Día A Día Contigo

Infiel VII

Tomó sorbo de su cerveza mientras se sentaba en su camastro, observando los muros derruidos de la habitación, un portarretrato en una pared llamando su atención.

Era él abrazado de la guitarrista, sonriendo despreocupado, enamorado, invencible, como si nadie pudiese hacerle daño, como si el mundo le perteneciese.

Sonrió burlón, dejando la cerveza en la mesita de noche para luego pararse y descolgar la foto.

Era un bonito recuerdo de un pasado mejor, pero en ese mismo momento se le estaba clavando en el pecho como un cuchillo. Si quería seguir adelante, si quería hacer realidad sus palabras y mostrarse como un verdadero hombre, tenía que deshacerse de todo eso, de toda esa falsa felicidad para poder renacer de las cenizas.

Con un hondo suspiro, decidió que era lo mejor, saliendo de su habitación para buscar una caja, listo para tirar cada recuerdo que tuviese del amor entre Noodle y él.

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La japonesa se despertó con dolor de cabeza, pestañeando lentamente mientras trataba de ubicarse y reconocer el lugar donde estaba. Sonrió con pesar cuando se dio la vuelta y cayó de espaldas sobre su futón, moviendo la lengua en su boca solo para sentirla pesada, adormecida.

Se sentó, respirando profundo, frunciendo el ceño cuando percibió humo en el aire, levantándose con cierta dificultad para caminar hasta la ventana. Cerró los ojos cuando la luz del sol le pegó en de frente, pero los abrió de inmediato para ver en el patio de atrás de la casa una llama emerger de la parrilla que Russel utilizaba cuando cocinaba barbacoas.

Una gruesa estela de humo subió, mientras ella miraba, tratando de entender que pasaba.

Apretó los labios y sus ojos se llenaron de lágrimas cuando reconoció una bufanda que ke había regalado a 2D en su último aniversario. Creyó que Murdoc estaba quemando las cosas de Stuart hasta que vio un reluciente cabello azul brillar por la luz del sol, quien tiró una caja llena de papeles dentro de la parrilla encendida.

Era él quien quemaba todo lo que habían sido una vez.

Ese era el paso definitivo que ella jamás esperó que su Toochi hiciera.

Ese era el verdadero final de su amor.

Volví con un pequeño regalo de navidad.

2D superando su dolor paso a paso y Noodle pagando por su error