Noruega {1}

4.5K 567 1K
                                    


Parte 1

El castillo estaba impecable, tal y como lo dejé cuando me expulsaron de mis tierras. Isla y Fin corrieron a sus respectivos cuartos emocionadas de regresar a casa.

- Ire a desempacar mis maletas - Dina suspiro desanimada.

- ¿Te encuentras bien? - la tome del hombro.

- Si tranquilo solo... necesito un momento a solas - se apartó lentamente, subiendo las escaleras a su habitación.

Maldito Inglaterra, me las pagará por romperle el corazón a mi hermana.

Suspire, pasándome la mano por la cabeza.
Suecia se dio unas vacaciones con Alemania, no sin antes yo amenazarlo de muerte, la quería completa, sana y salva para cuando ella esté de regreso.

Ahora resulta que hasta los más buenos como Inglaterra pueden destrozar a mis hermanas, eso no volvería a pasarme.

- Hola guapo - una voz cerca de mi oreja me hizo pegar un grito al aire, saltando hacia adelante.

FBI me miro con una sonrisa pícara, moviendo sus caderas de lado a lado mientras se inclinaba hacia adelante y atrás.

- ¿COMO- COMO ENTRASTE? - tartamudee.

- Por la ventana, deberías ponerle candados - me guiño el ojo - Estar de regreso en tu territorio te hace ver mucho mejor, se nota que tus tierras te dan vida.

- Okay tenemos que establecer algunas reglas - pinte mi línea - Nunca te acerques por detrás ¿okay?, existen puertas, ÚSALAS y avísame que vas a venir.

- Pero es más divertido a mi manera - me hizo una mueca sarcástica, acercándose pasó a paso lentamente hacia mi - Me encanta cuando saltas.

- Tampoco te acerques así, es inapropiado y mis hermanas viven conmigo, no quiero que hagas nada extraño alrededor de ellas - puse mis manos enfrente mío para que me de espacio.

- Oh créeme, seré sumamente cuidadoso alrededor de ellas, no me gustaría traumarlas de ninguna forma, las damitas estarán protegidas conmigo - me tomo las manos colocándolas en su pecho - Al igual que tú, te cuidare bien.

- TE DIJE QUE NADA DE COSAS RARAS - chillé sintiendo mi cara caliente.

Me soltó sonriendo victorioso, alejándose hacia la parte norte.

¿Por que contrate a este payaso?.

Fue la peor idea de todas las que he tenido.

Los siguientes días fueron una locura total, todavía no me acostumbrara a doblar la esquina de mi castillo y ver a FBI y sus.. musculosos... brazos.

- Oye Noru ¿me pasas una servilleta? - Isla me pidió sin despegar los ojos del celular.

Mire por todos lados buscando las servilletas, hasta que el brazo de FBI se asomó por abajo del mantel sosteniendo un puñado de servilletas.

- ¿Que diablos? - susurre tomando las servilletas y pasmándoselas.

Mire por debajo del mantel, topando nariz con nariz con el soldado.

- ¿Enserio? - gruñí enojado - Estás muy cerca de mi área privada, ten cuidado con lo qué haces.

- Tampoco soy un animal - me pellizcó la nariz.

- ¿Estás hablando con FBI? - Dina me interrumpió.

- Si, ¿Como lo sabes? - levante la cabeza acomodándome el cabello de regreso a mi sitio.

- Por que aquí esta CIA - levantó la mano de CIA mientras ella la sacudía saludando.

- No sabía que teníamos dos intrusos aquí - Fin susurro sin apartar la vista de su tablet.

Representantes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora