Capítulo 58

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Tomando esa misma noche una decisión entre hablada con todos, se dispusieron a estar de acuerdo en el lugar que sugirió de ir para hacer dinero, ver si se encontraba una pista de la caja de los deseos. Sin saber ninguno de ellos, inconscientemente se dirigían a la misión que casualmente estaba en el panel de opciones que tenía Emiliano que cumplir como requisito.

Guardando para sí mismo el conocimiento de su existencia. Miro de nuevo la lista para ver las misiones secundarias que tenía aun en espera, se dispuso a escoger una de ellas por el poco tiempo que le quedaba para desparecer...

[Misión de Rango D: Captura y detén al sospechoso de los asesinatos en masa, ocurridos durante la semana ...]

[Recompensa: 500]

[Desea aceptar, esta misión]

[Si/No]

[Si]

"Esto será buena idea, no sé qué nivel tienen en este mundo, pero será interesante, como capturo al asesino en masa que ha estado haciendo estragos y hacerse sonar en las noticias en toda esta semana..."

Saliendo del hotel, se dispuso a caminar y recorrer las calles de la ciudad y decirse—"De noche se parece un poco a mi ciudad"—"Pero la diferencia es muy grata de verlo, las baldosas de las veredas no estén salidas y destruidas como siempre para hacerte tropezar"—"Aunque tengo esa extraña sensación que aquí hay, más inseguridad que en mi propio país"—"Mejor será deje de pensar así, si lo comparo bien con argentina al menos te respetan como peatón, no te desean atropellar como trapo sucio como aquí mientras pasan por la senda peatonal cuando está en claro rojo..."—

Diciéndose todo lo que había vivido en pocos días, visto en persona de ser el primer argentino en caer en otro mundo. Estaba por desviarse, pasar por un callejón que vio como atajo. Cuando escucho repentinamente y noto a un pequeño grupo de chicos reunirse, cerrarle el camino de forma aparente.

"Es en serio, me quieren chorrear1 aquí"

Haciéndose el tonto al pequeño grupo de rufianes, camino rápido sobre la pared de lado y paso por encima de ellos. Creando su propia ruta, se adentró al callejón volvió a notar que otro grupo estaba por cerrar en los siguientes pasos que escapo del anterior. Pidiendo primero amablemente, a los tipos delante...—Disculpe, deseo pasar...—

—¿Quién eres? y ¿Quién te dejo pasar? —Le contesto un joven.

—....!!!.—No expreso nada Emiliano y lo miro

—Te pregunte... ¿Quién eres? —Dijo el joven de nuevo.

Despareciendo fugazmente, sin que lo viera en un paso a alta velocidad entre ellos y dejándole hablando como si nada. Siguió caminado como no hubiera ocurrido e ignorando el hecho que le habían respondido.

Encontrando que varias veces adelante de 15 pasos en el camino, se presentaba la misma situación, le comenzó a preocupar...—"A donde carajos me metí, no parece como un atajo cualquiera"—"Porque siento que me vigilaran."—"Oh, será mi imaginación..."—

Llegando al punto que vio una puerta roja al fin del camino. Entendió razonablemente...—"Okey, esto no da a una calle..."—

Tratando de ignorar que había tomado el camino equivocado. Se dispuso a saltar y llegar al otro lado del techo para pasar la siguiente cuadra de manera fácil, para regresar a la calle principal. De la nada oyó los gritos de pánico de la gente saliendo huyendo del estacionamiento que estaba al lado del edificio de dos pisos....

—Corran todos...—Dijo alguien.

—Es el asesino Tree, el que te arrancas los dedos para hacer joyerías con ellos. —Dijo un tipo tomando el brazo herido

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