Desperté, me puse de pie y de manera rápida camine hacia el baño después de mirar la hora, si no me daba más prisa iba a terminar por llegar tarde otra vez, entre a la bañera mientras miraba hacia la puerta esperando a que Evan entrara, terminé de bañarme y él no apareció. Sólo escuche su música a todo volumen, tomé mi ropa y seque mi cabello, aplique un poco de brillo en mi labios y salí hacia la cocina. Sonreí cuando miré a Evan, sonreí cuando miré los platillos que había colocado en la mesa y me acerque a él para abrazarlo. '
―Buenos días Lucifer. ―Dijo y dio un tierno beso en mi mejilla.
―Bueno días Evan, ¿me das un beso?
―Ya te di un beso.
―Pero en la boca.
― ¿Quién soy yo para negarte un beso? yo estoy aquí para darte todos los besos que quieras, te preparé un nutritivo desayuno, dáselo a mi hijo, te amo, come.
― ¿Por qué no me acompañas?
―Todavía no tengo hambre. ―Dijo y al mismo tiempo apago su música.
― ¿puedo preguntar algo?
― ¿Qué?
― ¿no has sabido nada de mi hermano? lo busque antes de venirme, quería despedirme de él, pero no lo encontré, le he marcado y no me ha respondido, ¿no sabes de casualidad algo de él?
―A tu hermano si sigue con esa mierda,...
― ¿Qué?
―Nada. ―Respondió. ―intentaré preguntar por él, ahora come, te preparé hot cakes, mira me quedaron bien bonitos, ni siquiera se quemaron, ves cariño, ya puedes casarte conmigo, seré un buen esposo.
―Serás un buen esposo. ―Afirmé mientras cortaba un pedazo de pan.
Evan se sentó al lado de mí, comenzó a besar mi cuello mientras ocultaba su mano debajo de mi blusa.
―Tengo hambre, ¿te gustaría ser mi desayuno Eileen? ―Dijo y su mano bajo hacia mi pantalón.
Lamí mis labios mientras sentía como iba introduciéndose más y más y más, apoye mis manos en la mesa.
― ¿quieres que me detenga?
―No te detengas, quiero ser tu desayuno.
Quede hecha un verdadero desastre, Evan era fanático de untar cualquier cosa en mi cuerpo, retiré un poco de la miel de maple que había entre mis piernas y la lleve a mi boca.
―Ya ve a bañarte. ―Dijo y lamió sus labios.
―No. ―Dije mientras tomaba el frasco de Nutella y me colocaba de rodillas.
― ¿Qué mierda vas a hacer?
―Espera y veras.
―Esa Nutella es para el pan. ―Dije.
―Lo sé, pero me gusta más como sabe aquí que en el pan. Me encanta como sabe aquí, la Nutella y tu sabor son una maravillosa combinación.
Coloqué la Nutella en mi parte favorita de Evan y comencé a lamerla.
― ¡mierda! ―Exclamó mientras sujetaba con fuerza mi cabello y empujaba mi cabeza. ― ¿quieres más, Eily?
―Quiero más Evan.
―Eres jodidamente maravillosa, nena.
Terminé mi desayuno con sabor a Evan y me puse de pie, lleve las manos hacia mi cara, Evan me ofreció su camisa y limpie un poco el desastre que había dejado en mí. Hice un gesto de enfado al darme cuenta que por mi calentura iba a tener que volver a bañarme, el gesto desapareció cuando me di cuenta que Evan iba a entrar conmigo y que él se iba a encargar de hacerlo. Cuando pase delante de él, aprovecho para golpear mi trasero.
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ABISMO
Randomy me subía al cielo, sólo para dejarme caer al abismo. ABISMO: 16 Primer actualización: 18/03/2020