INEFABLE.© | remus j. lupin

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"Entiéndeme. No soy como un mundo ordinario. Tengo mi locura, vivo en otra dimensión y no tengo tiempo para cosas que no tienen alma."

—Charles Bukowski.

SUBIR AL TREN SIN LA COMPAÑÍA DE ZEUS SE SENTÍA EXTRAÑO, a mi lado Poseidón Theoí sostenía con firmeza mi mano y me empujó ligeramente para animarme a subir, Sirius jalo un mechón de mi cabello en busca de una sonrisa pero solo atiné a mirarlo mal, no estando de humor. Tomé aire e hice una mueca, no era lo único que se sentía extraño, el ambiente en el andén 9¾ carecía de esa actividad burbujeante que era usual ver al inicio de cada año escolar.

Pesé al extraño sentimiento continué subiendo y camine hasta el último compartimiento del Tren con la esperanza de encontrar a alguno de los dos Merodeadores faltantes. James había venido con nosotros pero aún seguía despidiéndose de sus padres y fue una sorpresa que mamá no extendiera su despedida y nos alentará a subir, miraba de vez en cuando sobre nuestros hombros y cuando gire en busca de lo que nuestra madre veía, no encontré nada.

Pidió que escribiéramos seguido a casa y que nos veríamos en Navidad, compartimos un último abrazo en donde nos envolvió a los tres y nos dejó ir.

Llegamos al compartimiento sin interrupciones, Sirius fue el primero en acomodar su baúl, tomó el mío e hizo lo mismo e intentó ayudar a Pos pero este dijo que podía solo, era un chico grande.

Reí al escucharlo.—Siempre serás el bebé, hermanito.

La puerta se abrió y por ella entro Colagusano, sus mejillas estaban rojas debido a que arrastraba su baúl, Pos se puso de pie con la intención de ayudarlo pues estaba más cerca, cuando ambos terminaron tomaron asiento. Nos habíamos visto hace pocos días por lo que dudaba que hubiera ocurrido algo interesante de cualquier manera, iba a preguntarle a Pete que tal habia estado su fin de semana hasta que una vez más la puerta del compartimiento fue abierta.

Cornamenta y Lunático reían alegremente, Jamie traía consigo su preciada Snitch y Remus lo miraba con atención.

—Los últimos serán los primeros—fueron las palabras de James cuando entraron al compartimiento.

Nos dedicamos a charlar animadamente, este era nuestro sexto año, el cuarto año para Pos y el séptimo para Zac, suspire, todos nos estaban dejando atrás, supongo que es parte de crecer pero no podia evitar que el sentimiento de abandono se hiciera presente. Sin embargo estaba bien, todos eran felices y se encontraban bien.

Antes de que el Tren avanzara, Lunático anuncio que debía de asistir a la reunión de prefectos, lo anime a caminar hacia ahí con rapidez, pues de otra manera tendríamos en unos pocos segundos a Evans rondando por el compartimiento y honestamente quería evitarme el espectáculo de Jamie, asi que el marcho en dirección contraria, el compartimiento de prefectos estaba en uno de los primeros vagones del Tren.

A mitad del viaje Pos se separó de nosotros y anuncio que iría en busca de sus amigos, Sirius bromeo diciendo que en realidad iba con su novia secreta pues durante las vacaciones, nuestro pequeño hermano habia estado intercambiando correspondencia con alguien desconocido, primero pensamos que era Zeus con quien se escribía pero al recibir cartas del mismo Zeus, descartamos la idea y lo dejamos pasar, hasta que las cartas llegaron con más frecuencia, eso por supuesto que alerto a mamá Oso A.K.A Abbey Theoí quien de inmediato trato de conseguir información pero Pos no tenia un solo pelo de tonto, logro librarse de todos los interrogatorios y eventualmente mamá se rindió, diciendo que si era alguien importante todos nos enteraríamos algún día.