Soonhoon Stories

Fui

Fui quien por ti cambió todo.

El reflejo de Soonyoung en el espejo era algo que aún no se imponía a ver, aquello de usar trajes no era lo suyo y no le gustaban, no podía moverse a gusto. Lo peor de todo era es que parecía mucho mayor de lo que realmente era.

—¿Estas listo?—Jihoon parecía bastante satisfecho al ver a Soonyoung vestido completamente formal. Gusto con a él le gustaba.—estas perfecto.

—Yo no me siento así.—replicó el alto volviendo su vista al espejo.—es incómodo.

—¿Cómo puedes decir eso? Si te miras perfecto, siempre debiste vestir así.—Jihoon se había posicionado a su lado.—Programé una cita para cambiarte el color de cabello.

—¿Qué tiene de malo mi cabello?—el mayor no parecía nada emocionado.—me gusta cómo está.

—Se verá mejor, el rubio te hace ver algo falso, todos sabemos que no es tu color natural.—Jihoon aprovecho para arreglar su corbata.—cuando cambies eso, serás totalmente perfecto.

—Perfecto ¿para quien?—el rubio se había sentando en la orilla de la cama.

—Para todos.—Jihoon podía ver la expresión triste del otro.—para mi. Sabes que yo solo quiero lo mejor para mi y se que lograrás serlo.

Aquello no reconfortaba para nada a Soonyoung, no quería escuchar de su pareja que tenía que ser perfecto para estar a su lado, ¿qué no se supone que se debía aceptar a la pareja sin condición? Si bien era cierto que Jihoon era perfecto y todo en su vida estaba totalmente planeado a Soonyoung no le emocionaba tanto tener que cambiar para poder estar a su lado.

—Bajemos, ya deben estar todos esperando por nosotros.—Jihoon sonrió mientras extendía su mano para guiar al mayor.—sonríe un poco, te miras hermoso cuando lo haces.

Aquella tarde se había organizado una reunión con todos los amigos y compañeros de trabajo de Jihoon. Desconocidos para Soonyoung.

Entre presentaciones y falsas sonrisas Soonyoung se encontraba rogando porque todo acabará pronto.

—¿Es difícil?—Soonyoung miro confundido a la persona a su lado.—estar con Jihoon.

—¿Te conozco?—cuestionó el rubio.

—Kim Mingyu, trabajaba con Jihoon.—explicaba el alto.—no pensé que fuera a encontrar a alguien que hiciera lo que él quisiera.

—¿De que hablas?—aquel chico tenía la atención de Soonyoung.

—Jihoon siempre habló de tener la pareja perfecta y todo lo que haría por conseguirlo, todo en su vida debe ser totalmente planeado.—Soonyoung podía observar a Jihoon conversando con unas personas.—veo que lo logró, eres una copia de él.

—¿Una copia de el?—Mingyu sonreía como si fuera lo más obvio.

—Supongo que en unos días te hará cambiar de color de cabello y serán totalmente iguales, pero dime ¿cómo te sientes con eso?—el rubio negaba.

—Solo estás diciendo cosas sin sentido.

—Piensa un poco, ¿cuando fue la última vez que usaste la ropa que tú querías? O ¿hacían algo que a ti te gustara?—Mingyu había logrado poner a pensar a Soonyoung.

Realmente hacía bastante tiempo que Soonyoung no usaba algo que le gustara o comía algo que a se le antojara, todo lo que hacía era fuertemente influenciado por Jihoon.

—Supongo que este no eres tú realmente.—termino por decir el alto.—no dejes que Jihoon acabe con tu yo real.

La risa de Jihoon llegaba hasta donde estaba Soonyoung, era tan extraño pensar en todas las ocasiones donde él hizo de todo por ocultar al verdadero Soonyoung y lo peor era es que lo quería seguir haciéndolo. De nuevo la idea de que si realmente lo quería debía aceptarlo tal y como era.

Jihoon discretamente buscaba con la mirada a Soonyoung pues aún habían personas a las cuales debía presentar. Era su gran día. Por fin había logrado encontrar al chico perfecto para tenerlo a su lado, si bien aún habían cosas por cambiar muy pronto sería totalmente digno. O quizás no.

—¿Soonyoung?—Jihoon no podía cree lo que miraba.

El rubio bajaba por las escaleras con una ropa totalmente diferente a la que siempre usaba, su cabello estaba despeinado. Todo él era un desastre para Jihoon.

—¿Qué haces vestido así?—Soonyoung sonreía.—¿por qué estás actuando así?

—¿Ya no soy perfecto para ti?—todos tenían la atención en ellos.—¿acaso con esta ropa ya no soy suficiente?

—No hagas esto aquí.—Jihoon quería seguir manteniendo su imagen.

—Pensé que estaba bien el dejarte cambiarme, primero mi forma de vestir, mis amigos e incluso lo que comía, lo hice porque así te bastaría un poco de mi, pero parece que hice mal.—Soonyoung parecía la persona más confiada del mundo.—jamás seré lo que quieres porque por más que te quiera no dejare que me cambies, tienes que amarme así o no.

—Será mejor que te vayas.—dijo Jihoon sin siquiera mirar al rubio.

—Intente cambiarlo todo por ti, pero tú no pudiste hacer lo mismo.—el rubio dio una mirada rápida a todas las personas.—esto jamás hubiera funcionado.

Con aire de victoria y liberación Soonyoung salió de la casa, al final de cuentas la vida solo era una como para complacer a una persona que no podía aceptarlo con todo y sus defectos.