o23

7.6K 992 662
                                    

"Cuando qué bonito es ser distinto"

—¿Y TU QUE HACES CON ESA ROPA EXTRAÑA, POS?

—Me preparo para el Colegio Muggle.

Reí pensando que se trataba de una broma, pero al ver que el no me acompañaba en las risas y se mantenía completamente serio, me alarme. —¿T-tú, que?

Poseidón me dedico una mirada exasperada. —El año escolar en Hogwarts esta por empezar y cumplí once años al inicio de este año.

—Pero las cartas aun no llegan.

—Lo que sea —se encogió de hombros restándole importancia—, me preparo para lo peor y espero lo mejor.

—¡Pero las cartas aun no llegan! —repetí—, por Merlín, Pos. Estas exagerando.

—No lo hago.

—¡Le diré a nuestros padres! —amenace y camine directo hacia la puerta trasera, esperando encontrar a nuestro papá en el patio con alguna de sus criaturas o a mamá leyendo en alguna parte de la casa.

—Fue su idea —contesto y me detuve, sin poder dar crédito a las palabras que mi hermano había dicho—, no te sientas mal por mí, Hades.

Lo observe por unos segundos y trate de recordar el momento exacto en el que él había crecido tanto, seguía teniendo sus llamativos ojos y su piel demasiado pálida para mi gusto, pero para mí siempre seria precioso. Con apenas once años, Poseidón Theoí aceptaba que probablemente podía ser un Squib —lo cual no tenia nada de malo—, pero yo no. Camine hacia su dirección y peine su cabello un poco —demasiado— largo y sin poder evitarlo, sus ojos se volvieron acuosos.

—¿Quién lo diría, eh? —cuestiono mientras dejaba salir una pequeña risa irónica—, el primer Theoí en cientos de años en ser un Squib.

—No eres un Squib.

—Que lo repitas no lo hace real, hermana —froto sus ojos intentando quitar cualquier rastro de lágrimas—, como dije antes, estoy bien, Al menos se que la magia existe, los Muggles ni eso. Soy afortunado.

—Nosotros somos afortunados de tenerte, Ocean.

—Oh por favor, no digas mi segundo nombre —pidió.

Solté una suave risa, repentinamente Pos se abalanzo sobre mi y me dio un inesperado abrazo que devolví con el doble de fuerza.

—¿Esto no cambia nada, cierto? —pregunto en un pequeño susurro.

—Claro que no, siempre serás mi pequeño hermano.

Lo mantuve en el abrazo por unos cuantos segundos de más, hasta que Zeus hizo acto de presencia en compañía de su mejor amigo, Ben.

—¿Es la hora de lo abrazos? —se mofo—, porque Ben se ve como si necesitara uno.

Ben, quien se encontraba a su lado, abrió los ojos en una mueca de sorpresa y le regalo a Zeus una mirada para nada bonita, causando así la risa de mi hermano mayor. Ben alterno su mirada evitando en todo momento el contacto visual conmigo y reí, acción que solo provocó un fuerte sonrojo de su parte.

Aun con el color rojo presente en sus mejillas hablo. —Hola.

—Hola —devolví—, interesante charla chicos, pero se me hace tarde.

—¿Tarde para qué? —pregunto Zeus.

Poseidón se apresuró a contestar por mí. —Remus la invito a conocer a su madre.

—Espera, ¿qué? —pregunto de nuevo y de repente una sonrisa burlona se pinto en su rostro—, ¿no es demasiado pronto para conocer a su familia?

INEFABLE.© | remus j. lupinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora