Besayunandonos

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CALLE

Eran las 11 de la mañana, habitualmente no me levantaba tan tarde pero ayer tuve una serie de descargas emocionales que me hicieron el sueño profundo.

-Poché?
-Aquí gorda...
Abrí los ojos al sentir vacío su lado de la cama ¿despierta tan temprano?
-Está todo bien?
-Si amor, me acabo de levantar... espera espera es que estoy dándole de comer a Ramón.
Sonreí, Ramón Ramón ... si no fuera por el ese día en el parque no estuviéramos aquí.
Tome mi cabello con una coleta y me levante, fui al baño lave mi rostro y mis dientes.
-Quieres que haga el desayuno?
-Si amor si quieres, ¿no quieres salir a desayunar?
-No nena, lo hago ahorita.
Abrí el refrigerador y saque 5 blanquillos, tortilla de harina, queso, mantequilla...
-Buenos días.
Era Poché abrazándome por la espalda, traía puesta por pijamas unos cacheteros blancos y una camiseta que le cubría hasta donde el interior.
-Buenos días.
Me voltee y le di un beso en la frente.
-Que bonita te miras amor.
Me sonroje... ¿que? Enserio sonrojarme!!?
-Voy a hacer el desayuno.
Sonreí y ella se apartó, comencé a batir los huevos. Poché comenzó a recoger la sala y a limpiar un poco el tocador, puso música... comenzó a bailar. Me encantaba esa enana danzante.
-Calle!
Reaccioné.
-Mande?
-Se te va a quemar el desayuno.
-Ah si si.
Poché río y voltee la torta de huevo. De nueva cuenta comenzó a bailar, ahora moviendo las caderas haciendo que la diminuta camiseta se levantada y dejará ver su .. lindo trasero. Trague saliva, volteo a verme.
-Amor! Se va a quemar el desayuno.
Sonrió provocativamente, si si si, me estaba provocando y yo cayendo como una maldita boba.

-Ya está María José.
Comencé a servir en los platos dándome pequeñas palmadas en las mejillas.
Puse su plato del otro extremo de la mesa.
-Está delicioso amor.
Dado que la camiseta estaba flojita Poché recargo sus brazos en la mesa haciéndose para adelante dejando ver... aquella silueta de sus lindos pechos. Trague saliva, estas provocaciones estaban descontrolándome.
-Que.. que bueno que te gusto .. si.
Poché volvió a sonreír.
-Que pasa amor?
Pasó a lengua por sus labios aparentando limpiarse los sobrantes de comida pero no tenía nada, ¡nada!
-Nada...
Tome los cubiertos y seguí comiendo, no quería hacer contacto visual.

Terminamos el desayuno después de platicarme que Juana ayer había llegado y había dicho que su mamá estaba enferma y que Vale se quedo en casa con papá, que el señor Juan Carlos le había dado una gelatina para su mamá en forma de agradecimiento por llevar a Vale a casa.
Comenzamos a recoger la mesa, fui al fregadero a dejar los trastos sucios, Poché estaba de espaldas mío limpiando la mensa, se estiraba para limpiar los bordes...
-Basta.
Me acerqué a ella, tome su trasero con mis manos, después acaricie su vientre y la pegue a mi. Soltó un pequeño gemido y la tome por la cadera volteándola a mi.
-Pensé que nunca lo harías.
Sonrió al verme.
-Me encantas.
Bastó eso para comenzar con besos brutos, eran demasiado apasionados, la subí a la mesa, tomo por mi cuello y se pego a mi.
-Eres muy provocativa.
Mis besos fueron bajando por su cuello haciendo pequeñas marcas en el, amabas estábamos ya muy prendidas.
-Me encanta serlo.
Pase por su oído, su piel se le enchino, la punta de mi lengua pasó por su oído, mordí la punta de este provocando que jalara mi blusa.
-Uy Calle...
-Andabas provocando no? Ahora aguántate.
Quite la blusa floja que traía puesta... eche un poco para atrás para apreciar su hermoso cuerpo.
-Eres hermosa María José.
Me lancé a ella de nuevo retomando los besos en el cuello y mis manos sobre sus caderas, entre besos quito mi blusa y comenzó a apretar mis pechos, amabas teníamos los pezones duros por la intensidad de aquellos besos.
-Andes de que ensucies la mesa que ya limpiaste ven.
La monte a mi y camine hacia la recámara besándonos.
-Auch Calle!!!
Grito riendo, por cerrar los ojos no me di cuenta que tenía que hacerme dos pasitos a la derecha para evitar chocar con la pared.
-Ay perdón es que venía besándote.
Reímos y seguíamos besándonos. Llegamos a la cama y la aventé, hice a un lado todas las sabanas y cobijas que teníamos encima. Baje de una su interior blanco... trague saliva y abrí sus piernas.
-Ca... Calle..
Comencé dándole besitos húmedos por sus muslos y entre pierna. Subía al vientre chupando ligueramente.
-Ahhh...
Arqueo su cadera, volví a abrirle las piernas y hundí mi cabeza.
Podía sentir como tomaba mi cabello con más fuerza cada que mi lengua entraba y salía de su vagina, Poché sabia delicioso. Subí introduciendo mis dedos con fuerza haciendo movimientos que terminaron por hacer que Poché llegara al climas, me deje caer a su lado.
-Calle...
Suspiro y dejo relajar su cuerpo, toque sus piernas y temblaban.
-No tiembles amor.
Le di unos pequeños besos para que se repusiera, se le miraba cansa con la boca seca y ojos cerrados.
-Que pasó gorda?
Pregunté burlonamente.
-Me encanto.
Tomo mi mano y me acosté a su lado, subió una pierna arriba d mi y me abrazo.
-Te amo Poché.
Abrió los ojos y sonrió. Acaricie su cabello bajando por su espalda y subiendo de nueva cuenta.

Lectoras menores de edad, no me gusta mucho que lean estos caps... y al resto espero que les guste, estaba pensando en omitir los smuts, aún lo pienso. 😂
Leo y respondo todos sus comentarios. Besos babys buenas noches. ❤️

¿Amor real?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora