Pov Susana:
Lo que me hicieron Bea y Nat me sonó a encerrona desde el primer momento pero quería ver como acababa todo así que me deje llevar. Las luces estaban apagadas cuando entré en casa, pero entré sin hacer ruido y me dirigía a mi dormitorio cuando el sonido de una canción hizo que me volviera. Vi que la mesa del comedor estaba iluminada con velas y allí de pie estaba Logan, estaba guapísimo vestido con un traje blanco y sostenía una preciosa rosa roja, me volví para subir a mi habitación pero con tristeza me habló para pararme.
Logan - Espera por favor, necesito hablarte un momento.
- No hay nada de que hablar, me voy a la cama.
Logan - Me comporté como un idiota y lo se, prometí que no te abandonaría nunca y a la primera prueba de amor voy y te dejo ir. Soy imbécil lo reconozco, déjame que te lo compense por favor.
- No tengo ganas de discutir, sólo quiero estar tranquila.
Logan - ¿Tienes hambre al menos?
- Un poco la verdad. Me cambio y bajo.
Logan - ¡No te cambies! Así estás preciosa.
- Fue decisión de mis amigas, ellas eligieron el vestido y los zapatos, inclusive Bea me peinó. Creo que se tomaron muchas molestias para que hiciéramos las paces.
Logan - ¿Tu no quieres hacerlas? - Me dijo mirándome muy triste.
- Yo no quiero sufrir, han sido muchas cosas ya en mi vida, creo que me merezco de una vez poder ser feliz - Logan se fue acercando poco a poco a mi y cuando ya lo tenía a escasos centímetros, me dio un beso en la mejilla y extendió su mano y me propuso comernos la cena que había preparado, acompañamos la cena con una botella de vino. Necesitábamos aclarar todo lo sucedido y eso hicimos, yo lo quería con toda el alma y no quería perderle.
Logan - Susan, yo te quiero muchísimo, y esta noche al pensar en perderte me di cuenta de que no puedo estar sin ti, no puedo ni quiero separarme de ti ni un sólo instante.
- Fue un palo, lo reconozco. Sólo espero que no me lo vuelvas a hacer más, necesito confiar en ti al 100% y ahora ¿me puedes dar un beso ya de una vez?
Logan - ¿Me perdonas entonces? - En su cara se dibujó la más linda de las sonrisas y aparecieron aquellos hoyuelos que me encantaban. No esperó respuesta y se acercó a mi dándome el más dulce de los besos que se volvió más ardiente por segundos. Me cogió en brazos y subimos a mi habitación y allí me demostró que sus palabras de amor eran sinceras y sellamos nuestro perdón con todo el amor y la pasión posible, hasta que nos dormimos abrazados. Me despertó a la mañana siguiente con un dulce beso y una bandeja con el desayuno - Llamó Bea, me dijo que ahora nos veríamos en el hospital que por lo visto hay muy buenas noticias sobre Kendall, así que desayuna un poco, vístete y vayámonos.
- Vale, hoy tendremos que ir a clase, no se como se las estará apañando Alexa. Es raro pero tengo ganas de ir, aunque solo falté un par de días.
Logan - Pues te espero abajo, mientras recojo lo de la cena de anoche que al ponernos románticos lo dejamos todo por medio - Me dio un beso en la mejilla y bajó, yo comí algo y me tomé el café y me puse algo de ropa, muy de sport que era como me gustaba vestir y bajé, cogimos el coche y nos fuimos al hospital. Nat ya nos esperaba, muy sonriente la verdad.