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"Yo soy fundamentalmente un optimista. Si lo soy por naturaleza o por crianza, no lo puedo decir. Una parte de ser optimista es mantener la cabeza apuntando al sol y los pies siempre moviéndose hacia adelante"

—Nelson Mandela, Por sí mismo.

DI UN PEQUEÑO SALTO QUE ME PERMITIÓ AVANZAR UN POCO MÁS RÁPIDO, conseguir los ingredientes para las primeras pruebas experimentales de la poción sin nombre de Remus, estaba siendo una auténtica pesadilla. Por un segundo considere la idea de pedir ayuda a alguno de los chicos o a mi propia madre, pero rápidamente descarte la idea pues el simple hecho de involucrar a alguien en un tema tan delicado para Rem, hacía que mi estómago se encogiera. Y por si fuera poco mis intentos de transformación completa eran un continúo desastre no importaba que tan fuerte lo intentara.

Por supuesto que aún estaba el camino de la Animagia pero era un tema tabú para Remus, al menos que de alguna manera los chicos plantearán la idea, pero por lo pronto no tenía más alternativas.

Pase una de mis manos por mí frente, asegurándome de quitar cualquier mechón de cabello fuera de mi vista, di un pequeño suspiro y apresuré mi marcha.

Una extraña planta, era lo que en esos momentos buscaba y para eso había despertado muy temprano y previamente había colocado lo que consideraba necesario en mi mochila, mi pequeña excursión secreta tendría que haber sido solo eso, pero claro que no considere que el más pequeño de la familia solía madrugar incluso cuando estábamos de vacaciones.

Así que Pos me sorprendió tratando de salir de casa y ahora el caminaba un par de metros atrás de mí, fascinado con cada pequeño animal o planta que veía.

Ajuste las correas de mi mochila y mire sobre mi hombro.—Pos —lo llamé—, no puedes detenerte cada dos metros solo porque viste un insecto diferente.

—No es solo un insecto diferente—contesto—, es el insecto...

Puse los ojos en blanco—... Más extraño que veremos jamás—termine su oración—, lo sé, lo has dicho en todas las ocasiones anteriores.

—Sigue siendo cierto—señalo—, de todas formas no sé qué hacemos aquí.

—¿Senderismo?

Pos arqueó una de sus cejas en signo de incredulidad.—Claro.

—Si te digo te convertirás en cómplice—añadí.

—Soy feliz en la ignorancia.

—Eso creí.

Pos se alzó sobre las puntas de sus pies y pies y pareció que acariciaba algo, giro lentamente en mi dirección y en voz baja pregunto.—¿Buscas algo para Remus?

Mi boca se abrió y trate de recomponerme rápidamente y fingiendo parecer despreocupada hable.—¿Remus? ¿Porque estaría en el bosque buscando un sabrá Merlín que a esta hora?

Mi pequeño hermano se detuvo a mirarme y analizar mi respuesta, al final solo alzó sus hombros.—Conociéndote creí que querrías hacer algo para ayudar a Remus con su condición de Hombre Lobo. Supongo que me equivoqué.

—¿C-como es que...?

—¿Lo sé?—pregunto—, bueno, no quiero parecer un entrometido o algo así, simplemente tuve que hacer cuentas y soy muy bueno respecto a Criaturas Mágicas y sus comportamientos.

—¿Hablas en serio? ¡Me tomo años!—bufe—, ¡Ni siquiera es tu mejor amigo y lo dedujiste!

El berrinche que estaba formando se vio interrumpido por la pequeña carcajada que Poseidón dejo salir. Gire a verlo y el simplemente se encontraba de pie, luciendo su sonrisa más deslumbrante.

INEFABLE.© | remus j. lupinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora