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Mijaíl tocó con experticia cada cuerda de su guitarra, afinando a conciencia su instrumento mientras estaba sentado en su esquina favorita de trabajo, unos cuantos curiosos mirando al hombre de pelo y abundante barba dorados tratar con delicadeza el objeto de madera.

Después de haber terminado con la afinación, tocó un par de melodías viejas, partiendo con una de The Animals, It's my life, su voz ronca, levemente nasal, decorando cada nota tocada con la letra de la canción; continuando de inmediato con Johnny B. Goode de Chuck Berry para terminar con House of the Rising Sun, la versión de The Animals.

Abrió los ojos cuando escuchó un par de aplausos, mirando con sus ojos de hielo al hombre de pelo azul que sonreía como un niño frente a él.

2D se le acercó para mirar los dedos largos y gruesos y la apariencia desaliñada del hombre que parecía un miembro joven de ZZ Top, grandes estelas de vapor escapando de los labios entreabiertos de Mijaíl, sus cejas rubias arrugadas con enojo.

- ¿Qué tanto miras? – Preguntó con un fuerte acento que Stuart identificó como de Europa oriental.

- So-solo quería fe-felicitarte, ti-tienes mucho talento. – El guitarrista se sonrojó, siendo casi imperceptible gracias a la gruesa capa de barba que le cubría la mitad del rostro; la única persona que lo felicitaba por su habilidad con la guitarra era su esposa, pero ella era muy fácil de impresionar.

- Pues no vivo de felicitaciones, amigo. – Indicó el estuche de la guitarra, un par de peniques brillando solitarios.

Stuart abrió la boca, pero no dijo nada, apresurándose para sacar su billetera y buscar un par de billetes con la imagen de la reina impresa, depositándolos dentro del estuche.

- Stuart Pot, 2D para los amigos. – Murmuró sonriente, Mijaíl alzando una ceja interrogante. – Mi nombre. – Explicó el hombre delgado.

- ¿Quién demonios te preguntó?

- Sólo quería ser amable. – Su estúpida sonrisa hizo que el guitarrista se sintiera incómodo.

- Mijaíl Ivanovich Vasíliev, Misha para los amigos. -Se presentó, deseando que 2D se marchara pronto para poder seguir con su pequeño homenaje a sus bandas favoritas.

- Un gusto, Misha. – Un grito lejano llamó la atención de Stuart, sus ojos clavándose hacia la distante figura femenina que hacía gestos con los brazos. – Ya debo irme, mi novia...tú sabes, ¿Siempre estás aquí?

- Sólo los lunes y los viernes. – Contestó entrecerrando los ojos, mirando a 2D suspicaz.

- Bueno, pues nos volveremos a ver. – Susurró, llevándose las manos a los bolsillos de su chaqueta, caminando hasta alcanzar a la joven de ojos verdes que se agarró firmemente de su brazo derecho apenas llegó a su lado.

Mijaíl no apartó la vista del sujeto que acababa de conocer hasta que fue un punto indistinguible en el paisaje, gruñendo bajo para luego volver a su guitarra y la música.

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Mijaíl Ivanovich Vasíliev había nacido en la honorable Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, en la ciudad de Volgogrado, como el único hijo del matrimonio formado por Iván Sergeévich Vasíliev y Polya Petrova Vasilieva, el 26 de diciembre de 1988. A lo diez años había abandonado su ciudad natal a las orillas del río Volga, para irse a la capital de su nación, Moscú, donde su padre tenía la esperanza de mejorar la situación de su pequeña familia.

El frío y la soledad, además de la férrea educación recibida por sus padres, habían hecho de Mijaíl un niño duro y que evitaba a toda costa mostrar sus emociones, siendo la guitarra la única forma de expresión real que conocía. Su madre se aseguró de que no sólo se dedicará a ese instrumento, sino que conociera de piano, violín, violonchelo y clarinete, exigiendo también excelencia académica, lo cual él cumplió sin rechistar, siendo siempre el primero en su clase.

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