Identidad al descubierto

128 6 0
                                    

-Seguramente fueron esos niños, ellos siempre se la pasan jugando en mi despacho– fue lo que comenta el falso Francis.

-¡Niños! –grita enojado el Sr. Poe para que en ese momento comenzarán a llegar los adolescentes y nosotros los niños.

-¿Por qué mataron a esa persona?– comenta mientras de fondo se escuchaban los fuegos artificiales.

-Nosotros no fuimos Sr. Poe él fue quien lo asesino– comenta Klaus apuntando al falso Francis –este señor es un impostor está haciéndose pasar por el verdadero padre de Alexander que está ahí muerto en la silla-.

-Si Sr. Poe debe creernos aunque sea esta vez, este hombre además mato a la madre de Alexander y al hermanastro– comenta Violet mientras ella tomaba de la mano a Alexander dejando sorprendido tanto a Sunny como a Klaus.

-¿Así?– Comenta el Sr. Poe –necesito ver el DNI de Francis García, el original– en ese momento Alexander busca entre las cosas de su padre el DNI encontrándolo en sus bolsillos.

-Aquí tiene señor Poe– él le entrega el DNI de Francis García el cual claramente era original primero comienza a ver las similitudes entre el DNI y el falso Francis, encontrando cero similitudes para luego compararlo con el muerto que estaba en el despacho encontrando todas las similitudes.

-Sr. Usted no es Francis García –comenta sorprendido Sr. Poe –como pude caer tan bajo en casi entregarle a los niños a un asesino como usted– para que en el momento en que el mira al falso Francis este escapará pero no en su totalidad mientras este estaba concentrado en ver similitudes entre el DNI con el cuerpo, Giovanni/Francis/Omar o como ustedes lo quieran llamar aprovecha su tiempo para tomar un galón de gas que estaba en la cocina y esparcirlo por toda la casa.

-¿Huele a gasolina?– Sr. Poe estaba oliendo el ambiente para que los niños se sorprendieran.

-Sr. Poe la mansión va a arder en llamas, debemos salir de inmediato– comenta Klaus en el momento en que empezaba a incendiarse el lugar.

Los que lograron salir fue Sr. Poe, Violet Klaus y Alexander, pero la pequeña Sunny quedo atrapada por un escombros cuando salían del lugar.

-¡Sunny! –gritaba desesperada Violet quien no quería que le pasará nada a su hermana menor.

-Yo iré por ella –comenta Alexander.

-No Alexander es peligroso –comenta Violet tomando su mano.

-¿Quieres que la salve? Porque yo no la dejaré– comenta Alexander comenzando a entrar en la mansión yendo al despacho de su padre.

Estaba rodeada de llamas por el motivo que hizo el acto heroico que hizo su padre, paso las llamas levantar el librero que estaba en el suelo que se estaba incendiando mientras Sunny no podía mover los pies, para que Alexander comenzará a toser, en ese momento toma a Sunny en brazos para protegerla con su chamarra para después salir de la mansión, sin antes quedar Alexander con una pequeña quemadura en la frente.

-¡Sunny! –gritaban los hermanos Baudelaire quien en ese momento estaban llorando pensando en lo peor, en cuanto llegan con ellos sus hermanos se abrazaron ella.

-Gracias por salvarla– Klaus le agradecía el gesto de Alexander mientras este solo tosía.

-No hay ningún problema– fue lo dicho por él mientras tosía –lo volvería a hacer con gusto-.

Violet dejaba de abrazar a su hermana menor y se acerca a Alexander, le da un beso en la mejilla mientras Sunny permanecía en brazos de su hermano Klaus.

-Gracias por salvar a Sunny, sabía que podíamos confiar en ti– comenta Violet quien le da otro beso en la mejilla.

-Siempre pueden confiar en mi vamos antes de que se nos haga tarde debemos tomar el yate de mi padre-.

-¿Sabes conducirlo?– Consulto Klaus de pronto.

-Sí, mi padre me enseño a manejarlo– Alexander largaba una gran felicidad.

-Lamento informarles que tendréis que acompañarme niños, debemos volver a nuestra tierra nos está esperando un destino mientras la justicia ve que hacer con ustedes, recuerden que están prófugos –comenta el Sr. Poe mientras personas pasaban por ese lugar viendo el incendio –Alexander podría venir con nosotros-.

-Me encantaría pero no quiero dejar el yate de mi padre en los Angeles, me gustaría conseguir ayuda de una grúa para que lo pueda levantar y poder llevárnosla a dónde sea de donde ustedes provienen-.

-Venimos de Vancouver– comenta Klaus de pronto.

De pronto las sirenas de los bomberos venían acercándose para que el Sr. Poe los llevara al muelle dónde estaba el amigo de Francis.

-Alexander que sorpresa verte por aquí, ¿qué sucedió? acabo de enterarme que se incendió la mansión– se sorprende al no ver a su amigo Francis.

-Mi padre murió por alguien que venía disfrazado– comenta el chico con tristeza pero tratando de ser fuerte.

-Si lamento oír eso, aunque debo admitir mi culpa Alexander– el hombre se mostraba con tristeza también.

-¿A qué te refieres?– la voz de Alexander era de incertidumbre.

-Ese hombre me amenazo con matarme, si no le daba la dirección en donde se quedaban ustedes, lo lamento Alexander, no quería que me matase, tengo una familia y un hijo –comenta el hombre.

-No te preocupes– comenta Alexander para que en ese momento el Sr. Poe comenzará a dar marcha atrás con el auto acercándose al muelle -Necesito que me pueda ayudar con el yate para poder llevármelo a Vancouver–comenta Alexander –esa persona que viene retrocediendo es la persona que nos llevará hasta allá, tengo entendido que mi padre antes vivía allá –comenta Alexander.

-Si debes tener cuidado, los lingotes de oro de tu padre están en la corporación Fraudusuaria –le comenta el hombre quien comenzaba a caminar a la grúa que estaba en el mar para ayudar a poner el yate en una especie de esos remolques grandes para que se lo pudieran llevar.

-Está todo listo– comenta el hombre quien bajaba de la grúa después de medía hora de estar sacando el yate y colocándolo sobre el remolque.

-Muchas gracias– comenta con una sonrisa Alexander, luego se mete en el auto para que el Sr. Poe comenzará a manejar camino a Vancouver.

Tiempo después aparecía Omar en el muelle para amenazar nuevamente al hombre.

-Dime donde se ha ido- comenta colocando su cuchillo en el cuello del señor.

-No se lo voy a decir esta vez ellos están lejos de aquí– comenta aquel hombre.

-Si no me dices dónde se han ido iré a por tu mujer y tu hijo –comenta amenazante el Conde Omar.

-Vancouver- comenta con mucho miedo el hombre mientras estaba solo en ese momento en el muelle todos los que estaban allí ya se habían ido.

-Muy bien amigo– comenta para darle pequeñas cachetadas en la mejilla al hombre -aunque debo darte una mala noticia-.

-¿Qué? –comenta sorprendido el hombre para que el Conde Omar se le acercará al oído.

-Lamento decirte que los he matado y tu eres el siguiente– comenta para luego apuñalarlo varias veces en el tórax para luego tirarlo al mar.

-Inútil –comenta Omar para luego limpiar su cuchillo para luego retirarse del lugar sin dejar rastro alguno de la presencia de ese hombre –Os voy a encontrar y me quedaré con su fortuna, esos lingotes de oro y me aseguraré también de encontrar a los trillizos Quagmire para quedarme con sus zafiros– comenta este hombre para luego comenzar a reírse maléficamente mientras se retiraba del lugar. 

Mas eventos desafortunadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora