Capítulo 35

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Como todo hombre Emiliano se había esfumado después de hacer su intervención. Evitando todo problema relacionado con ello, pudo oír con disimulo la discusión de ambas y a la vez largo unos suspiros profundos de alivios. Porque no lo había notado a la primera las otras arrancares.

Pero en el rabillo de su ojo capto que la figura de Soi Fong se aproximaba con su shunpo a gran velocidad donde se encontraba Lilynette. Al ya estar cerca de ella levanto su pierna derecha para hacer una patada de hacha a su cabeza.

Sin pensarlo demasiado imagino sus pies como un rayo chispeante, se lanzó con todo en contra carrera a interceptarla. Levantando su pierna izquierda al último segundo a la misma altura para que pudiera pararla justo a tiempo.

*Estruendo*

Un choque de gran magnitud se formó en el cielo, viéndose de reojo entre el cruce, saltaron hacia atrás en un giro guardando suma cautela del uno al otro. Mientras de su boca le recriminaba a Lilynette....—Jefa, por favor no se distraiga si ve que hay shinigami adelante suyo...—

—Eh...—Lilynette habiendo recuperado el sentido. Vio a Emiliano alejándose de ella, le replico por su acción...—¿Quién te dio la orden que te entrometieras justo ahora? —

—Tu, lo hiciste y porque soy tu subordinado a como lugar, tengo que ser su protección. Le recordare que le suplique quería ser parte de su fracción. —Decía Emiliano de nuevo.

Lilynette al escuchar otra vez esa clase respuesta. le respondió divagando, mirando hacia otro lugar por vergüenza—¡Haz lo que quieras...! —

Pero, Soi Fong largo una mirada asesina y dirigió su palabra a Emiliano fuertemente...—¿Tu bastardo quién eres?¿No pareces un arrancar como ellos?—

—No tengo gana de decírtelo, pero si me invitas unas copas pueda ser capaz de hablar todo lo que quiera...—Respondió Emiliano y mirándola a la vez.

—Así que un casanova. Sé cómo tratarlos a los de tu tipo...—Replico Soi Fong, arreglando su postura

—Peleando, supongo. —Dijo Emiliano poniendo en postura de ataque con sus manos hacia adelante y un pie en frente

—Así que te diste cuenta...—Exclamo Soi Fong se posicionaba de la misma forma que él.

Saliendo a su máxima velocidad, ambos se desvanecían a cada fracción de segundo a intercambiarse golpes. Cuando Soi Fong encontró una apertura estaba por conectar su puño en su rostro. El esquivo sutilmente con gracia haciendo un giro a la izquierda, dejando un resplandor verde en su lugar, mientras volvía a atrás con su juego de pies, provocando con un tono burlón en su rostro...—¡Fallaste! —

Al siguiente ataque había encontrado otra falla en sus movimientos, estaba por darle un rodillazo a sus costillas. El contesto y contorsionándose un poco hacia un lado esquivo de nuevo con su mismo tono burlón dijo...—¡Fallaste de nuevo! —

Enojada por no poder darle a su enemigo un golpe letal y cargo el siguiente en su puño derecho con la suficiente fuerza para dejarlo noqueado en la siguiente oportunidad que le diera a propósito. Aunque, Emiliano de nuevo leyó el ataque choco con la misma magnitud de fuerza que ella su puño directamente....

Sorprendiéndose, alejándose en retirada por la chispa que había provocado en su mano, le volvió a recriminar de nuevo ... —¡Bastardo como sabes moverte tan bien, conocer el Hakuda de primera mano!

—¿Hakuda? —Expreso Emiliano hasta que recordó y hablo—Ah, hablas de ese Hakuda...—

—¡Así que eres un traidor más que se les unió a ellos! —Dijo Soi Fong.

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