La calma llega a su fin

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¿Que más se podría añadir a esta historia? Sinceramente la calma en la mansión del Sr. Anderson estaba por llegar a su fin porque sus enemigos estaban por volver en unas horas, ese día Alexander y Violet se despertaron en la habitación que estaba al frente de la cual estaban Klaus, Sunny compartida conmigo. Ellos nuevamente estaban desnudos tapados en la cama, se durmieron besándose y se despertaron de la misma forma, a lo que me refiero a esto es que ellos cuando se despertaron no dudaron en besarse pero el beso no fue apasionado, no querían que Klaus, Sunny o incluso yo pudiera escuchar sus gemidos.

-Te amo –Alexander le decía a Violet entre besos mientras ambos sonreían por cada beso que se daban.

-Y yo a ti amor –comentaba ella también entre besos.

-Amor mejor vistámonos antes de que nuevamente nos vean –comenta Alexander.

-Amor tranquilízate ya todos saben de esto, no hay porque alarmarse –Violet lo besaba para colocarse encima de él.

-no creo que sea el momento tus hermanos podrían despertar en cualquier momento– Violet asentía ante lo dicho por su novio y se quitaba de encima –se que lo quieres amor pero a estas hora va a ser imposible, es hora de desayuno-.

-Lo sé amor– le da un beso en los labios nuevamente para luego bajarse de la cama –vamos amor vistámonos– le daba una sonrisa mientras esta se colocaba su ropa interior.

-Me encanta verte así– Alexander se levanta para ponerse también su ropa interior.

-¿Así como?– daba una pequeña risita Violet cuando se colocaba su pantalón.

-se que sonará estúpido, pero me gusta verte así desnuda– comenta el chico haciendo sonrojar a su novia.

-Hay amor lo entiendo me amas mucho que te gusto así, me pasa exactamente lo mismo contigo– de pronto la puerta de la habitación de sus hermanos se abría –apúrate en vestirte amor –comenta cuando este se estaba colocando la camiseta.

Pronto el golpeteo a la puerta se escucha y Alexander ya se colocaba el pantalón.

-Apúrense que tenemos que ir a desayunar- era la voz de Klaus que se escuchaba por fuera para luego escuchar que este bajaba las escaleras.

-Espérame en las escaleras amor me pongo algo mas y llego contigo– ante estas palabras de su novio ella asiente para salir de la habitación y quedarse parada en las escaleras.

Alexander se acuesta en el suelo para luego buscar la caja del anillo de compromiso que le había dado su padrino, este al tocarlo lo saca debajo de la cama para luego pararse y colocarlo en el bolsillo izquierdo de sus pantalones mientras que en el otro tenía el catalejo de la V.F.D. y toma el condón que estaba sobre la mesa de noche.

Alexander sale de la habitación y se reúne con su novia, este le da una gran sonrisa para que luego ambos entrelazaran sus manos para bajar al comedor dónde los estaban esperando.

-al fin bajan pensé que se quedarían en su trabajo aquello– comenta el Sr. Anderson en el momento en que Alexander botaba el condón en la basura.

-Por dios padrino, ni que fuéramos conejos– fue lo que comenta Alexander mientras su padrino, Klaus y Sunny comenzaran a reír por aquel comentario dejando a Violet sonrojada por ese comentario.

El momento del desayuno les sirvió mucho hasta que el Sr. Anderson recordaba algo en su mente.

-hermanos Baudelaire me gustaría que en la tarde ustedes vayan de compras, Alexander se quedará conmigo a hacer algunos arreglos en la mansión– ante esto los hermanos Baudelaire asentían.

Para no aburrirlos tanto es preferible avanzar el tiempo hasta que los hermanos Baudelaire se tenían que ir, yo iba en brazos de Klaus mientras que Sunny iba de la mano con sus hermanos mayores.

-Padrino que arreglos haremos en la mansión– Alexander no entendía lo que quería su padrino.

-Quiero que me ayudes a correr el sillón reclinable para meter un sofá que está por llegar, está por encargo a mi nombre, así ustedes me hacen compañía en la sala de estar-.

-Me parece bien –comenta Alexander sintiendo el timbre de la mansión.

-Deben ser ellos los que vienen a dejar el sofá, acompáñame ahijado– Alexander asiente y ambos se dirigen a la puerta de la mansión, pero en cuanto su padrino abre la puerta de la mansión se da cuenta que todo era un engaño.

-¡Omar!– exclaman tanto Alexander como su padrino ante la presencia de aquel hombre completamente enojado mientras a su lado estaban sus secuaces.

-Ellos sabían que era mentira y yo no lo note porque te consideraba aún como un amigo Anderson pero caí en una cruel mentira– comentaba Omar cruzado de brazos –agarra a Alexander– comenta el villano al hombre con verruga en el rostro para que este claramente tomará a Alexander en el momento en que estaba intentando escapar.

- ¡Padrino!– grita el adolescente tratando de zafarse de las garras de aquel hombre con verruga en el rostro.

-¡Ahijado!– grita el padrino en el momento en que Omar colocaba un galón de gas que tenía a su lado enfrente del Sr. Anderson.

-¿Qué estás haciendo Omar?– comenta el Sr. Anderson con mucho terror viendo el galón de gas enfrente suyo.

-Tomo venganza, de todo el bullying que he recibido por parte tuya y no solo eso sino que también por haberme mentido todo este tiempo pensé que eras mi amigo y me dirías la verdad– Omar le daba un golpe en la nariz al señor Anderson para que este caiga al suelo.

-¡Padrino!– grita Alexander tratando de quitarse de encima al hombre con verruga en el rostro pero no era capaz ya que este hombre era fuerte.

En ese momento estaban regresando los hermanos Baudelaire y yo, en ese momento escucharon el grito de Alexander para que ambos corrieran para llegar a estar a unos metros de la mansión para darse cuenta que estaba el conde Omar enfrente de la mansión mientras veían como el hombre con verruga en el rostro sostenía a Alexander para que no escaparan.

-Oh niños Baudelaire– comenta Omar al darse cuenta de su presencia de nosotros –llegan justo a tiempo– en ese instante su grupo se alejaba de la entrada de la mansión, al igual que nosotros cuando los hermanos Baudelaire vieron el galón de gas que estaba en la entrada.

Omar quita la pistola que tenía guardado, para apuntarle al galón de gas, este jala del gatillo para que una bala saliera dirigida al galón de gas pero esta bala le llega al Sr. Anderson en la pierna.

-¡Ah!– grita de dolor el Sr. Anderson cuando recibe la bala en su pierna.

-¡Ups! mi error– comenta para que esta vez jalara dos veces la pistola para que ambas balas lleguen al galón de gas, el gas comenzaba a salir del galón, este hombre cruel saca un palo de fósforo de la caja para encenderlo y tirarlo al galón de gas, en ese instante los hermanos Baudelaire retroceden un poco para luego tirarse al suelo cubriéndonos a Sunny y a mí.

-¡Padrino!– fue lo último que logramos escuchar en el momento en que estaba llegando la explosión.

El grupo de villanos se esconde detrás del auto al igual que Alexander quien estaba en manos del hombre con verruga en el rostro.

El galón de gas explota al igual que la mansión dejando la mansión en llamas, en cuanto los hermanos Baudelaire levantan la cabeza otra explosión del mismo galón ocurrió haciendo que volviesen a cubrirnos a nosotros.

Finalmente la explosión ceso, en ese momento nuestros oídos estaban teniendo esos pitidos cuando estamos cerca de una explosión.

Comenzamos a ver como Alexander era llevado hasta una especie de submarino idéntico al Carmelita que también era dado por el hombre con barba pero sin pelo y la mujer con pelo pero sin barba. Corrimos hasta tratar de llegar a Alexander pero no podíamos porque en ese momento ya se había sumergido en submarino.

-¡Amor! –gritaba Violet quien colocaba sus rodillas en el suelo mientras comenzaba a llorar desconsoladamente. 

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