Las velas iluminaban su cuarto, alejando la oscuridad del cuarto anterior, que sin dudas no quería volver a pisar jamas.
Perú se volvió a quedar dormida en la cama de Imperio Español, chupándose el dedito mientras se tomaba la rodilla.
Yo no podía dormir, e Imperio Español tampoco.
Él estaba sentado en su silla como si fuera un trono, un puro en una mano y una copa de vino en la otra.
Yo me senté en el suelo, mi espalda pegada a la cama con las rodillas en mi pecho, viendo como tomaba los sorbos lentamente viéndome.- Gracias... por... salvarme - hable finalmente después de un rato de procesar lo que había pasado.
No me respondió, sólo me miro fijamente, como si fuera capaz de leer su mente.
- Tenemos, mucho, en común - tartamudee.
- No tenemos nada en común - le dio un toque a su puro, exhalando el humo por la nariz como un toro furioso - No intentes buscar humanidad en mi, no la hay.
- Pero lloraste por Portugal.
- ¿Y no puedo hacerlo? - gruño.
- No no... solo digo que... - suspiré cansado - Nada... olvídalo no tengo ganas de discutir contigo.
- Suficiente has tenido esta noche - se levantó de su silla, dándome la copa medio llena de vino - Bebe esto, te relajará un poco los nervios.
Me tome el vino de golpe, el sabor no era tan Bueno como esperaba pero cumplía su trabajo, si me sentía más tranquilo.
Después de tragar el vino, mire hacia arriba a Imperio que me observaba cautelosamente, como un depredador.
- Sabes no me agrada mucho como me ves - me levante sintiéndome un poco tambaleante.
- Será por que soy la primera persona que te reta, que desafía tu autoridad como Niño de oro de España - me puso una mano en el hombro sentándome en la cama - Yo se quien soy, y tu solo eres un chico hijo de mami.
Me levante de golpe furioso lanzándole una mirada de que iba a matarlo
- No hables de mi madre no te consta - gruñí.
- Estás borracho... no te pongas de nefasto - me volvió a sentar.
- Tu eres el nefasto - tartamudee - Actúas como si nadie te importara y los alejas de tu vida, y cuando ya no los tienes lloras por ellos.
Levantó ambas cejas sorprendido, pero su rostro no decía lo mismo.
- Ademas niegas que España es tu hijo... ¿pero yo soy tu Nieto? - solté un bufido burlón - Explícame la lógica de eso.
- Quizás si tenemos algo en común - junto las cejas - Tu prepotencia.
- El único prepotente eres tú por como trataste a Portugal.
- YO AMABA A ESA MUJER - me gritó golpeando la cama mientras se acercaba a mi amenazante, haciendo que salte - YO LA AMABA MAS DE LO QUE TÚ PUEDES COMPRENDER CHAVAL.
Puso una mano en su rostro cubriéndola, sólo vi una lagrimita caer pero se la quito tan rápido que no pude reaccionar.
- Ella fue la primera persona que me ablando el corazón... pero no podía asegurarle un futuro a mi lado - se apartó de mi - Todas mis promesas hacia ella eran vacías, no era capaz de cumplir ninguna por que ya sabía mi destino.
- Si tanto la amabas... ¿por que no adoptaste al hijo como ella te dijo? - me levante lentamente.
- Por que... por qué no me queda mucho tiempo en esta tierra - se acercó a la botella sirviéndose más vino en su copa.
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Representantes
AdventureDespués de todo lo sucedido en los primeros tres libros, este tomará lugar en diferentes momentos y lugares, contando las historias de los países desde su punto de vista.