Cosas buenas le pasaban a gente mala, así como cosas malas le pasaban a la gente buena. La cuestión en aquello estaba en, siendo así, ¿cuál de las categorías correspondía a todos ellos? ¿La Orden eran los buenos? ¿El clan los malos?
¿Quién decidía el rol de cada personaje en el teatro que representaban durante aquella "Guerra Santa"?
Era vivir o perecer.
Perder o ganar.
Siete mil años de resultados.
Siete mil años de lucha incesante.
Entonces...
Wisely se detuvo, sus ojos se abrieron mientras se giraba hacia la puerta con una expresión exasperada. Road no aparecía, Road lo estaba evitando y... Y Sheryl acababa de entrar a su habitación, luciendo de mil maneras excepto feliz de verlo.
Bufó.
—Tyki ha salido a dar un paseo por la ciudad —informó, sabiendo de antemano aquello que el Kamelot quería saber—. Prometió regresar antes de la cena, parece ser que está preocupado por algo, pero no me lo ha dicho.
—Pero lo sabes.
—Puede ser.
—¿Es el mimado?
—No te lo diré —rodó los ojos, regresando su mirada al libro en su regazo, Sheryl se acercó y se sentó frente a él—. No es algo que quieras saber, de todos modos, ¿has venido a preguntarme por el decimocuarto otra vez?
—¿Cómo está Road?
—Viva —elevó el libro y se recostó en la cabecera de su cama, ignorando con cierto descaro al otro—, tan viva como puede estar. Su energía es débil todavía, no he podido hablar con ella desde hace unas horas, pero por ahora su recuperación es progresiva.
—Me alegra escuchar eso —suspiró relajándose ligeramente, mirando el techo de la habitación con aire pensativo—, sabiendo eso me siento tranquilo. Pronto volveré a verla.
—¿Seguirás con rodeos o me preguntarás por el decimocuarto?
—¿Tanto deseas hablar de él?
—¿Sinceramente? —se encogió de hombros, abriendo el libro en la página que había marcado tres días atrás— No tengo resentimientos contra él... No mayores al que queda después de ser asesinado, por lo menos. El decimocuarto siempre fue un hombre interesante e imposible de leer.
—¿Incluso para ti?
—Su cabeza siempre estaba hecha un desastre, era como entrar a la habitación de Jasdevi —las palabras "Ella lo besó" fue el recibimiento que le dio la historia—, lo único común entre su mar de pensamientos e ideas revolucionarias, sin embargo, siempre fue una persona y no, no te preocupes que no era Road.
Sheryl lo miró finalmente, un poco disgustado por la falta de interés por parte de todos hacia su linda niña. Road era preciosa, inteligente, amable, astuta, empática, hermosa... ¿Ya había dicho que Road era preciosa?
Su amor por ella era tonto.
Wisely frunció el ceño irritado por las acciones de los personajes de su libro.
Un libro que había heredado de un muerto...
Escuchó al diplomático aclararse la garganta.
—Liberaste a Bookman sin consultarlo conmigo, también te encargaste de desaparecer al Jr —rodó los ojos, sabiendo el reproche que venía—. Lo único que te pido, Wis, es que me cuentes sobre la relación del decimocuarto y mi Road, sólo eso.
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Noah.
أدب الهواة¿Qué hubiera sucedido si, en vez de Mana, Allen hubiese sido adoptado por alguien más? ¿Qué sería de él y quién lo hubiera hecho? ¿Qué habría pasado si ese sujeto en cuestión fuera un aliado del conde? ¿Un Noah? ¿Allen seguiría siendo el mismo o est...