Marvel's Spider-Man

Amenaza

Domingo, 8:00 A.M

Gwen Stacy se encontraba abrazando al joven castaño, después de tener una noche espectacular; cayeron rendidos, en especial la rubia, Peter gracias a sus poderes, pudo resistir bien.

El castaño ya no aguantaba la luz del sol, abrió sus ojos para después levantarse con lentitud mientras se rascaba ambos ojos.

Peter: Díos...— mira a la rubia, después mira el reloj— Gwen, Gwen..— la empezó a mover.

La chica se empezó a quejar.

Gwen: ¿Qué...— pregunta aún semidormida.

Peter: Tía May ya vendrá, tienes que irte. O si no nos va a descubrir— la rubia abre sus ojos para después estirarse.

Gwen: Cinco minutos más.

Peter: Que cinco minutos más...es hora de que te levantes, antes de que May nos venga a descubrir.

Gwen: No...importa.

Peter: Entonces le diré que me violaste, así te correrá y no tendrás más oportunidad de jugar conmigo.

Gwen: Bien...— resignada se quita la sábana para luego levantarse de la cama— ¿Entraras al baño?

Peter: Iba a hacerlo, pero anda tu primero— la chica lo queda viendo por unos segundos— Sería riesgoso si vamos juntos.

Gwen: May dijo que regresaría a las nueve— Peter agacha la mirada y sonríe.

Peter: Que sea rápido.

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La puerta de la casa de abre, así dejando ver a May Parker. Ella entra y vuelve a cerrar la puerta, camina hacia el sillón y se tira ahí para luego soltar un suspiro.

May: Niños!— si..."niños"

Ella no recibió respuesta alguna, empieza a ver por todos lados.

May: ¿Peter? ¿Gwen?— se levanta en eso escucha que algo se cae en la cocina.

La tía May caminó hacia la cocina, esta se asoma y logra ver a ambos jóvenes sentados en las sillas desayunando.

Peter: Oh...hola tía May, ¿Cómo te fue en el trabajo?— de forma disimulada se lame los labios.

May: Bien. Y ustedes cómo se comportaron, no anduvieron haciendo travesuras— Gwen se sonrojó, pero como estaba de espaldas. Pues May no lo notó.

Peter: No tía May...como crees. Casi todo el día pasé en la calle, en la noche llegué a dormir— casi se ríe pero se logró aguantar.

May: Está bien.....— camina hacia el refri— ¿Y tú Gwen? ¿No te aburriste estando acá sola?

Gwen: Amm...no...me mantuve ocupada con las tareas del fin de semana— come un poco del cereal que tenía, Peter la mira y le guiña el ojo.

May: Que bien, por un momento tuve desconfianza dejar a dos jóvenes con hormonas descontroladas— empieza a tomar su vaso de agua.

Peter: ¿Tú me crees capaz de hacer eso?— la señora lo mira con una ceja alzada.

May: Si...estás solo con una chica, era un casi probable— Peter se queda callado, luego mira a Gwen quien tenía un sonrojo en sus mejillas.

Gwen: Pues no va en este caso.

May: Gracias a Dios. Oye Gwen, pásame ese vaso que está allá— apunta un vaso amarillo que estaba a lado de la caja de cereal.

Peter abrió los ojos y miró a Gwen, el ojiverde se levantó rápidamente y agarró el vaso para después dárselo a su tía.