Pov Natalia:
Iker - Siempre igual, siempre vestida como una fulana ¿a quién quieres impresionar?
- A nadie, a la única persona que quiero es a ti.
Iker - ¿Por eso llegas tarde a casa y siempre estás con ese tal Kendall?
- Kendall es mi amigo y compañero de trabajo nada más.
Iker - ¿Por eso te trajo ayer a casa en su coche?
- ¡Estaba lloviendo a cántaros! ¿Cómo querías que viniese?
Iker - Andando, en autobús o con Susan o Bea, pero con él no.
- Bueno me voy a trabajar, que me vienen a buscar a casa.
Iker - ¿Quién? ¿Kendall? - Me cogió del brazo y empezó a apretar, me estaba haciendo daño y no podía soltarme - Como sea ese Kendall no volverás a ir sola a ninguna parte - En ese preciso momento sonó la bocina de un coche. Iker corrió las persianas para ver quién era. Tenía miedo pero sabía que eran Susan y Bea - Venga vete a trabajar, que sino te despedirán, pero que sea la última vez que vas así vestida.
- Te quiero - Salí de casa sin ninguna respuesta. Subí al coche, ya me estaban esperando Susan y Bea.
Susan - Hola ¿qué tal?
- Hola, muy bien.
Bea - ¿Por qué se ha asomado Iker a la ventana?
- Por nada ¿nos vamos a trabajar? - Susan arrancó el coche y nos fuimos a trabajar. Nosotras somos profesoras de adolescentes problemáticos, muchos de ellos es por violencia callejera, pero otros por denuncias de sus padres... Hay de todo pero todos cuando los conoces de verdad son muy amables y saben de que hablan, es decir, cuando hablan de un tema te hacen recapacitar, te hacen pensar. Llegamos al instituto en el que enseñamos, cogimos nuestros portátiles y entramos al aula, como siempre eramos las primeras. Empezamos a preparar las cosas para nuestra clase, que siempre va a parar a otro rumbo al que hemos empezado.
? - Buenos días tías ¿qué os contáis? - Nos giramos las tres a la vez, era Nestor, uno de nuestros alumnos.
Bea - Nestor ¿cuántas veces te tenemos que decir que no nos llames tías? - Nestor lleva con nosotras tres años, empezó a venir después de pegar a su padre, y éste haberle denunciado. Los primeros meses era casi imposible hablar con él, pero es el que con más incógnitas nos deja, el que más razonaba las cosas.
Nestor - Lo que vosotras digáis tías - Después entraron todos los demás, y se sentaron cada uno en su lugar.
Susan - Bueno chicos vamos a hablar de...
Bea - ¿De qué queréis hablar vosotros? Así se os hacen las horas más llevaderas.
Nat - ¿Alguna sugerencia?
Elena - Yo quiero saber si existe el verdadero amor.
