Every breath you take

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Cada paso que des, te estaré observando.

Jihoon escuchaba la alarma a lo lejos, podía escuchar el ruido de los autos del otro de la calle, sabía que era hora de levantarse.

Al incorporarse y mirar el piso por un rato, perdido en sus pensamientos por fin dio un gran suspiro mientras se estiraba para ponerse de pie e ir a buscar algo de comer, su estómago estaba vacío.

Su departamento era el ideal para un joven soltero, tenía todo lo necesario y luego daba una luz espectacular durante las mañanas y se miraban unos atardeceres hermosos.

Jihoon esa mañana solo había desayunado un plato de fruta fresca y un jugo verde natural, algo que pudiera comer rápido ya que se le hacía tarde para sus deberes.

—¿Por qué tan tarde Jihoon?—Pregunto Mingyu, el vecino del bajito.

—Me dormí tarde trabajando y no me pude levantar a tiempo.

—Jihoon, eres el jefe, no tienes porque ser tan estricto con todo.—Mingyu sonaba orgulloso de decir aquello.

—Esa es la diferencia entre nosotros.—Jihoon revisó su correspondencia.—Tú eres el primero en irte y el último en llegar al trabajo, no tienes control de tu empresa.

—Si no fueras mi amigo te golpearía.

Jihoon miro ese sobre distintivo de color negro, con letras en color dorado las cuales formaban su nombre, cada vez que tenía que ver aquel sobre se congelaba.

—¿Aún no lo han encontrado?—pregunto Mingyu mientras miraba el sobre en las manos de Jihoon.

—No hay rastros de nadie, hace su trabajo muy bien.

Jihoon siempre temía abrir aquellos sobres, siempre habían fotos de él de cada día del mes, videos y en los peores casos una solo foto de una sola persona, en dos ocasiones habían aparecido solo una foto, la primera fue el primer amor de Jihoon quien había sido encontrando muerto en su casa y la segunda de su novio quien había sufrido un grave accidente, esas fotos siempre eran una advertencia para él y todas las personas a las que Jihoon quería.

—Son fotos.—Ambos jóvenes respiraron de nuevo.—No puedo esperar a que encuentren a este tipo, quiero mi vida devuelta, no quiero vivir con miedo siempre.

—Lo atraparán pronto.—afirmó Mingyu.—en cualquier momento se va equivocar.

Jihoon esperaba que aquello fuera pronto, siempre se sentía observado y con mucha responsabilidad de no relacionarse con nadie para que nadie saliera perjudicado.

La jornada laboral que Jihoon había sido menos cargada, por suerte porque tenía en su mente aquellas fotos de él durante todo el mes, ¿cómo era posible que aquella persona siempre supiera dónde estaba? ¿Era alguien que conocía?

—Jihoon.—el recién nombrado sonrió al ver al joven de ojos pequeños en la puerta.

—Pasa Soonyoung, ¿qué pasa?

—Tienes que revisar estos documentos.—respondió.—Soonyoung mientras le entregaba los papeles.—¿estas bien?

—Si.—mentira.—No, llegó de nuevo.

—¿Siguen con la investigación?—Soonyoung parecía preocupado.

—Sí, pero no hay rastros de nada ni una sola pisa, nada.

—Lo atraparan no te preocupes Jihoon.

Soonyoung era un gran apoyo para Jihoon en la oficina, era el único con el que se podía abrir y contarle todos sus temores.

Las horas pasaron rápidamente y la oficina donde trabaja Jihoon poco a poco se quedaba vacía, todos se dirigían a sus casas con la esperanza de un nuevo mañana.

Las calles ya estaban oscuras y casi vacías, era la hora perfecta para todos aquellos que escondían un secreto y poder cometer sus fechorías, en los callejones se escuchaban voces, las personas podían llegar a sentirse observadas.

—¿No puedes ver qué me perteneces?—dijo Soonyoung en la seguridad de la oscuridad mientras miraba a Jihoon salir e irse.

Soonhoon StoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora