¡Pedi un deseo y pasa esto!

Capítulo 29

No cometiendo el mismo error, como la anterior vez espero que ella se presentara por sí misma, hablara. Pero, para Emiliano ya era claro de quien se suponía porque lo había leído en su época su historia sobre ese manga casi terminando el mismo día que lo encontró de casualidad.

Una sonrisa de agrado, puso al enterarse de que era —"El Psi", "Reiatsu"—por las palabras de ambos. Sin notarlo alguien de los que habían puesto en el suelo abrió los ojos de repente.

Era Kushina, se irguió tan rápido como pudo. Empezó a examinar hacia todas partes sorprendida en donde se encontraba y recordando los sucesos que había pasado después de la huida de ese estúpido canalla.

Fue más grata su sorpresa que el mismo canalla se encontraba alli con otras dos personas charlando como si nada hubiera ocurrido.

En acto de furia Kushina se abalanzo sobre Emiliano, de su bolsa ninja saco un Kunai, mientras el no espera para nada, ese suceso repentino. Hablo como pudo en lo que trataba de ganar tiempo, para reaccionar sobre Kushina que estaba encima suyo de golpe y apuntando a su garganta con su Kunai. — Es una agradable vista estar así...Como todo chico le encanta tener una belleza sobre de él. Pero no sería mejor conocernos un poco para saltar hasta ese paso. —

Kushina con más furia quiso insertarle el kunai en su cuello como si nada le importara del mundo. Pero al presionarlo contra de él, su mano fue traspasando como si ninguna cosa tangible estuviera allí.

Con un movimiento ágil de apoyar su mano izquierda en el suelo se movió del lugar donde estaba en un ligero salto hacia atrás a toda deprisa. Escapo como pudo a la otra esquina de la habitación y dijo casi sin aliento por lo ocurrido. —Es bueno que hayas despertado y estés bien...Pero estas tratando de matarme. No te has dado cuenta que eso es definitivamente malo...—

Kushina quedo aturdida en efecto por su velocidad de reacción. Pero al captar su voz con más esfuerzo en su orgullo, quería asesinarlo a toda costa.
Uno, dos, tres... arremetió de un ágil fluctuar de su kunai, pero cada vez que se acercaba a Emiliano esquivaba apartando su mano con rapidez para no hacerle un grave daño. Aunque, un poco ya se estaba cansado de jugar ese juego y con su mano derecha agarro su muñeca, presiono con una pizca de fuerza, de una ligera patada baja a su talón la derribo contra el suelo y la desarmo en un instante pateando el Kunai a otra dirección.

Tan ágil como pudo con sus dos manos en una llave hacia atrás ejerció fuerza sobre los brazos de ella. Con una cuerda salida de la nada, la ato sin claras dudas de cuestionamiento de ambos que seguían viendo la pelea y la rapidez que la mujer quería asesinarlo.

Para Amamiya fue como si una pelea dos usuarios expertos de —«Rise» estuvieran dando una batalla. Estaba un poco conmocionada, había sucedido en un instante no había notado sin lugar a dudas. Al comienzo, que la sombra borrosa se trataba mucho menos de la chica del suelo...

Para Uryu no fue tan alto como ella, pero estaba en incertidumbre porque estaba tan alegre jugando contra ella y sabia su nombre exactamente...Eso era lo primero que quería preguntar a su otro yo y otras cosas más que aparentaba ese sujeto llamado «Águila».

Sin previo aviso a ellos dos. Alguien más había despertado, se irguió normalmente y su vista cayó al suelo, la habitación donde se encontraba. Se trataba de menos de Jiraya, sin predicamento el mismo, se paró comprobó que su cuerpo estaba bien no le había sucedido nada malo solo un ligero dolor persistió en su espalda.

Miro con atención a ambos Kushina como el Anbu que le había golpeado hacia un tiempo. Estaban jugando y no se preocupó de ello en absoluto, porque no noto sed de sangre salir de él. Si no se sentía más exaltado en ver porque Kushina se veía salvajemente atacándolo con furia, enojo resentido.