¡Pedi un deseo y pasa esto!

Capítulo 80

Emiliano daba una mirada a todo el escenario y al público en general que estaba en sus asientos esperando el comienzo, Pero él solo escuchaba la voz del sistema decir...

[Creando dimensión de bolsillo, dado la aproximación del tamaño ideal...]

[Creando partículas estables...]

[Realizando escenario...]

[Estableciendo mejor escenario posible escogido al azar de distintos mundos por la memoria del usuario...]

....

.....

De pronto en el estadio se pudo ver radiantemente como una gran circunferencia de energía traslucida la recubría por completo. Además de que el cuadrilátero a poco se distorsionaba y se convertía en una gigantesca esfera que proyectaba un gran bosque petrificado con árboles de gran altura que igualaban a un simple rascacielos.

La gente que estaba bebiendo y mirando con grandes expectativas se quedaron con la boca abierta por completo, con el cambio que siguieron sus pupilas en un momento a otro. Un pequeño —dijo— a su madre—Mira mama, ¿Qué es eso? —

—Ah, si cariño—Asentó con la cabeza. seguía con su boca abierta de asombro como si fuera bastante irreal lo que sus ojos miraban en escena.

En tan solo un minuto más se empezó a oír una música....

En lo que escuchaban sentía la emoción recorrer sus cuerpos como si algo grande estaría a punto de pasar. Parando en seco la música, se oyó una voz fuerte, clara...—¡Ichi-kaisen kaishi (Ronda uno pelee, inicien)!—

Emiliano ya estando en el centro saco sus dos kunai de su bolsa ninja con precaución cuido todos sus lados de un ataque sorpresivo. Sintiendo que pronto que algo fue arrojado a su punto ciego, lo saco volando en un parpadear hacia el cielo. Una figura pronto se apreció de un joven de flequillo largo y sedoso, vestido con su capa negra con nubes rojas, de sus palmas salían boca de cada una mano.

La vista de Emiliano se concentró en detalle en el dando un suspenso claro y asombro de estar tan cerca. Rápido a su lado oyó el sonido de 'Kikikririkiri' de algo escurriéndose a gran velocidad a su espalda, saltando al último minuto noto la punta de la cola gris estirarse, volar a su dirección. Haciendo un movimiento desenvolvente piso al aire se arrojó, directo al tronco más cercano, pudo ver el cabello rojo de esa persona e igual con su capa distintiva de nubes rojas

Apoyándose con ambos pies en el tronco petrificado estaba a punto de hacer un sello de manos para ocultarse. Sin embargo, oyó repentinamente alguien cayendo con su guadaña sobre su cabeza, impulsando deprisa con un paso hacia un lado. Esquivando, lo miro también como su cabello plateado resaltaba y cara frenética con su lengua afuera lo ansiaba convertirlo en un sacrificio.

Su compañero en brevedad no tardo en emerger y estirar su brazo hacia él e intentar agarrarlo a la fuerza. Corriendo hacia atrás su cuerpo, dio un pequeño corte con su kunai a su mano, mientras retrocedía otra vez a volver a su lugar justamente.

—Hey Anbu sabes donde se encuentra el Jinchuriki del Kyubi—Pregunto Hidan sin esmero aparente de cumplir su misión, con ganas de asesinar a alguien justo ahora.

—No, pero no dejare Akatsuki, haga lo que quiera...—Expreso Emiliano

Sabiendo y reconociendo de quien se trataba ellos cuatro. Hidan velozmente se abalanzo con toda su fuerza frenéticamente sobre él, dando un cruce con su kunai se quitó la guadaña encima de su cabeza. Aprovecho para lanzarle una patada hacia adelante para sacarlo volando de vuelta a ellos.

Rápido sus pupilas captaron pasar una cosa redonda sobrevolando cerca, como si se tratara de un diminuto Dron

Deidara como Sasori estaban observando también esa cosa, agarrando una con su mano. Inspeccionaron el pequeño dron, preguntaron entre sí. —¿Qué diablos son estas cosas que vuelan alrededor de nosotros? —