12 ángeles, 1 problema

¿lo recuerdas?

Después de un par de horas sin  rastro alguno de los báculos, los equipos se desanimaron, decidieron que lo mejor era ir a dormir, al día siguiente seguirían buscando.

Todos se fueron a sus habitaciones a excepción de Cus... ella estaba triste, muy triste..

- Rumsshi - susurró Cus con los ojos llorosos - te extraño, y no sé si pueda regresar pronto.

- sabía que era mala idea venir - le confesó una voz, era Korn.

- pero Korn - dijo ella - Tú eres muy asertivo siempre.

- ni creas - confesó con una sonrisa amable mientras se sentaba al lado de Cus - a veces me puedo equivocar, como todo el mundo.

- ¿por qué ya no eres el engreído de siempre? ¿quién eres y qué hiciste con Korn? - preguntó ella sorpresivamente.

- soy yo Cus - dijo Korn - yo y mis tonterías!

- estás actuando raro - confesó la pequeña - ¿qué te pasa?

- a veces me pongo sentimental, es todo - aclaró Korn.

- auhhh!!! que ternura! - exclamó Cus - ¿quién diría que el más frío de mis hermanos tenía sentimientos encontrados?

- ya cállate - le ordenó Korn mientras sus mejillas se tornaban rojo carmesí - ni siquiera estoy llorando... aquí la llorona eres tú!

- es cierto - respondió - ¿y qué?

- que no entiendo de donde sacas tantas lágrimas! - rió Korn. - y aunque la vida me cueste llorona, no dejaré de quererte, no dejaré de quererte, no dejaré de quererteeeeee, hay! hay! haaaayyy!!

- ya deja de cantar! - le ordenó Cus - lo haces horrible!

- es un cumplido - respondió él con una sonrisa satisfactoria.

- ¿sabes? - dijo Cus - hablando de llorar... ¿recuerdas cuando estábamos pequeños y te caíste de las gradas por estar bailando? - preguntó ella riendo alegremente.

- no sé qué es más increíble, que me haya caído o que te acuerdes de eso... ¿ y a qué viene el tema?

- a que lloraste como una niña!

- como tú todos los días - afirmó Korn.

- bueno, en su defecto soy una niña - confesó Cus con una sonrisa. - que recuerdos! ahora ni aunque papá te diera su puesto te pondrías a bailar!

- ahora que lo mencionas, recuerdo cuando estábamos jugando con Sour y se rompió el columpio donde él estaba... que vergüenza! - admitió Korn con una sonrisa.

- ¿qué? - se sorprendió Cus - yo no sabía nada de eso! ¿y qué pasó después?

- bueno...

- después Helles salió y nos regañó por ser tan indecentes - confesó el mismo Sour que se encontraba en la puerta, sonriendo.

-¿hace cuánto fue eso? - preguntó la niña.

- este año - respondieron sus hermanos al unísono.

Cus comenzó a reír y al verla tan alegre los chicos sonrieron.

- Sour - le llamó Korn.

-¿qué pasa? - respondió este.

- no nos estabas espiando... ¿verdad? - preguntó Korn con tono serio.

- ¿cómo crees? - respondió Sour nuevamente - es solo que no puedo dormir...

- tienes demasiadas cosas en la cabeza - sugirió Cus.

- déjalo Cus, seguramente está pensando en su amada Helles - le aclaró Korn en tono pícaro.

- ni siquiera había pensado en Helles, y para tu información, ella...no....me....gusta!!!!

- si claro, lo que tú digas! - le respondió Korn.

- y para todo esto... ¿han visto a Gregory? - preguntó Sour.

- tu nuevo novio! - exclamó Cus curiosa.

- no Cus, es mi guitarra - confesó Sour avergonzado.

- no hemos visto nada - aclaró Korn con los brazos cruzados.

- voy a buscarla - dijo Sour y se fue.

- ese tipo quiere más a su guitarra que a su Diosa Helles! - comentó Cus.

- Sour es un caso - dijo Korn cerrando los ojos - tengo sueño, me iré a dormir.

El chico se levantó y caminó hasta su habitación, literalmente iba casi dormido, tropezando con todo hasta que llegó por fin.

Cus también se había marchado, pero antes de llegar a su habitación escucho una guitarra sonando.

- que bueno que la encontró - se dijo a si misma refiriéndose a Sour.