Salvados por Albert Poe

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-¿Entonces debemos buscar al hombre con barba pero sin pelo y a la mujer con pelo pero sin barba? O ¿Debemos llamar al Sr. Poe para que nos lleve a nuestro verdadero tutor? –comente esta vez mirando por la ventana mientras caía la noche.

-diría que fuéramos con el Sr. Poe mañana por la mañana por la mañana a que nos lleve con nuestro verdadero tutor –comenta Kyle quien se acercaba a la ventana en el momento en que llegaban dos autos.

El primer auto en llegar era el de Sr. Poe, en cuanto llega este sale del auto para ver que el auto de Carmelita llegaba a la casa.

-Hola Sr. Poe ¿Qué le trae por acá nuevamente? –comenta la mujer quien rápidamente saludaba tratando de saludarlo de mano.

-¿Qué demonios estás haciendo aquí Carmelita? –comenta el Sr. Poe cruzándose de brazos.

-Esta es mi casa –comenta Carmelita señalando la casa color rosada para que él Sr. Poe se quedará sorprendido.

-Pensé que era usted soltero Sr. Winchester –comenta Albert quien se cruzaba de brazos en el momento en que Joe llegaba junto a él –

-Olvide mencionarlo, lo lamento, viene a por lo de la tutoría general de los niños.

-Sí pero ahora que acabo de volver a ver a una de las cómplices de asesinato de mí padre sería mejor que me llevará a los niños -

Lo dicho por el Sr. Poe era escuchado por nosotros debido a que teníamos la ventana del dormitorio abierta, nos vimos uno con los otros para que alargáramos una gran sonrisa.

-No diga cosas apresuradas Sr. Poe, esos niños deben quedarse con nosotros –comenta Joe Winchester a Sr. Poe amenazándolo.

-Estoy seguro que no es así, llame a los niños para que se vengan conmigo –comenta tajantemente Albert para que Carmelita lo mirara de una forma amenazadora.

-No queremos que termines como tu padre, con un arpón todo el pecho, así que deje a los niños aquí mismo –comenta amenazando Carmelita.

-Lo lamento pero no dejaré a estos niños con una asesina –comenta Sr. Poe quien comenzaba a dirigirse a la entrada de la casa.

Todos nosotros rápidamente salimos de la habitación para ir en dirección a la puerta de entrada de la casa.

-Deténgase Sr. Poe –comenta Carmelita quien apuntaba su pistola que tenía.

Justo en ese momento llegamos a la puerta para abrirlo, vemos al Sr. Poe que tenía las manos levantada mientras Carmelita apuntaba su pistola con silenciador al Sr. Poe.

-Deje a los niños aquí y no vuelva nunca más a esta casa –comenta Carmelita colocando sus dedos en el gatillo.

-No lo haré, estos niños se vienen conmigo y punto, vamos niños al auto –comenta Albert Poe quien se giraba para ver a Carmelita.

-No voy a dudar en usar mi pistola en usted o alguno de esos niños para que vean que con los Winchester nadie se mete –comenta Carmelita.

-Cariño baja esa pistola –comenta su marido quien se acercaba a Carmelita colocando sus manos en la pistola.

-No lo haré, si tengo que matar a alguien será el Sr. Poe o alguno de esos niños –comenta Carmelita alterada tratando de quitar la mano de Joe de la pistola.

Nosotros estábamos muy nerviosos ante esta escena nosotros corrimos al auto del Sr. Poe para escondernos en el interior.

-Cariño debes entender que esta no es la manera de arreglar las cosas, no con pistola en mano, por favor baja la pistola –comenta este hombre mientras Sr. Poe se acercaba a su auto.

Carmelita miraba con rabia a Joe mientras el Sr. Poe entraba silenciosamente en el auto para encenderlo.

-Maldita sea –exclama Carmelita para apuntar su pistola y disparar varias veces en el momento en que el auto del Sr. Poe comenzaba a alejarse del lugar 

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