Perfect [Daryl Dixon & Tú]

CAPÍTULO 98: AL FIN REUNIDOS

Salimos al mediodía, los niños al frente y nosotros detrás de ellos, vigilándolos.

– ¿y ya le dijiste? – me preguntó papá.

– sí, se puso muy feliz... – suspiré. – ahora sí podrá disfrutar la infancia del bebé como debió ser desde el principio con Carl y Gen.

– lo siento.

– culpo más a papá por eso, Daryl lo apoyaba en todo, seguía todas sus indicaciones.

– ni creas... ¿no te contaron por qué Rick desapareció?

– sí, intentó detener una horda y destruyó el puente.

– dije por qué, no cómo. – negué. – ya pasaron 6 años, así que no te enojes con él y Ally.

– okay... – dije confundida, ¿qué tienen que ver mi esposo y mi mejor amiga en eso?

– Daryl estaba ayudando a retrasar a Rick de volver a Alexandria, para que Allison pudiera matarme... Al final no lo hizo porque le di lástima. – comenzó a explicar. – por lo que Daryl me ha contado, se pelearon a golpes y luego se arreglaron, vieron la horda y Rick le dijo que la iba a desviar... supongo que no esperaba que fuera una horda tan grande... y pues... según lo vieron herido, se estaba dejando morder pero mataban a los caminantes antes de que lo hicieran, vio la dinamita y disparó. – lo miré con los ojos llorosos.

– ¿entonces... por culpa de Daryl, Allison y tuya... mi papá desapareció? – asintió serio.

– nadie te dijo nada porque se trataba de Ally y Daryl, ella me contó que cuando llegaste trató de decirte pero te dio un ataque de pánico al ver a Daryl.

Ally tomó aire y me tomó de las manos, cómo si estuviera tomando valor para decir algo.

– esto es algo que no te agradará escuchar y que será difícil de escuchar.

– ¿qué? – se veía demasiado nerviosa. – Ally, ¿qué es? ¿Es sobre Daryl? Ya sé que él sigue vivo.

– sí, es sobre él, pero... – escuché su risa y volteé, estaba con Judith, RJ y Lydia. Fue entonces que empezó mi ataque de pánico.

– mierda... sí, lo recuerdo. – dije. – supongo que para que las cosas entre nosotros no empeoraran. – suspiré exasperada, aguantando las lágrimas.

– no lo escuchaste de mí, ¿okay? – asentí.

– ¿te dan miedo? – le preguntó Jude.

– claro que no. – respondió y ambas nos miramos incrédulas, obviamente sí les tiene miedo. – bien... sería mejor separarnos, así cubrimos más territorio. – recomendó. – niños con niños, niñas con niñas. – reí.

– bien, ve con tu abuelo. – le dije a Carl. – y cuídalo, ya está un poco grande, se puede perder. – bromeé.

– qué graciosa. – contestó con sarcasmo. – ándale cerealito. – ambos se fueron a la izquierda, nosotras a la derecha.

– ¿cerealito? – preguntó Judith.

– una vez Gen lo escuchó decirle así a Carl y confundió serial con cereal, desde entonces les dice cerealito y cerealita o gemelos cereales.

– es un buen apodo. – aceptó.

– sí... – escuché pasos. – ¿Carl? ¿papá? – pregunté gritando.

– ¡Negan! ¡Carl! – gritó Judith y se escuchó que algo cayó del estante, hay alguien del otro lado y dudo mucho que sean ellos dos. – puedes salir, no te haremos nada.