Contemple con detenimiento como había quedado la cuna que Evan había hecho y la cual yo me había encargado de pintar, sonreí y aplaudí un par de veces, él me miró y sonrió por algunos segundos, amaba su sonrisa estaba segura que nunca iba a dejar de amarla, estaba segura que me iba a encantar la sonrisa de un Evan de cincuenta años, de ochenta, siempre me iba a encantar su sonrisa, la sonrisa de Evan era oficialmente la sonrisa más hermosa y la que más amaba en el mundo.
Sonreí, él me miró un poco extrañado, llevó el pulgar hacia su boca mientras observaba la cuna.
―Es linda, me gusta. ―Comentó. ―Ves cariño, ya he construido una cuna para que sueñes cuando llegues aquí. ―Dijo y acarició mi vientre por algunos segundos. ―Tal vez no vaya a ser el mejor padre del mundo, pero te amaré y protegeré hasta el último día de mi vida, haré todo lo posible para que tú nunca te sientas solo, vas a tener un hermano, se llama Jacob y... ―Lamió su labio mientras me miraba.
Acarició mi mejillas por algunos segundos y dio un tierno besó en mi frente.
―Te amo, cariño y también haré todo lo posible para protegerte y que nunca más te vuelvas a sentir sola, quiero que sepas que me tienes a mí para todo lo que necesites, tal vez no sea de gran ayuda, pero para algo te he de servir ¿no crees?
―Te necesito y me sirves para absolutamente todo.
―Yo también te necesito en mi vida para absolutamente todo, eres mi alma, cariño, ¿está bonita verdad? ¿Quieres ir conmigo al cine? ―Cuestionó.
―Es muy hermosa, ¿hay alguna otra cosa que sepas hacer y que no me haya contado? ―Cuestioné.
―No lo sé, puedes quedarte conmigo toda la vida e irlo descubriendo, ¿no te interesa saber todas las cosas que puedo llegar a hacer?
―Tengo demasiada curiosidad por saberlo.
―Y yo encantado de mostrártelo, ¿si quieres ir al cine conmigo? ―Dijo mientras acariciaba mis manos.
― ¿es una cita? ―Pregunté.
― ¿nunca hemos tenido una cita? que pésimo novio soy, soy el peor novio del mundo, ¿no es así? ¿Cómo es que te vas a casar con un tipo que ni siquiera te ha regalado una cita? ―Dijo y sonrió de manera coqueta. ― ¿Cómo es que amas a un tipo con el que nunca tuviste una cita?
―Lo amo porque ese tipo es jodidamente encantador, eres demasiado encantador, cariño. ―Susurré mientras acariciaba sus mejillas.
― ¡oh mierda! ¿Por qué haces eso?
―Porque me gusta, ¿Por qué me pellizcas las nalgas? ―Cuestioné.
―Porque me gusta. ―Respondió. ―Porque me encanta, me encanta tu precioso culo, tengo deseos de construirle un altar y adorarlo toda mi maldita vida.
― ¿de dónde sacas tanta imaginación?
―Ni puta idea, pero, ¿acaso no te gusta la idea de que le construya un altar a tu precioso culo?
―Pero, ¿Cuál culo? ―Cuestioné y reí. ― ¿Por qué te gusta?
―Porque es jodidamente maravilloso.
―Dejemos de hablar de mi culo, ¿quieres? ¿Qué película vamos a ir a ver?
―It.
― ¿iremos a mirar eso?
―Miraras eso y si quieres también la película. ―Dijo y sonrió. ―Te advierto una cosa Eileen, no quiero distracciones, nada de que comiences a acariciarme las piernas porque realmente si quiero ir a mirar la película, así que no me vayas a provocar para que caiga en tentación. ―Puso un gesto inocente.
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ABISMO
Randomy me subía al cielo, sólo para dejarme caer al abismo. ABISMO: 16 Primer actualización: 18/03/2020