de eso. – vi que más personas empezaron a llegar, Matthew seguía ahí, así que aún no podía acercarme, y no lo hice hasta que llegó Glenn.
– tengan cuidado.
– lo tendremos. – me acerqué rápido a Glenn y no me alejé de él hasta que Matthew se fue.
– ¿volvió a molestarte? – asentí y me miró insistente, sólo negué, haciendo que bufara. – bien... – carraspeó para aclarar su garganta. – él es Kike, John, Paul, Wendy, Joanne y ella es Louisa. – presentó señalando a cada uno. – chicos, ella es Rory, se unirá a nuestro grupo.
– ¿hay más grupos? – le pregunté y asintió. – mucho gusto.
– ojalá sepas correr rápido y usar armas, he llegado a conocer gente a este punto de la caída que no saben hacer ni uno ni lo otro. – dijo Paul.
– no te preocupes por ello. – aseguré.
– bueno es hora de irse, andando. – subimos a una camioneta y salimos.
[...]
Anocheció, tuvimos que quedarnos en una casa, tal vez a dos o tres horas de Commonwealth.
– ¿cómo te sientes? – me preguntó Glenn sentándose a mi lado.
– me siento mal de sentirme más segura afuera que dentro de esa comunidad. – hizo una mueca. – y la ansiedad me carcome.
– lo noté. – dijo tomando mi mano, tenía sangre seca de haber estado arrancando los pellejos que se encuentran a los lados de las uñas. – están bien, están con Daryl y con Ally, ese idiota no les hará nada... o estará muerto.
– ese no es el Glenn que conozco.
– pasaron demasiadas cosas, Rory, cambié, todos lo hicimos... – contó recargándose en mi hombro.
– sí, eso es cierto. – lo tomé de la mano y sonrió. – me alegro de aún tenerte, eres como un hermano para mí.
– y tú mi hermanita. – sonreí.
[...]
Volvimos a la comunidad después de dos días de expedición, en la entrada vi a mis niños, a mi hermanita y a mi esposo esperándome, al igual que Hershel y Maggie esperando a Glenn, y demás personas esperando al resto del grupo.
– ¡mamá! – se acercaron a abrazarme. – te extrañamos.
– y yo a ustedes, no sé cómo sobreviví dos días sin mis tesoros. – sonrieron tímidos, besé sus frentes, en cuanto me separé de ellos, Judith me abrazó. – hola solecito.
– hola Rory... – miró mi mejilla, tenía un moretón por la cachetada de Matthew. – ¿pasó algo afuera?
– lo de siempre, caminantes, una que otra caída. – mentí, besé su frente y sonrió. Me levanté y me acerqué a Daryl.
– ¿qué tal tu nuevo trabajo? – me preguntó.
– me siento mejor. – sonrió aliviado y me besó. – vamos, cuéntenme qué pasó estos días. – tomé a Jude de la mano y con la otra a Carl, mientras que Daryl cargó a nuestra niña.
[...]
Me acosté en su pecho, escuchando sus latidos, son como una melodía para mí, una que me calma, que me encanta.
– Eli me contó lo que pasó con Matthew. – dijo acariciando mi cabello.
– dime qué no le hiciste algo. – dije asustándome.
– no, sólo una suspensión. – lo miré. – es broma, pero lo puse a hacer algunas tareas... digamos que al final del día parecía una mierda. – sonreí.
– gracias. – sonrió tiernamente. – fue muy lindo de tu parte.
– por mí ya lo habría despedido y mandado a otro lugar, pero... entiendo que no quieres problemas. – explicó. – pero tampoco quiero que el que te molesta salga impune.
– lo aprecio. – besó mi frente y lo abracé más fuerte.
De alguna manera siento que nada ha cambiado entre nosotros, pero a la vez sí. No sé cómo explicarlo.
– mamá... papá... – escuchamos a Gen, ambos volteamos hacia la puerta, allí se encontraba nuestra pequeña tallándose un ojo.
– ¿qué sucede, arquerita? – le preguntó Daryl.
– tuve una quesadilla. – traté de no reír, sólo sonreí para disimularlo, igual que Daryl.
– se dice pesadilla, ven, cariño, ¿quieres dormir con nosotros? – asintió y se subió a la cama, acostándose en medio. Comencé a cantarle mientras que su papá le acariciaba el cabello, no tardó mucho en quedarse dormida, a la par de Daryl. Una escena tan hermosa, tan tierna. Si tuviera una cámara, capturaría este momento para siempre.
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Perfect [Daryl Dixon & Tú]
FanfictionRory Grimes es la hija mayor de la familia Grimes. La cual tiene una pésima relación con su padre, Rick, nunca ha sabido por qué pero siempre terminan peleando. Poco antes de que comenzara el Apocalipsis, debido a los problemas mentales de ella, deb...