Dragon Ball: Caminos cruzados

T2. Capítulo 12

Vegeta vuela libremente por el cielo, sintiéndose bastante cómodo con la situación actual.

- Los poderes que estoy percibiendo deben pertenecer a namekianos, son como veinte, deben ser una aldea con una esfera del dragón - Dice con una sonrisa mientras se envuelve por energía blanca y vuela a una mayor velocidad - ¡Del lado de Freezer ya no tienen ningún rastreador, tengo la ventaja! - Exclama alegremente - Jujuju, como lo supuse, aquí hay una aldea - Menciona al ver un conjunto de casas a nivel del piso.

Desciende para posicionarse en el centro de todos los namekianos, con la intención de llamar su atención.

- ¡Un extraño! - Exclama un namekiano.

- Si todos ustedes están vivos significa que Freezer aún no ha venido ¿Verdad? - Pregunta, sorprendiendo a todos.

- Ah, habla - Dice un namekiano.

- Seré breve, quiero su esfera del dragón. No pienso decirles mi deseo ni mis motivos. Hay alguien más poderoso que yo viniendo, seguramente destruirá esta aldea si la encuentra, él no pregunta dos veces ¿Me darán la esfera? - Le pregunta Vegeta al grupo.

- Yo soy el jefe. No te entregaremos la esfera del dragón, se puede ver tu maldad desde lejos - Le dice el jefe, un namekiano anciano y robusto.

- ... - Vegeta cierra los ojos con ira - Tengo la bendición del jefe Muura - Dice.

- ¡! - Todos se sorprenden.

- Naissas, trae la esfera del dragón - Dice el jefe.

- P...Pero señor, no... -

- Solo hazlo, en serio - Lo interrumpe el anciano.

- ... - El namekiano identificado como Naissas mira a su jefe en silencio - Entendido - Dice tras un largo silencio.

Ingresa a una de las casas y toma una esfera del dragón.

Se la ofrece a Vegeta.

< Se parece mucho al namekiano de la Tierra, incluso más que los otros > Piensa el saiyajin tomando la esfera del dragón - ¿Saben? El trato que hice tenía la condición de que no extermine aldeas, pero no decía nada sobre causar una o dos bajas - Dice sonriendo.

- Sabes que no te convendría, nuestra presencia podría serte de ayuda tarde o temprano - Le dice el jefe de la aldea.

- ¿Qué te hace creer eso? - Le pregunta Vegeta.

- Las sombras de duda en tu corazón. Sabes que asesinarnos sería hacerle el juego fácil a aquel al que quieres destruir - Le responde el anciano.

- ¿Cómo... -

- He sido un sabio ermitaño mucho tiempo antes de ser jefe de una aldea. He aprendido a leer mentes - Lo interrumpe el jefe de la aldea.

- ... - Vegeta se enoja por eso, entonces apunta al jefe con una mano.

- Ey, no lo ataques - Le dice el namekiano Naissas con un gesto amenazador.

- Je, interesante. Tal vez vuelva algún día para ver si sigues teniendo el valor de hablarme de la misma manera. Incluso podría contratarlos para mi propio ejército personal - Dice Vegeta con una sonrisa.

- ¡Todos, evacuemos la aldea, llévense las semillas y sus posesiones de valor, nos ocultaremos en la ciudad subterránea de emergencia! - Exclama el jefe de la aldea dirigiéndose al resto.

- Jujuju ¿No temes que yo sepa a dónde irán? - Le pregunta Vegeta.

- Sé que podrías encontrarnos de todos modos - Le responde el namekiano anciano.