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A pesar de los días que han pasado, me he decidido seguir yendo al palacio rubí, Lily me dijo que no debería seguir haciéndolo, podría tener problemas peores que los de ese día, pero no me importa, son mis decisiones.

Mi cumpleaños está a un día, como sé que Claude no va a venir, decidí realizar una cena con Anthy y repartir comida entre los empleados de mi palacio, los de Anthy no se lo merecen por estar robando constantemente.

—¿está segura de esto?—Rania termina de atar mi cabello en una coleta alta

—si, por favor no le digas a nadie

Me observo en el espejo, un vestido similar al de las plebeyas, un poco de magia para cambiar el color de mis ojos gracias a mi madre y ¡wuala! Un disfraz perfecto para escapar del palacio hacia la ciudadela, así podré conseguir algo que escuche de los rumores de las sirvientas del palacio Rubí, se trata del collar de la noche.

Se dice que es un collar que utilizo una emperatriz muy reconocida y amada, la llamaban la "descendiente de Dios", algo que complementaba la leyenda, es que aquella que portará ese collar, sería una digna emperatriz, un collar con un cielo nocturno en su gema, nada más digno para la protagonista de esta historia.

¿Qué porque se lo quiero conseguir? Fácil, para quienes lo vean, sabrán que ella será una digna emperatriz.

—yo debería acompañarle—me pide casi a ruego

—no, tu sabes el papel que debes cumplir

—si, entretener a los guardias de adentro y decirles a todos que duermes, además estar al pendiente de ti para la salida.

—exacto

Rania deja salir un pesado suspiro

—no sabía que te volverías una aventurera—me dice—y que la señorita Charlotte aceptaría tal locura

—es lo necesario para la supervivencia

No mentía, si quiero sobrevivir, debo hacer lo necesario, incluso si aún no he hecho más que un pequeño avance en la creación de productos, recuerdo como Lilian se sorprendió cuando supo aquello. Mi propósito es mi supervivencia hasta que Anthy cumpla 14, así podré irme con dignidad

—Alma está lista—me digo a mi misma mientras me pongo una capa y logro salir del palacio Granate con ayuda de Rania, no fue tan difícil dado que no está protegido

Caminamos hasta uno de los muros y me escondo tras un árbol esperando a que Rania traiga una escalera. Minutos después llega con ella, una larga de madera, la apoya en el muro y empiezo a escalarla, menos mal que pedí esta ropa y unos zapatos bajos sin tacon.

—tenga cuidado señorita—no la miro pero escucho la preocupación en su voz, no quiero mirarla ya que me daría miedo por la altura

Llego por fin a la punta y con temor a caerme me siento en él.

—muy bien...—trago saliva nerviosa y con un brazo aferrado a la pared y la otra en la escalera, la jalo con lentitud para pasarla al otro lado.

Es algo pesada, pero con mi fuerza de niña puedo hacer algo mínimo.

—disculpe, ¿qué esta haciendo?

"¿Qué? ¿Cómo? ¿Quién?"

Por el susto dejo caer la escalera al lado donde se suponía que debería bajar.

"Damn it."

—¡su alteza!—escucho la voz de Rania

"Mierda, mierda, mierda. No mires abajo, no mires abajo, ¡no mires abajo!"

¿Princesa Encantadora? ¡Ni siquiera La Terminé!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora